legión del dragón

el último mercenario

Westeros
Batalla del bosque susurrante
Año 299 d.c

En un enorme campo se puede ver como dos enormes fuerzas se enfrentan entre sí, pero está enorme guerra que solo ha provocado que un continente entero sangre una vez más pero está guerra no solo empezó por una razón, no está guerra nació por la codicia, venganza, mentiras y traiciones.

Pero está historia no comienza en medio de esta guerra, todo esto comenzó  unos pocos meses antes, antes de que lo imposible ocurriera, un evento que llegó de la nada y significaría mucho para la guerra por venir.

Winterfell.
Unos meses antes de la guerra.

En Winterfell las cosas no eran muy diferentes a como ocurrían en el resto de todo poniente. Todos tenían un trabajo que hacer después de despertarse cada mañana pero este día las cosas estarían apunto de cambiar para todos en el mundo.

En el cielo había algo que muchos pensarían que es imposible pero eso no cambiaba el echo de que estaba ahí.

Todos en winterfell podían ver con claridad lo que parecía una enorme montaña flotando en el cielo como si no fuera nada. Muchos de los campesinos creían que podría ser una bendición de algún dios, otros creían que era una señal de que el fin estaba cerca pero otros como Ned Stark creían que era mejor estar preparado para cualquier cosa que pudiera ocurrir tras la aparición de esta montaña.

Cuando Ned Stark el señor de winterfell y guardián del norte dió una orden todos sus soldados lo hacían, pero al fin y al cabo nadie sabía que esperar de lo que estaba ocurriendo ahorra.

Fortaleza onix
Gremio de la legión dragó.

La vida de julio nunca fue una muy envidiable, el perdió a sus padres como casi todos en la tierra, por exceso de trabajo, todo para que pudieran traer comida a la mesa. Pero en un mundo donde el planeta mismo está muerto y los humanos no hacen más que aferrarse a la supervivencia, olvidándose de como era vivir decentemente mientras eran explotados completamente por las grandes corporaciones de la tierra donde ser despedido de un trabajo era lo mismo que ser sentenciado a muerte. Bueno en un mundo así no hay muchas opciones.

Lo único que la gente podía hacer para poder desestresarse aparte del sexo, eran los múltiples juego que uno podía jugar. Yggdrasil era uno de los mejores juegos que habían salido en ese mundo, yggdrasil fue el juego mas conocido por su tremenda libertad que tenía el jugador para casi todo, construir tu base a como uno más lo quisiera, modificar tu avatar sin casi ninguna restricción, creación de ítems y exploración yggdrasil prometía ver un nuevo mundo donde uno solo tenía que jugar y perseverar para conseguir lo que quisiera.

En yggdrasil nacieron muchas leyendas debido a esto una de ellas fue el gremio mercenario más famoso de todos la legión del dragón.

Ellos eran muy conocidos por ser los mejores en obtener información, crear ítems, y ser los únicos jugadores que se especializan en dirigir tropas convocadas y sus numerosas y poderosas bestias.

Pero como siempre dicen, todo lo que tiene un inicio tiene un fin.
Hoy era el día en que yggdrasil sierra todas sus funciones. Algunos estuvieron vendiendo todo lo que tenían para recuperar algo del dinero real que habían invertido en el juego y muchos recuperando una buena parte gracias a que el líder del gremio mercenario los compro todo para cumplir un antiguo ajuste de cuentas antes de que todo terminara.
Pero antes de que eso pudiera ocurrir algo imposible ocurrió.

Mientras Julio se preparaba para destruir el gremio de los caballeros su antes de que el juego terminara ocurrió lo imposible, toda la visión de julio se apagó lo primer que le vino a la mente es que había ocurrido un fallo pero antes de que pudiera pensar en otras posibles causas Julio sintió un enorme dolor en la cabeza, fue tan fuerte que termino por desmayarse.