Flowers on the wind | Minsung

Narciso.

Las clases diurnas de Jisung habían terminado ese día viernes un poco más tarde de lo normal, debido a que su maestra de lengua extranjera decidio que era buena idea aliarse con la maestra de castellano y darles como tarea un informe de un libro de la literatura inglesa, en lo que daba las intrucciones más una serie de libros como recomendación, las horas pasaron rapidamente y su mano dolía de tanto tomar notas. No dudo ni un segundo más en irse del salón apenas se dieron por finalizadas las clases y para cuando llegó al departamento y deslizó la llave en el picaporte, un suspiro aliviado salió de sus labios. Por fin estaba en casa.

—Hey, Ji, ¿Qué tal tus clases?—Fue lo primero que escuchó de parte de su compañero de piso, el cual, según lo que Jisung pudo observar, dandole un vistazo rapido, estaba sentado en el sofa aún con sus ojos en la pantalla de la televisión.

—Me estoy preguntando si es muy tarde para abandonar la universidad y considerar vivir bajo un puente, no suena como una mala idea—. Contestó, dejando caer sus llaves encima de la mesa y su mochila al piso. Hyunjin exhaló una risa breve, apretando el boton del control que le ponía pausa a la serie.

—Día duro, ¿huh?— Cuestionó, abrazando una almohada y apoyando su menton en esta, los ojos del más alto siguiendo los movimientos de Jisung. Ambos habían sido compañeros por una buena cantidad de tiempo, pese a que en un principio no se llevaban para nada bien, solían discutir todos los días, sin embargo, tras la reprimenda de uno de sus vecinos, tuvieron que aprender a convivir con el otro, en un principio fue imposible, pero al paso del tiempo fue todo tornandose mejor para ellos y finalmente terminaron, sorprendentemente, siendo buenos amigos.

—Podría decirse que si, ¿el tuyo como estuvo?—El más bajo alzó la voz cuando se dirigió a su habitación, buscando rápidamente cambiarse de las incomodas ropas formales que había tenido que usar para nada, dado que la entrega de la exposición se había aplazado. Definitivamente, un buen viernes no había sido, pero estaba bien, siempre podría mejorar, no se iba a arruinar toda la tarde solo porque un par de cosas no salieron como estaban planeadas.

Sacó una sudadera purpura de su armario, junto con una camiseta negra y unos jeans igual de oscuros, peinó su cabello rubio hacia atras, prosiguiendo a cambiarse de vestimenta, no muy seguro de si Hyunjin había respondido a su pregunta, creyó haber oído algo parecido a mis clases se suspendieron pero no estaba seguro, y si era así, Hwang Hyunjin era un maldito suertudo. Todo un viernes de no hacer nada, el sueño frustrado de Jisung.

El ruido de la televisión se hizo presente y supo que la atención de su compañero ya no se encontraba en la conversación, pero lo confirmo cuando caminó de vuelta a la sala de estar, notando al otro chico prendado nuevamente por lo que la pantalla mostraba. Jisung se apoyó en el respaldo del sofa con un deje aburrido y se detuvo a ver lo mismo que Hyunjin—Hwang, ¿estas usando mi cuenta de netflix de nuevo? ¿Y para ver un programa dirigido al publico adolescente femenino?— El tono burlón que tiñó su voz no pasó desapercibido para Hyunjin y como respuesta le dirigió una mirada, y si estas mataran, Jisung estaría metros bajo tierra.

—¡Sabrina no es para niñas!—Se quejó, casi parecia que su boca había soltado la peor blasfema del mundo, pero Hyunjin solo volvia más dramatico todo, así que estaba acostumbrado a que las cosas pequeñas fueran exageradas. La expresión que Hwang le daba era similar a la que le hubiera dedicado a alguien que hubiera pateado a su perro.

Jisung se encogió de hombros y sacó los cuadernos de su mochila, posicionandolos sobre la mesa para posteriormente volver a colgarsela en el hombro. Hyunjin lo miraba con atención, alzando sus cejas cuando entablaron contacto visual—¿Vas a la floristería?—Volvió a hablar el mayor.

—Sí, tengo que trabajar— Sacó su celular de su bolsillo para chequear la hora y esbozó una sonrisa de lado, todavia tenía tiempo y no quedaba muy lejos, pero prefería llegar con anticipación y no estar teniendo que dar excusas en el caso de que no lo lograra a la hora —Empiezo en una hora más, por cierto, ¿irás a la casa de tu novia?