Leon y Nita: En cada partida.

Capítulo 3

- Narrado en primera persona; Nita.
- Tiempo de narración: Pasado.
- Corrección de narración hecha.

Capítulo 3.

Observé atenta el cuadro de posiciones dándome cuenta que el entrenamiento finalizó con Rosa ganando. Y cómo no, si tenía como 10 puntos de fuerza conseguidos en cajas, matando y además campeando en algunas ocasiones.

Lo último lo digo porque quedé cuarto lugar precisamente por su culpa. Iba a entrar a un arbusto para llegar al centro del mapa y vaya sorpresa fue encontrarme con ella, recibir todos sus golpes y terminar muerta en segundos.

Leon quedó segundo lugar por lo mismo, a pesar de haberla dejado a solo 100 de vida.

En cuanto cada uno vio la tabla de posiciones se fueron a sus respectivas habitaciones para descansar y prepararse para las verdaderas partidas.

Básicamente, nuestro "mundo" era como una escuela, pero en vez de aprender conocimiento básico era más de combate, con el objetivo de entretener - y ciertamente viciar - a los jugadores que entraban en el juego.

Originalmente éramos 26 brawlers en total y para distribuirnos en miles de partidas cada segundo ocupábamos cientos de clones. Los clones recibían lo que nosotros aprendíamos y se modificaban con el avance que tuviera cada jugador. Todo era computarizado y no entendía muy bien la verdad; solo sé eso.

Me dirigí saliendo de la sala de entrenamiento a la sección de mujeres donde residía. Oso estaba guardado en mi collar y solo salía cuando se lo ordenaba. No necesitaba la ulti para salir, pero en el juego se modificaba para que así sea.

Habían dos secciones en el lugar donde estábamos todas las chicas del juego.

La sección A se conformaba por Shelly, Jessie, Penny y yo, es por eso mismo que era ciertamente tan unidas a las últimas dos. Shelly me agradaba, pero no coincidimos mucho al ser ella mayor. Además que pasaba bastante con Colt y Pam.

Y en la sección B estaban Piper, Tara, Pam y Rosa.

Se rumoreaba que dentro de unos días una nueva Brawler se nos uniría y la verdad es que lo que es a nosotras nos emocionaba. Éramos apenas ocho chicas, los demás eran todos hombres, incluyendo los robots.

Jessie y Penny ya estaban en sus camas, la primera dormida y la segunda dejando su torreta para que descansara.

Invoqué a Oso para que saliera y comiera algo, luego de ello, volvió a mi collar y sentí como se puso a descansar. Hice lo mismo, solo que en mi cama.

Cerré mis ojos y no pude evitar pensar en lo que sucedió hoy. Las mismas preguntas volvieron a mi cabeza. ¿Por qué me salvó si era solo un entrenamiento? ¿Por qué no me mató inmediatamente?

Era un chico raro, sin duda alguna.

Pero...

Eso se me hacía bonito.

¿Por qué?

— Nita, Nita — sentí la voz de Penny de fondo — ¿por qué estás sonrojada?

No contesté y me hice la dormida tratando de hacer ronquidos "reales". No quería responderle.

Bueno, no sabía qué responder a ello.

Tampoco sabía por qué haberlo recordado me había provocado eso.