Después de que todos estuvieran en la corporación cápsula para el torneo del poder Milk no fue estaba en la casa ella decidio irse al bosque estaba pensando en su vida hasta que llego al centro del bosque en frente suyo estaba un árbol que brillaba
Milk: Que hermoso... Pero que hago aquí... Este árbol me podría quitar mi enfermedad... Porque el día que nacio mi sobrino Goten le pedí a Shenglong que está enfermedad pero no pudo
¿?: Todo eso es en vano... (escucho detrás de ella, se dio vuelta asustada ante el repentino comentario. Pero lo único que vio era un gato, era de gran tamaño, blanco, naranja y negro; sus ojos eran grandes y amarillos. Y... ¿Tenía dos colas?) En efecto son dos Milk (no pudo ver si la boca del gato se movía, pero podía jurar que le estaba hablando)
¿?: Antes que nada soy hembra... (dijo el animal peludo de tres colores) Y segundo, no soy cualquier gato. Soy un Bakeneko... (dijo mientras comenzaba a lamer cuidadosamente una de sus dos colas. La otra oscilaba sobre su cabeza mientras escuchaba un fuerte ronroneo provenir de su garganta)
Milk: ¿Bakeneko? (pregunto mientras fruncía el ceño extrañada. Recordaba las historias que contaba su madre cuando era pequeña, de gatos que se transformaban en humanos, crecían enormemente y lamian lamparas de aceite. La mitad de ellas eran terroríficas, la otra mitad de miedo. Se levanto del suelo y limpio su vestido, analizando la situación y disuadir si se estaba volviendo loca. Se relajo un poco ante el pensamiento de que, después de “haberse casado con un hombre de otro planeta” y visto dioses del universo, no le debería extrañar que esos cuentos fueran más que cuentos) ¿Que es lo que buscan de mí? ¿Acaso escuchan mis pensamientos? (pregunto con todo el respeto que le podía dirigir a un gato)
¿?: Podría decirse que si... Hace un momento tú te preguntaste porque Sheng Long no pudo ayudarte... (milk miro sorprendida a la gatita. Seguramente estuvo allí todo el tiempo, observando su desesperación ante la búsqueda del deseo de no morir)
¿?: Tú eres un alma bidimensional Milk... (dijo la gatita sin más. La mujer la observo sin entender nada, la gata volvía a lamer sus manos y se las pasaba insistentemente sobre sus ojos) Eso quiere decír que tú muerte ya está predeterminada, y que ni bien suceda, volverás a la vida en otra dimensión
Milk: ¿Otra dimensión?
¿?: Cuando... Revivistes en la última guerra con Majin Boo... Rompierón ciertas reglas universales (comenzó
a decir acercándose a ella. Milk se apoyó sobre el viejo árbol y poco a poco se dejó caer, quedando sentada en el césped) No necesariamente fue culpa del dragón que gobierna las esferas, ellos no miden las consecuencias de los deseos que cumplen, sino hasta donde se limita su poder al cumplirlas (la gatita se sentó cuidadosamente en su regazo. Los grandes ojos amarillos se clavarón en los suyos despertándole una cierta incomodidad) Usted junto a los suyos, han vivido tanto tiempo alrededor de situaciones fantásticas y han roto tantas reglas que creen que cosas como la muerta definitiva no existe... En este mundo rigen los espíritus de la Tierra, por más Dioses del universo que existan, los humanos son hijos de la Tierra. Y tú alma pertenece a la Tierra (milk trago en seco, ¿espíritus?) Y aquellos que lideran los espíritus desean que cumplas un cometido. Deberías haber nacido hace tiempo
en otra dimensión y cumplir ciertos papeles allí, pero debido a la interferencia de dioses extranjeros haz tenido más tiempo en este mundo. Sin embargo, tú cuerpo sigue siendo terrestre y está comenzando a sentir el rechazo de esta dimensiónMilk: ¿Quieres decir... Que moriré? (pregunto con lágrimas en los ojos,
le parecía increíble que no hubiera forma de sobrevivir)¿?: Si... Pero volverás a vivir.
Milk: En otro mundo lejos de mis seres queridos... (dijo enfadada)
¿?: En aquel mundo tal vez encuentres otros seres queridos.
Milk: ¡¿Otros seres queridos?! No digas ridiculeces... (sentencio levantándose del suelo. No iba a rendirse. No iba dejar que después de todo su esfuerzo no cumpliera con el deseo de su mejor amiga Chi-Chi)
¿?: Milk... Tarde o temprano morirás. No hay vuelta atrás. Y cuando llegue ese momento, renacerás.
Milk: ¡Me niego rotundamente! (la gatita la miro con detenimiento por unos segundos)
¿?: ¿Y si te ofrezco un trato? (pregunto sin más)
Milk: ¿Un trato?
¿?: Hace ya mucho que deberías haber nacido en esa dimensión, tú no nacimiento complico varias cosas que se han solucionado parcialmente. Pero es necesario que se cumpla otras. Si llegas a morir volverás a nacer, pero entra en la probabilidad de que sea demasiado tarde cuando seas consiente de poder realizar las tareas para las que te necesitamos (se acercó a ella lentamente, podía sebtir el viento acariciando sus mejillas. Llamándola. ¿Era posible que sintiera eso? El murmullo de los árboles parecían estar diciendo su nombre una y otra vez) Si decides venir conmigo, y cumples tú cometido, podrás volver...
Milk: ¿Y ya no estaré enferma?
¿?: Cuando salvas la Tierra en una dimensión Milk, la salvas en todas.
La Tierra y sus espíritus son siempre los mismos, lo que cambia son las almas y las historias que recorren.
Si logras salvar estoy segura de que
te recompensaran.Milk: ¿Cuánto tiempo me tomara?
¿?: El tiempo no transcurre de la misma manera aquí y allá. Lo que
tal vez sean horas aquí sean años allá, o lo que tomen horas allá sean años aquí. No puedo decirlo con claridad.Milk: Déjame... Despedirme de mi “familia” (dijo dubitativa) Si no llego
a cumplir con mi deber seguramente me quedare allí por siempre ¿Verdad? (el felino pareció meditarlo un poco antes de contestar)¿?: De acuerdo... Tienes una semana Milk. Te buscare aquí, en esté bosque. No me defraudes... (dijo desapareciendo en la oscuridad, dejando solo el destello de sus ojos amarillos)
Milk giro hacía el resplandeciente lago, observo las dos enormes lunas
y se preguntó que era esa energía que parecía estar llamándola. Era como si sintiera desde su vientre una mezcla de tristeza y resintimiento; pero a la vez un infinito amor salir de su pecho. Lloro silenciosamente, sin saber si lloraraba por su fatídico destino o por esos desconocidos sentimientos. El viento soplo fuerte, rompiendo el
reflejo de la luna, dejando sobre la superficie del lago cientos de hojas. Había tomado una decisión. No solo porque no quería rendirse, sino por que de alguna manera le era imposible no responder a ese llamado