The Red Queen

Cap#2: Mi pequeña conciencia

Al día siguiente desperté con muchas ganas de ir al insti -Y no lo digo por el hecho que me guste, solo quiero saber un poco más de ese lugar-, me levanté de mi cama para ir a tomar una ducha como normalmente lo hago, luego de bañarme tomé una toalla y la puse alrededor de mi cuerpo, salí del baño; fui a mi closet y tome un pantalón negro rasgado, una camisa negra  y una chaqueta negra; termine de alistarme, baje al cocina para tomar algo de comida, mi nana no estaba, era muy raro, busque una tostada y la comí con jugo de naranja -Lo se, no es el mejor desayuno, pero por lo menos comi algo antes de irme-. Subí a mi habitación a buscar mi bolso y cartera, entre a mi cuarto y solo vi mi bolso, pero y mi cartera, donde esta?, busque y busque pero no la encontré; me trate de concentrar un poco más en lo que estaba sucediendo, era tarde me iban a cerrar el insti y no encontraba mi cartera, Dios donde la he dejado ahora?, me senté a meditar un momento y de pronto escuche una vos en mi cabeza.

-Hey tú idiota, ¿que tanto buscas? -hablaba una voz en mi cabeza, lo cual no tenía sentido, tal vez sea mi conciencia-. Y quién eres tú?, porque apareces en este momento, necesito concentrarme y de pronto apareces tú, qué demonios -Dije algo confundida y enojada.

- Oh vaya Helena,¿ ya me olvidaste ? , Así que esos psicólogos si te ayudaron después de todo. -No entendía del todo lo que estaba pasando, pero esto no está normal.- Que haces aquí de nuevo, por tu culpa estuve mucho tiempo encerrada en un lugar para locos, era muy sofocante estar en ese lugar, ya vete, no quiero volver a ese lugar, no otra vez, así que no te quiero aquí, ya déjame en paz-. No, no quiero, me quedaré hasta que te vuelvas loca.- Dijo la voz en mi cabeza, Dios no soportaba estar en esta situación. - Bueno si te vas a quedar, dime dónde he dejado mi cartera?, Espero que por lo menos me sirvas para algo. -No soy tu maldita esclava, por lo menos dime Alice, así me llamo. - Ya dime dónde dejé mi cartera!. -Mi paciencia se estaba acabando y está estúpida vos ya me tenía hasta la madre. - Está en la repisa del baño, estúpida, deberias de poner más atención a lo que haces.-: Oh mierda ya es tarde no lo no había notado, tendré que darme prisa. 

Desde pequeña escuchaba pequeñas voces en mi cabeza, la primera que escuche fue la de Alice, comencé a  escucharla cuando tenía 5 años, mis padres no le daban mucha importancia, y yo no me sentía  sola con ella, hablábamos por  mucho, mi abuela notó que lo que me estaba sucediendo no era normal, y tomó la decisión de llevarme a terapia por unos meses, al ver que las terapias no hacían nada me interno en una clínica para que trataran mi problema, pase muchas pruebas para no volver a escuchar voces; cuando estaba en ese lugar vi a un chico de tal vez unos veinte año, el cual lo tenían encerrado en un tipo de celda, el tenia una camisa de fuerza puestas y gritaba mucho, cada vez que gritaba llegaban los enfermeros del lugar, le inyectaban un liquido raro en el brazo, el chico se calmaba por ratos, un día quise saludarlo, pero me negaron la entrada el chico estaba sentado en el piso se veía algo triste, me daba algo de lastima verlo asi, pero no podía hacer nada; pasaron los días y el chico al fin pudo salir de ese lugar, salió al patio y le seguí, queria saber como estaba y por que le inyectaban ese líquido extraño, salí y lo vi tirado en el pasto, me acerque para hablarle pero no quería hablar, solo me decía que lo dejase solo, y no, me negaba dejarle allí , luego de insistir por mucho rato el chico decidió hablarme. Pregunte muchas cosas, el chico solo contestaba, hubo una pregunta la cual su respuesta no me dio buena espina de este lugar, Pregunté el por que le inyectaban a cada rato y el por que hoy lo han dejado salir a tomar aire, el chico me miro en ese momento y dijo -Este lugar no es bueno para una niña de tu edad, no deberías estar aquí, ellos nos quieren muertos, ellos no quieren ayudar, ellos solamente quieren que los dejemos de molestar, quieren deshacerse de nosotros, vete niña antes de que sea tarde, ya que para mi ya es tarde, por fin se desharán de mi de una vez por todas, niña vete, si te preguntan de las voces diles que no escuchas ninguna, y que estas bien, no respondas lo que ellos quieren que respondas, vete, y no regreses este lugar es peligroso, ellos le meten cosas tontas a la cabeza  de tus familiares, así haciendo que te quedes aquí, luego dirán que estas muy mal para volver al mundo exterior, y que lo mejor será que te quedes más tiempo en el hospital, por ultimo diran que estas sufriendo mucho y que es mejor que te vayas de este mundo, por lo que tu familia pensara que tal vez ellos tengan la razon por que son profesionales pero no lo es solo es una mentira más-. En ese momento mi corazón se aceleró, y no sabia que hacer, el chico se levantó para ir adentro, pero no pudo llegar las inyecciones comenzaron hacer efecto, y el chico de ojos verdes murió al ser  las diez de la mañana, ese lugar era malo y el pobre chico sufrio mucho gracias a este lugar, mis consultas seguían, pero esta vez le hice  caso al chico, y menti al pasar unos dos años por fin pude salir, estuve ignorando tanto a mi voz que no la volví a escuchar por un tiempo. Luego de tantos años seguí visitando la tumba de aquel chico, gracias a él no termine igual a él, hice una promesa el día que él murió y fue cerrar ese lugar para que todo acabarse algún día, y lo lograre.

No había visto la hora, era muy tarde, llegue al insti, corri lo mas rápido que podía, al llegar a mi salón ya estaba cerrado, mande un mensaje a uno de mis compañeros de clase para que le dijeran a la profesora que estoy en la puerta, espere hasta que escuche a abrieron, entré y tomé asiento de inmediato.

-Señorita Quinn, ¿que son estas horas de llegar ?!  - Dijo la profesora enfadado, no la culpo, pero por lo menos llegue a la clase. - Perdón, vivo muy lejos y había mucho tráfico, le prometo que no volverá a suceder-. Eso espero Quinn, por que esta  sera la ultima vez que llega tarde, la próxima vez se quedará afuera,pues bien,saquen su libro de Ciencias vayan en la página 20 por favor .- dijo la profesora a toda la clase.

-Que estupideces dice esta tipa, creo que quedaría mejor debajo de un puente o algo por el estilo es una molestia, no querer dejarnos entrar, qué le pasa?.--Ya callate no puedo escuchar por tu culpa, no necesito que me distraigas, además necesito salir viva de esta clase.  

Ya han pasado dos horas desde que estoy en ciencias y esta profesora  a hace que toda la clase se quede dormida. - Bueno esto es todo por hoy , ya pueden salir a receso. Oh por Dios , me escucharon después de todo; cuándo salí del salón vi a Maia parecía que iba a la cafetería .

- Hey Maia ! -le grité. -Ah hola Helena , ¿cómo estás ?.- Bien, ¿ y a dónde vas con tanta prisa?- pregunté rápidamente. - Voy a la cafetería del norte, quieres acompañarme? -Pregunte sonriendo, tal vez me vea algo rara, tendré que dejarlo. -Si , claro vamos, total no tengo mucho que  hacer.

Salí de mi clase de español y oí que alguien gritó mi nombre me di la vuelta y vi que era Helena , es increíble que me aprendiera su nombre tan rápido ya que siempre se me olvidan .Hablé rápido con ella porque iba donde mis amigos, pero después le dije que fuera conmigo, la verdad no se si fue una buena idea , ya que ella no los conoce. Pero también pienso que fue una buena idea ya que es nueva y no tiene amigos . Caminamos hasta donde estaban mis amigos y no pasó mucho tiempo para llegar al norte así que los dirigimos a la cafetería y bingo allí estaban mis amigos ...

Llegamos a la cafetería del norte y vi como a ocho personas que nos estaban observando creo que son los amigos de Maia ..

- Mira ellos son mis amigos - Dijo Maia-,Tranquila les caerás bien. -Dijo con una sonrisa.

- Eso espero, no quiero caerles mal ,solo quiero ser su amiga. -Dije algo aterrada, me daba miedo el saber cómo me iban a ver, y si no les caigo bien,y si me dicen que me aleje, llegamos a la mesa dónde estaban los chicos y ella me presentó con cada una de ellos .

- Hola chicos miren ella es Helena Quinn y es nueva en este insti y es mi nueva amiga también , mira Helena ellos son los chicos pero ellos se van a tener que presentar ya que yo no lo haré por ellos. -Dijo ella mientras los señalaba. Ellos no dijeron nada al respecto, fue muy incomodo el silencio que hubo después de que Maia me presentara, tal vez no les caía bien, después de todo quien se acercaria a mi, no creo que les guste la idea que yo sea la nueva amiga de Maia. - Oh es increíble que tenga que hacer esto -Dije algo enfadada ya que le había prometido a Helena que esto no pasaria pero, ya que, me tocara-, bueno, ella es Cassandra Trombino , ella es Jeanette Lawson , el es Marcus Hood , ella es su novia Sylvia Armstrong , ella es Lissa Hemmings , el es Michael Kaladia , el es Billie Kaulitz y bueno el es Andrew Santorski -Dijo sus nombre señalando a cada uno de ellos. - Es un gusto conocerlos -Sonreí , esto fue muy incómodo tanto para ella como para mi.  ¿ Falta alguien verdad ?.

- Si falta Oriana , ¿no?. -dijo el chico ojiazul, el chico se veía muy apuesto, creo que me ha llamado un poco la atención. - Tienes razón no ésta Oriana , Bueno no importa luego la conocerás . - Esta bien, no importa. -No quise darle mucha importancia a que faltaba alguien, mejor me quede viendo a los que estaban con nosotros, en este momento, los chicos no estaban tan mal, pero hay mejores, por ejemplo: el ojiazul, quede impactada con el, era tan único y tan perfecto, y yo aqui toda desmadrada y rara.

Hablamos por un rato, no pasó mucho tiempo para retirarnos,  Maia y yo nos despedimos de los chicos, ya se estaba acabando el descanso, volveríamos a ver a los chicos en la hora del almuerzo. Maia y yo entramos a nuestros salones, yo solo estaba esperando la hora del almuerzo para ver a Andrew, me senté y espere a que llegase la hora del almuerzo.