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—Hoy será un buen día —Jungkook se miró al espejo mientras se sonreía.  

Por fin el día había llegado. Toda la semana, sin falta, había salido a correr. Estar en forma era vital para una carrera. Aunque no iba a ser mucho el desgaste físico, tenía que acostumbrar a su cuerpo si quería evitar lesiones. O incluso desvanecerse como ya había sucedido.

—¡Jungkook! —Gritó su mamá desde la cocina. —¡El desayuno!

Suspiró esperando desaparecer el nervio y que el viento se lo llevara lo más lejos posible. Bajó rápido por las escaleras y observó a su madre quien colocaba un enorme tazón lleno de waffles en la mesa.

—¿Porqué tanta comida, Mamá? —Preguntó mientras el olor le abría el apetito.

—Necesitarás energía para hoy —Tomó asiento. —Rápido, come antes de que se enfríe.

—No es un maratón, además dudo que sea saludable —Se burló. —¿No estarás preocupada, cierto? —Alzó una ceja mientras tomaba asiento.

—Sí —Admitió la mujer mayor. —Por eso hice toda esta comida, habría hecho algo mejor pero no me habría dado tiempo, así que come —Ordenó.

—De verdad es bastante... Pero no me puedo resistir a esos deliciosos waffles—Lamió sus labios con antojo.

—¿Tienes algún plan para este sábado? —Preguntó la Sra. Jeon antes de dar una mordida a un waffle.

—Nop ¿Porqué? —Jungkook comenzó a llenar su plato de waffles.

—Saldré con unos amigos de la oficina —Limpió su boca antes de continuar hablando. —Llegaré tarde

—Entendido —Se tomó un momento para degustar los exquisito que estaba el desayuno.

—¿Estarás bien? —Preguntó su madre.

El pelinegro detuvo un segundo su mandíbula y deslizó su mano por la mesa tomando la delicada mano de su madre.

—Ya no soy un niño —Sonrió dulce. —Sal a divertirte

—Bien... —Soltó aire mostrándose aliviada. —Puedes invitar a Hoseok, puede quedarse a dormir

—Oh, bueno, está muy ocupado... —Jungkook se detuvo un momento a pensar que ya no pasaban tanto tiempo juntos.

—Bueno, entonces cuida la casa por mí

—Sí, señora —Continuó degustando.

La miel caía por los bordes de su bocado, y Jungkook no estaba dispuesto a desperdiciar nada de comida. Todo le apetecía tanto y tras quince waffles llegó a sentir su estómago reventar.

—Ya es tardísimo —La Sra. Jeon. Limpió su boca mientras corría hasta donde se encontraba su bolso. —Por favor, si algo sucede...

—Mamá... —Le miró. No quería que su madre tuviera esa inquietud durante todo el día. —No pasará nada

—Ya ya, bueno —Se colocó los zapatos. —Me voy yendo

—De acuerdo —Acompañó a su madre hasta la puerta. —Ve con cuidado

—Te amo —Le abrazó. —Mas te vale ganar —Le dio un pellizco en la mejilla.

—¡Sí!

Jungkook veía a su madre tomar un taxi desesperada. Guardó la comida que había sobrado, cepilló sus dientes y salió camino al instituto. Estaba demasiado emocionado, tenía demasiadas esperanzas de ganar. Estaba ilusionado por saber cómo sería el ambiente. Y sobre todo, ya quería ver a Taehyung anotando canastas de tres puntos.

 TONTOS [TaeKook/VKook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora