Somos Familia

Capitulo 1: "-Te presento a Thiago"

Pestañee varias veces mientras me acostumbraba a la luz del sol que asomaba por mi ventana, mi cuerpo yacia boca abajo en la cama, como acostumbraban mis brazos y cabeza bajo la almohada, mientras que mis piernas abiertas casi se salen de la cama. Enfoque mi vista borrosa por las mañanas y el reloj digital marcaba las 8:03 am, enterre mi cara en el colchon y resople. Hoy es 24 de Diciembre, vispera de navidad, tendriamos que ir a la casa de mi hermano mayor, al que por cierto lo vi dos veces en mi vida, a pasar una semana entera para celebrar las fiestas. Como es costumbre de mi familia siempre nos tendriamos que juntar en la casa de mis padres, pero este año decidimos ir a la casa de mi hermano ya que nunca venia a ninguna fiesta, ni cumpleaños, ¡ni siquiera un mensaje!.

Dicen mis padres que se separo de su esposa y esta demasiado deprimido para celebrar, al igual que sus dos hijos, que nunca tuve el honor de conocer. Asi que para tratar de levantarme el animo, decidimos pasar a visitarlo.

Me pregunto como seran sus hijos.

Se como se llaman y sus edades, pero nunca me tome el tiempo de buscarlos en Facebook o en Twitter, era algo que no me interesaba, despues de todo soy la tia y como todo sobrino, no va a querer que un familiar suyo lo tenga como amigo. Segun mis padres el mas grande, Thiago, tiene 18 mientras que el mas pequeño, Trevor, solo 16.

Lo normal, lo comun y lo logico en la vida es que yo tenga 35 o 36 años, pero en vez de eso tengo 17. Mis padres, los abuelos de todos, son.. ¿como decirlo? Sexualmente activos, muy modernos, no me quejo. Su apariencia, forma de vestir y hablar, daria a pensar que son mucho mas jovenes.

Ya un poco mas despierta mire la hora, 8:30 am, ¿tanto tiempo paso?

Bufe como por tercera vez en media hora y me levante pesadamente, cuando ya estuve de pie lleve mi mano derecha a mi nuca y rasque con fuerza al observar el tremendo desorden que se veia en mi habitacion, la ropa tirada y arrugada en el piso, bombachas y corpiños sobre la silla del escritorio, mientras que la n.. ¿Eso es un pedazo de pizza? Diugh, habia pisado un pedazo podrido y mohoso de pizza.

Se podria decir tranquilamente que yo no era una de esas chicas que tenian todo en orden, adictas a la limpieza, un lugar designado para cada objeto.. nah, es mas, en mi familia me tenian tachada de "topo" ¿por que topo se preguntaran?

La historia nacio el dia de mi cumpleaños, en exactamente esta habitacion, cuando mis padres y mis primas vinieron a despertarme por la mañana, encontraron esta misma pieza a oscuras pero en cuanto prendiero la luz por poco se desmayan, a mi prima hasta le bajo la presion. Yo yacia acostada bajo las sabanas de mi casa, que estaban debajo de la ropa de anteayer, que estaban debajo de la ropa de ayer, que, en su defecto estaba bajo la ropa que me iba a poner el dia contiguo. Despues de esa fecha mi adorable y hermoso papi, notese el sarcasmo, me apoodo "topo".

En algun punto de mi cuarto mi celular comenzo a sonar, busque debajo de la cama, sobre el escritorio, hasta en el inodoro, pero no lo encontre. Deje que suene hasta que se apago, suspire aliviada que el tono de mi celular dejara de molestarne, pero al instante note como entraba un mensaje a mi buzon de voz y como una parte de mi cama se iluminaba. Agarre las sabanas y las sacudi todas de un solo tiron, luego todo paso en camara lenta, mi precioso celular de tapa rosita salio volando aterrizando en el suelo, cerre los ojos para evitar ver el asesinato que acababa de cometer, pero no se escucho nada. Me acerque al otro lado de mi cama y lo vi, perfectamente enterito sobre un monton de ropa apilada.. y con mal olor.

Suspire aliviada, el dia estaba a mi favor.

Agarre el celular entre mis manos y abri el mensaje, que por cierto, era de mi mama: "Mas vale que estes levantada topo"

Le respondi un rapido punto, si un punto: "." esa era mi forma de clavar vistos, contestandoles pero a la vez no. Agarre el cargador, que milagrodamente estaba sobre la mesa de luz y puse a cargar mi movil, solo por las dudas.