En mi domo de hierro no sale ni entra nada,
sólo hay aparente oscuridad
y temperaturas con movimientos bruscos e intensos.
Los autos se escuchan como un pincel y su lienzo,
tan delicado que genera curiosidad
pero finalmente me encerraré y ocultaré bajo una frazada.
A veces los niños invaden mi espacio
al jugar con imanes, de esos grandes y resistentes.
No puedo ahuyentarlos porque todo lo hacen sin tocar mi domo
y ellos permanecen al imaginar dentro una hada o un gnomo.
Vaya que pequeños son, así como muy insistentes
pero no me apura, me gusta sentir la calidez de mi aislado palacio.
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Writing At Home [#PGP2019]
Puisi✨[#9 de #paisaje entre 130 historias] (8 de junio de 2019) ✨[#30 de #hogar entre 512 historias] (6 de julio de 2019) No hay como una tarde viendo a los pájaros volar, una tarde leyendo tus creaciones y decir "soy un genio" sin la necesidad de ser so...