A Bad End [Norman & Zazie & Bárbara & Vincent & Cislo]

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Cadáveres había donde quiera que se viese o caminase. Sangre derramada, tanto de impíos como de inocentes.

Viseras esparcidas por todas partes, oliendo el ambiente a muerte y desolación.

También había fuego quemando restos de lo que alguna vez fue una civilización, un reinado. Un mundo gobernado por la supremacía.

Ray y Emma no llegaron a tiempo. No pudieron detener a Norman.

No lo lograron.

Norman había cumplido su palabra. No hubo derramamiento de sangre de niños ganados.

O al menos, no de los que él conocía.

Sin embargo, él no salió impune. Había sido herido en combate y ahora, agonizaba.

Tanto así, que ni moverse o hablar podía, y respirar, era una tortura; no quería ser salvado, no porque no lo mereciera, sino por decisión propia.

Y a diferencia de la dicha que pudo haberle dado a ella, Zazie, Cislo y a Vincent y tal vez, a los demás niños, no la hubo; Bárbara se acercó a Norman, quien yacía tirado en el suelo, rodeado de su propia sangre, cenizas, cadáveres y uno que otro escombro.

Miró a Bárbara, y ella hizo lo mismo. Si hubiese sabido que aquello acabaría así, jamás hubiese accedido. Pues por sobre todo el odio y repudio que pudo haberle tenido a los Demonios, no se comparaba al dolor de haber perdido a alguien importante.

No como jefe, sino como amigo. Un miembro de su familia, aunque nunca fuese vista como familia para él.

Tiró su arma, lejos y se agachó para cargarlo, importándole poco o nada el ensuciarse con la sangre del chico. Le sonrió de la forma más dulce posible, apegándolo a ella con delicadeza.

A su espalda, venían Vincent, Cislo y Zazie.

No miró atrás, sólo lo miró a él.

— Vamos a casa, Jefe.

Y diciendo esto, se marcharon. Se fueron, dejando atrás a los demás. Dejando a la que era la familia que tanto quiso Norman proteger.

Tal vez había dolor, lágrimas, gritos, pero nadie dijo nada. No era el momento todavía.

— Bár... ba... ra...

— No hable Jefe, necesita descansar.

Y desaparecieron entre cenizas, fuego y desolación. Para jamás ser vistos de nuevo.

-Traumada Taisho

Es que ver la escena de Drogon y Daenerys, me dolió. Y pensé en Norman y su séquito.

No me arrepiento de nada.