26 de Septiembre, Viernes.
Narra Paula:
Ahora mismo estoy tumbada en mi habitación, escuchando música y esperando que mi hermana termine de arreglarse. Es viernes, y como de costumbre, solemos salir por el centro de Sevilla con nuestras amigas. No somos muy populares que digamos, pero al menos las pocas que somos, llevamos juntas desde siempre. Nunca me han gustado mucho los chicos que se diga, por que no soy de relaciones. Mi problema es que tengo mucho carácter y no me callo nada de lo que pienso, a veces lo veo como algo bueno, pero también me perjudica en muchas cosas. Mi hermana, se llama Andrea, y ella suele ser más tranquila, pero también tiene lo suyo. No nos solemos pelear mucho, por que tenemos mucha confianza entre nosotras, ya que estamos en el mismo grupo y no queda otra opción. Me dispongo a hablar por WhatsApp con mi mejor amiga, Teresa, mientras en mis auriculares suena "All of me", creo que me podría pasar la vida escuchando esa canción.
-ANDREA, QUIERES TERMINAR DE ARREGLARTE YA, QUE NO VAS A UN PASE DE MODELOS.- Digo, elevando mi voz.
-No seas pesada, tía, que ya estoy.
Como siempre, ibamos a llegar tarde, llevabamos media hora de retraso.
Narra Andrea:
Mi hermana y yo nos dirijiamos hacia el centro de Sevilla, siempre soliamos quedar en la puerta del Corte Inglés, ya que estaba al lado del centro. Cuando llegamos, ya estaban Saro, mi mejor amiga, Lucía, Teresa y Marta esperandonos.
-Creo que debemos de aplaudiros, al menos hoy no habeis llegado tan tarde- Dice Saro, que se pone a aplaudir.
-Es culpa de mi hermana eh, que a saber por que se arregla tanto, tendrá algo por ahí suelto, pero no lo querrá decir la muy puta.
-Tía, pero qué dices, que verguenza- Susurro a la vez que le doy un golpe con el codo a mi hermana.
Después de un rato de risas, nos dirijimos al Starbucks. Cuando llegamos, nos sentamos en la mesa que estaba pegada a la ventana, y entonces vimos de entrar a unos chicos que se sentaron al lado nuestra.
-Tía, mira ese que guapo es.- Dijo Marta, señalando a un chico rubio, con los ojos marrones, y normal de estatura.
-Pues a mi no me parece guapo, me gusta más el que tiene melena- Susurro Lucía, ya que estabamos hablando bajito por que estaban al lado.
Entonces, no nos dió tiempo a hablar más, ya que se acercaron a nosotras con sillas y se quedaron parados.
-Qué pasa guapetonas, ¿nos podemos sentar con vosotras?- Dijo un chaval bastante guapo, aunque miré a un lado y ví a un chaval identico a el.
-Claro- Respondimos todas a la vez, y entonces ellos colocaron las sillas y se sentaron.
-Yo soy Jesús, encantado.- Dijo, el chaval que me habia parecido antes bastante guapo.
-Y yo soy Dani, y como veo que ellos no van a hablar, son Calum, Lucas y Juan. - Dijo su gemelo con una sonrisa de oreja a oreja, que iba señalando uno a uno.
-Yo soy andrea, y ella es mi hermana Paula, las demás con Lucía, Saro, Marta y Teresa.
-Vaya, sois todas muy guapas.-Dijo me parece ser que Calum, mirando a Marta mientras le guiñaba un ojo, entonces esta se sonrojó.
-Vosotros, ¿sois gemelos o mellizos?- Preguntó mi hermana,
-Gemelos.- Respondieron los dos a la vez.