Unclothed (Omegaverse)Yoonmin

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Yoongi no entendía porque  aceptó la locura de Jimin de quedarse en Busan, pero no accedió a quedarse callado. Yoongi  llamó a los padres de Jimin apenas tuvo oportunidad. La señora Park casi se desmaya y su Pa estaba histérico con todo lo que dijo Yoongi. Lo único que mantenía a Yoongi cuerdo era que muy pronto tendría a los padres de Jimin ahí y esperaba con ansias su llegada, tal vez ellos harían entrar en razón a Jimin para que viajara con él a Estados Unidos o por lo menos esperaba que pudieran obligarlo. 

-  Yoongi-escuchó la suave voz de Jimin en medio de la oscuridad. 

- Sí-respondió con cansancio en su voz, pues si bien estaba cansado no lo estaba tanto como para pegar las pestañas, al menos no esa noche. 

- ¿Estás enojado conmigo?-Preguntó Jimin en voz baja con temor a la respuesta. 

- No,  no estoy enojado contigo, solo... no me gusta la decisión que tomaste. 

- Yo... lo siento.

- No te disculpes por eso, nunca te disculpes por tus decisiones, son tuyas y no debes dejar que nadie tome las decisiones de tu vida por ti, aunque admito que desearía obligarte a cambiar de opinión sobre esto, estoy preocupado por ti-al terminar de decir aquello acercó aún más el cuerpo de Jimin para besar su cabeza. 

-Sé que estás preocupado por mi  y quiero agradecerte por todo. 

Tras decir esas palabras con toda la sinceridad que pudo, sintió como los brazos de Yoongi apretaban su cuerpo contra el suyo y él solo se acurruco en el fuerte pecho de su alfa acomodando su cabeza en sus pectorales, abrazando su cintura con sus brazos y enredando sus piernas en las de su alfa, logrando así sentir la seguridad de estar entre sus brazos, escuchando las palpitaciones de su corazón. 

El sonido suave y regular de las respiraciones de Jimin hicieron saber a Yoongi que su omega ya estaba en un profundo sueño y aún así no logró detenerse con las caricias que repartía en su cabello, caricias pausadas y suaves. En ese momento Yoongi recordó a su difunto padre, él solía hacer lo mismo cuando Yoongi se sentía atemorizado por alguna razón  o cuando se sentía inquieto por algún problema. Esa pequeña acción hacia que su interior se tranquilizara, que tomara una calma reconfortante, esa era la sensación que le transmitía su padre con solo unas cuantas caricias en su cabello. Lo extrañaba demasiado y aun dolía su partida, 

Con pasos lentos Yoongi salió de su habitación temiendo despertar a Jimin, cruzó la sala de estar y fue directo a la ventana, desde allí observó la patrulla  estacionada frente a su casa y con un suspiro pensó cómo es que todo había llegado hasta ese punto, ¿desde cuándo las cosas se habían tornado de esa manera?. Un loco asesino estaba  tras de Jimin y él se sentía impotente, con un puño golpeó la pared a un lado de la ventana y apoyó su cabeza en el cristal, no podía perder a alguien de nuevo, si algo le pasaba a Jimin estaba seguro de que esta vez el dolor lo consumiría completamente. El temor de que algo le pasara a Jimin calaba por sus huesos. Quería protegerlo, llevarlo  lejos y no dejar que nadie le hiciera daño. 

En medio de sus pensamientos sintió un par de brazos rodeando su torso, la cálida sensación de la mejilla de Jimin a sus espaldas hizo que se sobresaltara. 

-No estás bien-afirmó Jimin en un susurro. 

- No sé cómo protegerte-dijo con total sinceridad. 

- Solo mantente a mi lado, eso es suficiente para mi. 

Yoongi giró su cuerpo alejando las manos de Jimin suavemente de su pecho, al dar la vuelta observó esos ojos deslumbrantes que lo miraban con un brillo despampanante. Tan frágil pensó, tan mío.  -Ven conmigo a mi casa, vamos a irnos muy lejos, donde nadie pueda hacerte daño-casi suplicó.