El Chico Pink Jimin. (YoonMin)

Pink Jimin en Rosa.

Arbustos por todos lados, el sonido y canto de las aves, pequeños animales corriendo de un lado a otro con suma rapidez, el cielo sin poderse visualizar de tan altos que los arboles eran, parecia que el tiempo estaba detenido, que no existia una salida en aquel lugar, mirar todo una y otra vez notando que todo era exactamente igual, ¿Estaban dando vueltas?; el chico de cabello rosa caminaba lentamente escuchando las hojas y ramas romperse con cada paso que daba, su sueter rosa lo ayudaba a cubrirse del frio que cada vez que caminaban se hacia mas presente, anhelaba tener unos guantes o una bufanda para asi poder cubrirse del todo, llevaban una hora caminando y aun no salian de aquel bosque, su mochila como siempre lo acompañaba, ahora con mas cosas de las que tenia y con incluso ropa del chico palido que se encontraba con el, estaba exahusto y su estomago deseaba comer, el palido por el contrario caminaba unos pasos mas adelantados que el, caminando sin parar, este tambien tenia la misma ropa con la que habia dormido aquel dia, sueter negro y pantalon negro, solo que ahora tenia unos converse negros y una mochila lo suficientemente grande con la que cargaba las primeras cosas que creyo que servian para un escape.

- Detengámonos un momento.

Menciono el palido deteniendo su camino, al igual que el chico de cabello rosa, estaba exhausto, después de haber escuchado aquella platica entre la policia y aquella mujer, el pálido tomo diversas cosas y suficiente ropa para ambos metiendolas en ambas mochilas, había optado por otra mochila lo suficientemente grande que llevaría el chico de cabello rosa pero este se negó abrazando su propia mochila rosa a lo que el pálido solo resongo arrebatandosela para meter las cosas ahí, habían salido por la ventana tracera del cuarto del pálido puesto que las camaras no enfocaban ese lugar y lo que estaba tras todos esos departamentos era nada más que bosque, con un camino largo a lo cual el pálido no tenia opcion, era eso o ser arrestados, sin embargo conocia un poco del bosque y eso era un poco tranquilizador, por lo que ahora se encontraban ambos caminando desde ya una hora por aquel lugar sin salida.

- Esto es una mierda. - Hablo el pálido sentándose entre las hojas cafés del suelo, estas haciendo un "crack" en cuanto este cayo sobre ellas, sus manos se apoyaron detrás de su espalda sosteniendose, elevo la mirada hacía arriba mirando lo largo de los troncos de los arboles que estaban ahí. - ¿Así se siente no?, la...¿Adrenalina?, jamás había experimentado eso, mi corazón estaba acelerado y me emocionaba de algún modo. - Dio una delineada sonrisa, sus labios delgados dejaban ver aquella sonrisa con sinceridad.

El chico de cabello rosa por el contrario se concentró en el pálido, en esa sonrisa que por primera vez veía, sincera, sin enojo, sin ira; podría decirse que le gustó, de algún modo le gustó, este mismo sonrió también, contagiandose y entendiendo lo que el chico de piel pálida trataba de decir y es que, ahora notaba el miedo del pálido en cuestiones pasadas, el jamás había experimentado ese tipo de cosas y ahora comprendía porque su actitud, el chico rosa estaba acostumbrado a esas cosas pero el pálido, este lo experimentaba por primera vez.

- Suena patético, yo, nunca había estado en una situación similar, no por nerd o algo así, viví cosas distintas pero lo suficientemente aburridas. -Mencionó dando un suspiro y bajando la mirada al suelo. -Sin embargo... -Su entrecejo se arrugo deteniendo sus palabras, su mirada dejo de enfocar al suelo y busco al menor, el chico lo miraba atento, con su cabeza de lado, como un cachorrito tratando de entender a su amo, su cabello rosa lo hacía verse adorable, su nariz y mejillas rojas por el frío lo hacían verse más.

El pálido parpadeo un par de veces y negó con la cabeza sentándose normal, ya no se sostenía de los brazos y tomó su mochila para tratar de buscar algo; El chico de cabello rosa de algún modo se sintió intimidado y avergonzado, su mirada ahora estaba en la manga de su suéter tratando de jugar con un hilo que sobresalía de este en cuanto se percató que el pálido lo había notado.