Capítulo XXIII. HAS CAMBIADO DEMASIADO

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Seis meses después.

LEONARDO

Estaba en la fábrica en la hora de la comida, cuando me llegó un mensaje era de Melissa.

… Amor puedes pasar por los pañales de la pequeña, por favor 😊

… Si claro yo paso no te preocupes.

Ser papá es un poco difícil pero estoy demasiado feliz con la llegada de mi hija, aunque debo admitir que nuestra relación ha cambiado demasiado, ya no somos la misma pareja que antes si cuando estaba embarazada ya era muy indiferente con ella ahora lo soy mucho más y es que hace un mes conocí a una chica es la nueva Secretaría y se llama Linda, y es como su nombre lo dice muy Linda, me gusta y hemos salido un par de veces, se que esta mal porque engaño a Meli, pero es que con ella me siento tan bien, me entiende, me escucha, es una mujer maravillosa, no tengo otra palabra para describirla, y por eso he tenido problemas con Melissa ella ya se dio cuenta de que nuestro matrimonio esta mal, pero no quiero dejarla porque de alguna manera la amo y es la madre de mi hija, sin ellas estaría muerto, pero por otra parte esta Linda, esa mujer que llegó a darle un nuevo sentido a mi vida. Las amo a las dos y esta mal lo se, pero no se como hacer para decirle a Melissa que quiero el divorcio.

*****

Son las cinco de la tarde la hora en la que salgo y como siempre Linda me espera en la entrada para llevarla a su casa,  he tenido que inventarle que el carro es mío y no de mi esposa.

-Hola amor – me saluda con un beso y yo correspondo.

-Hola mi vida, como te fue hoy – pregunto pues me interesa mucho su vida.

-Bien ya sabes, pero un poco más cansado de lo habitual, como sabes tenemos que depositar las utilidades de ustedes y llevar un control, todo eso es muy desgastante – me dice recargada en el asiento.

-Oh entonces ya nos depositaron – dije emocionado. Ya sabía que hacer con ese dinero.

-Si ya están todos, solo que hasta mañana que les den sus nóminas se darán cuenta, no digas nada por favor. – me dijo algo preocupada por que fuera a decirle a alguien.

-Claro que no mi amor, me acompañas al súper, tengo que comprar los pañales de Lineth.

-Si claro vamos, yo también tengo que comprar algo – me dijo.

Al llegar al súper bajamos y entramos a la tienda ella se fue por un lado y yo por el otro, después nos encontraríamos a la salida, compre los pañales unas toallas húmedas y unos chocolates, se que le van a gustar, son sus favoritos. Al llegar a la Caja Linda ya me esperaba en la entrada, pague subimos de nuevo al carro y me dirigí a su departamento para dejarla, llegamos y me baje a abrirle la puerta, ella bajo y le entregue la Caja de chocolates que había comprado.

-Amor gracias, son mis favoritos – dijo dándome un abrazo y un beso en los labios.

-Lo se y por eso los compre pensando en ti.

-Eres maravilloso amor, gracias, oye, quieres pasar un rato – me pregunto tímida, en el tiempo que llevábamos no habíamos tenido intimidad nunca.

-Solo un rato amor, sabes como se pone Melissa si llegó tarde - comenté

-Por Dios Leonardo, déjala un rato no se va a ir, vamos pasa. – entramos a su casa y me senté en el sofá, ella entró supongo que a la cocina.

Cuando salió traía unas copas en la mano y en la otra una botella de vino, me dio una y sirvió el contenido de la botella, estuvimos bebiendo, pero no al grado de embriagarnos,  estábamos sentados platicado y besándonos de vez en cuando, cuando menos sentí ya estaba encima de ella besándola con desenfreno y quitando su falda, hasta quedar totalmente desnudos.

Traición #1 [TERMINADA]  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora