cuatro rosas

incio.

Sentada al borde de mi propio abismo;
-prometo no dejarme caer-.

para mí es duro pensar en todos los momentos trágicos que marcaron mi vida, pero lo necesito es una necesidad inminente poder cerrar la herida, quemar la etapa o como se pueda describir. por el contrario vamos a comenzar por el inicio.

-valeria-.

-Pequeña con lunares como las estrellas.

-Gracias por tu descripción pero eso suena un poco despectivo-.

-No, no era para ofenderte-. Me defendí

-¿Como sabes mi nombre?-pregunta confundida.

-Tienes una escarapela con tu nombre, Duh.

Un buen comienzo, para dos desconocías que serían muy conocías.

-Oh, cierto que tonta-golpea su frente.

-Ciertamente-

No sé por qué se golpeó, creo que le gusta auto infringirse.

-Vaya loca- susurré- Valeria estoy esperando que me entregues la comida.

-No estoy loca- respondió - Disculpa.

Me entrego la bandeja con la orden un poco revuelta pero de igual manera apetitosa. Caminé hasta la mesa que se encontraba al lado de la ventana para mirar la desgracia de otros seres como yo, sin pensarlo agarre la porción de papas y la termine en pocos segundos.

-Vaya vagabundo soy-.

Sin mirar a mirar a mi alrededor termine mi porción de ensalada que había en el pequeño plato de plástico. Con tan solo dos porciones quede llena no me entraba la gigantesca hamburguesa llena de grasa, la aparte de mi vista. Pero algo faltaba: la malteada, me pare con ira por el tal descuido de la cajera.

-Hola, haz olvidado la malteada-.

Ya me había irritado, yo nunca me irrito y si molesto son casos muy  drásticos. Como la comida, drogas o algún imbecil chiflandome en la calle.

-Ya haz olvidado mi nombre- Contesto burlona

-Si, lo he olvidado por completo, como a ti se te olvidó mi malteada-

-Lo siento, Es que estoy loca- río-

Me la jugo, lo hizo conscientemente. Y me causo risa, me jodio con el pedido.

-La que se debe de disculpar soy yo-

-Si fuiste muy grosera- entre cerró los ojos y sacó la lengua-.

Me sacó la lengua. A mí, le hubiera dado una bofetada para que respetará pero no lo hice, me causo amor.