Elije tu sabor | CHANSOO

ONE

"Chanyeol j-joder!" Kyungsoo se estremece en las manos de Chanyeol y tiembla, sus muslos casi se hunden en la cabeza de Chanyeol, donde se encuentra; entre sus piernas. El pecho de Kyungsoo está subiendo y bajando a un ritmo rápido, el reposabrazos del sofá de dos plazas se hunde en su espalda baja. Sus gemidos hacen eco a lo largo de su sala de estar, cuando el suspenso de ser atrapado solo lo excita más.

Kyungsoo deja que sus dedos se deslicen en el cabello de Chanyeol y tira de el ligeramente cuando el mayor lame la vena de su polla. La lengua de Chanyeol se aplana, lamiendo hacia arriba , dibujando suaves "ah ah ah" de Kyungsoo. Kyungsoo empuja débilmente en la boca de Chanyeol, ganándose una palmada en el muslo que lo tiene extrañamente adicto.

Chanyeol se desprende de la polla de Kyungsoo con un suave pop, sus labios lucen absolutamente deliciosos e hinchados. Kyungsoo está tan fascinado que ni siquiera se da cuenta que sus dedos trazan los hinchados labios rosados ​​hasta que la lengua de Chanyeol se asoma para lamer el relleno de su pulgar mientras le da la mirada más hermosa.

Chanyeol se cierne sobre él, sus labios rozando la mandíbula de Kyungsoo, su boca fantasmal sobre su piel. Kyungsoo siente que está de vuelta en la universidad con Chanyeol inclinándose sobre él de esta manera, mirándolo de esa forma.

"¿Qué quieres, Soo?" Chanyeol silba contra los lunares del cuello de Kyungsoo, dejando escapar un fuerte gemido (algo que negará más adelante). Las manos de Chanyeol hacen remolinos y garabatos en la piel de Kyungsoo y espera a que el más joven dirija. Kyungsoo se aferra a los antebrazos de Chanyeol y resopla un "arruiname" antes de que Chanyeol trabaje en ese propósito alrededor del cuerpo de Kyungsoo y lo deje sin aliento.

Esto es definitivamente diferente al sexo de vainilla que Kyungsoo tiene con Junmyeon.

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No siempre fue así.

Kyungsoo podría haber jurado que Junmyeon era el elegido. Podría haber dicho que era total y absolutamente fiel a Junmyeon. Y lo fue, por un tiempo. Quería establecerse y comenzar algo hermoso, sumergirse en ser doméstico con alguien que es lo suficientemente responsable para manejar la vida doméstica.

Cuando Kyungsoo se graduó de la universidad, dejó a Chanyeol y toda la insoportable angustia que le había dado a lo largo de los años. Chanyeol era tóxico, impredecible; un desastre. Era todo lo que Kyungsoo no estaba buscando en una pareja estable. Le dolió mucho cuando tuvo que darle la espalda a quien creía que era el amor de su vida, pero valió la pena porque al final tuvo a Junmyeon.

Junmyeon era agradable y cariñoso, pero tenía vainilla en todo lo que hacía. Le mostró a Kyungsoo que estaba dispuesto a hacer que esta relación funcionara y que hacerlo feliz era su único propósito. Kyungsoo tenía toda la atención de Junmyeon. No era lo mismo, lo que evidentemente no es algo malo, pero en cierto modo lo era.

Kyungsoo pensó que el helado de vainilla puede ser excelente en ocasiones, pero lo único que obtuvo fue el mismo sabor todos los días. La monotonía no era lo que él pensaba que sería el hecho de una vida doméstica. Se sentía como en un limbo que iba y venía entre el sabor de Chanyeol a napolitano de ensueño y celestial o quedarse con el ya probado sabor a vainilla de Junmyeon.

Sabes que es malo cuando comienzas a reducir tu vida amorosa a los sabores de helados.

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Estremecerse en sus brazos siempre ha sido agradable.

Fue agradable cuando Chanyeol y Kyungsoo aprendieron por primera vez y mapearon sus cuerpos como los vírgenes asustados que eran. Hasta ahora, aún siguen conociendo cada lunar y cicatriz en los cuerpos del otro a pesar de no haberse tocado entre sí en años.