Cap. 15: Asco.

1.2K 91 101
                                    

19-01-20.

Es tarde y ya estamos volviendo a casa. No he podido salir del trance. Sigo pensando en Marta y María. Esto está llegando demasiado lejos. Si esto era sólo un experimento, basta. Es demasiado. Está durando demasiado. Tengo que hacer algo.

Llego a casa, te oigo llamarme pero no te hago caso. Dejo las cosas en la cocina y Sabela también habla conmigo pero no soy capaz de escuchar ni hablar con nadie. Si hablo me voy a romper. Voy a gritar. Voy a romperle la cara a alguien. Voy a desatarme las cuerdas que me hacen estar callada. Y ya nadie me va a volver a atar. Nunca.
Sabela me tambalea y la miro a los ojos. Se la ve preocupada. Yo no soy capaz de salir del trance pero soy consciente de que la preocupo. Me sacude más fuerte para que me despierte pero yo no reacciono. Mis ojos no transmiten absolutamente nada.

Sin hacer ni un solo ruido me giro y me subo a mi habitación. Escucho las voces de vosotros pero de verdad que soy incapaz de bajar y deciros todo lo que siento. Si lo hago esto explota. Y yo me muero.

Cierro la puerta tras de mí y me siento en la cama frente al espejo que tengo. Me levanto. En silencio. Os habéis callado.
Me miro y no me veo. Mi reflejo ha dejado de ser yo. Mis ojos no transmiten nada. Mi cuerpo está pálido. Mis mejillas no tienen el colorete que me caracterizaba y mi pelo no está revuelto. Está muerto. Me he muerto. Sólo respiro. No soy capaz de ser nada. Y qué rabia no ser yo. Qué rabia mirarme como lo estoy haciendo y no encontrarme. Me veo en un vacío. En un lugar negro a mis alrededores. Donde no hay nada. Estoy sola. Incluso allí me busco y no me veo. Miro alrededor. Negro. Oscuro. Y me entra el miedo. No sé si voy a volver a encontrarme. Y no quiero ser lo que soy siempre. Y se me pasa por la cabeza la idea de dejar de respirar. Total, ya estoy muerta.
Vuelvo a la realidad y me vuelvo a encontrar en esa habitación de paredes blancas amarillentas, de ventana cerrada de madera oscura, de cama de muelles. Allí es donde ha quedado la Alba viva.
Vuelvo al reflejo de mi yo de ahora. Es increíble cómo en tan poco tiempo dejas de ser tu. De existir. De vivir. De ser.
Me florece un sentimiento a parte del miedo. Miro mis ojos. Por fin aparece algo. Rabia. La mezcla de rabia y miedo. Iba a explotar en cualquier momento y no sabía cómo iba a hacerlo. Tal vez soy una granada que sólo me destroza a mi. O tal vez una bomba nuclear que mata todo.
Cuento hasta cinco para dejarme llevar por mis nuevos compañeros de vida.

Uno.

Dos.

Tres.

Cuatro.

Cinco.

Y Miedo me deshidrata. Me maneja los ojos. Me los llena de sí mismo y explotan. Sólo hay agua. Casi ni veo. Me da igual. Por un tiempo que me deje controlar. Tal vez me viene bien.
Rabia por su parte me grita. Me maltrata. Me hiere pero esque ya ni me duele. Me he metido en la cajita pequeña que tengo al lado del corazón a ver cómo me destrozan mi cuerpo físico.
Rabia es más fuerte. Pega al espejo. Rompe todo lo que pilla alrededor y tira todas las cosas de aquel lugar. Y grita. Desgarra mis cuerdas vocales. Y da bastante respeto verla. Es muy fuerte. Demasiado. Da más golpes a su alrededor. Sobre todo la ha tomado con la pared. La agrieta y empiezo a asustarme un poco de la fuerza que tiene. Me preocupo cuando veo manchas rojas en las grietas. Sé que son mías. Pero quiero dejar que se desahoguen. Ellas nunca toman el control sobre mi.
Miedo está aterrorizado de Rabia. Se mantiene al margen dejando algún que otro sollozo como máximo. No se atreve a desatarse porque ve que Rabia ya lo está haciendo.
Cada vez hay más manchas rojas. Y Miedo no puede parar de dejar salir agua.
Va a ser que era la bomba nuclear.
Oigo el ruido del pomo de la puerta y salgo de mi caja porque debo volver a agarrar el control sobre mí. No puedo dejar que Rabia me maneje porque si entra alguien va a matarlo. Pero no puedo. Tiro de los cables para que pare y se vaya pero no soy capaz de echarla. Es demasiado fuerte. Rabia se ha apoderado de mi y no puedo contra ella. Miedo intenta acojonarla pero ni él puede. Ni los dos juntos. Me está controlando y vas y entras. Y Rabia se vuelve aún más fuerte. Y va hacia ti. Tiro aún más fuerte de los cables y los sollozos se me transportan a mi. Como te haga daño me voy a morir. Eres lo único que tengo. No te vayas. Te juro que no soy yo.

-Albi...- Y te asustas de Rabia. Normal. Da miedo. No puedo controlarla. Párala Nat. Corre. Ayúdame a que se vaya. Dila que me deje tomar el control.

-¡Es tu culpa puta zorra! ¡Ojalá te mueras! ¡Estoy así por ti! ¡Que he dejado de vivir Natalia joder, eres la culpable de todo esto!- No la hagas caso, por favor. Te quiero.

-A-Alba... ¿Qué...?- Y me lanzo a ti. Te empujo contra la pared y te agarro del cuello. E intentas quitar mis manos de ti. Tiro de la máquina de mi cabeza y forcejeo tanto con Rabia que al final me vuelvo más fuerte y la destrozo. La rompo en cachitos y te suelto el cuello cogiendo yo las riendas de mí. Te miro a los ojos y Miedo se hace más fuerte junto a mi para hacerte ver lo que siento en realidad. Me aparto de ti y Miedo me flaquea las piernas para que caiga al suelo porque no puedo más. Todo esto me supera. Perdóname Natalia. No quiero meterte en esto.

-S-Soy un monstruo... A-Aléjate de mí Natalia...- Miedo toma una de las riendas desgarrándome. Lloro mas fuerte que nunca y tú te agachas a mi lado. Me abrazas y yo ya si que no puedo más. Eres un puto ángel Natalia. En serio, vete. No quiero hacerte daño.

-Eres preciosa Alba.

-Me-Mentira. A-Aléjate. Te voy a hacer da...daño...- No puedo hablar. Me abrazas y me ofreces tu pecho para llorar. Y me aferro a ti. Me abrazas fuerte y yo no puedo parar de llorar porque me cuidas aunque sea así de odiosa contigo.
Rabia ha desaparecido. La has hecho desaparecer. Gracias Nat. Iba a comerte. Iba a comer al amor de mi vida. Y me niego.

-¿T-Te ha hecho daño?- Te tengo que preguntar.

-¿Quién?

-Rabia.

-¿Quién es rabia?

-Quien te ha cogido del cuello.

-No, no me duele. No te preocupes por mí Albi.

Nos quedamos calladas. El silencio sólo se acompaña de un poquito de Miedo. Le agradezco que haya estado y se vuelve a su lugar. Me abraza y me dice que no es tan malo. Y al fin y al cabo no lo ha sido.
Aprovecho el silencio para mirar el caos de Rabia. Mis manos están destrozadas y noto mis nudillos arder. Veo la sangre de mis manos y suspiro en silencio. Me aprieto contigo y te beso el cuello despacio. Para que veas que lo siento. Que te quiero. Que te echaba de menos. Y que eres mi vida entera.

-A Marta y María las han matado. Y Julia está en la casa de al lado.

-Esta noche nos vamos definitivamente. Para siempre. Esto no va a volver a pasar. Vamos a salir de aquí.

-Tengo miedo, Nat.

-Lo sé cariño. Nos vamos a ir ya. Te voy a proteger siempre.

-Te quiero.

-Y yo.

---------------------------

Toy very orgullosa de este capítulo de verdad. Me ha encantado escribirlo (Aunque la llorera ha sido bien buena)
¿Cómo estáis? Cuánto tiempo 🤣
Espero que estéis todos biennn
Esto está llegando a su finallll, ¿os va gustando? Espero que sii

"Conmigo y con mi.... LOLOLOLOLOLOOO" perdón tenía que hacerlo

Buueeeno, nada, que espero que os haya gustado y q muchas gracias por el apoyoo
Os quiero❤

Fx~~

𝑇𝑖𝑚𝑜𝑟 - Albalia.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora