Solo amigos. /JULRIGHT/

CAPÍTULO 1

NARRA CARLOS

Eran las 7:30 de la mañana de un miércoles, hoy era el primer día de curso y no tenía ganas de enfrentarme al mundo, ya que como si no me diera pereza empezar un nuevo curso, más me daba aun sabiendo que era en un instituto nuevo, ya que nos habíamos mudado de ciudad debido al divorcio de mis padres, yo hubiese preferido quedarme en mi querida Barcelona, pero mi madre se encabezonó que teníamos que irnos a Madrid y bueno, ahí estaba a media hora de empezar el instituto, todavía sin vestir y medio adormilado en mi cama y sin parar a mi madre histérica gritándome para que me levantara, a vistas de que así no lo iba a conseguir que me despertara le pidió ayuda al único que era capaz de sacarme de mi cama, Pablo, este era mi hermanito de 6 años, mi ojito derecho, la única persona que pasara lo que pasara, con un simple gesto conseguía mi mejor sonrisa, aunque digamos que sus métodos para despertarme no era lo que más me agradaba de este.

- ¡CARLOS CARLOS CARLOS! Era lo que comenzaba a gritar Pablo a la vez que saltaba sobre mí cama para que me levantara.

- Pablo para ya por favor... dile a mamá que 5 minutos más... que es el primer día que tampoco pasa nada si llego tarde...

- ¡NO! ¡Dice mami que te tiene que levantar ya dormilón! Este comentaba a la vez que con sus manitas bajó a mi costado y comenzaba a hacerme cosquillas, pero a diferencia de él yo no solía tener cosquillas fácilmente, así que observando como este ponía todo su esfuerzo en mi costado desnudo con aquellas caras graciosas que solo a él le salen, decidí cogerlo en brazos y tras darle mogollón de besitos en la cara a los cuales ponía queja ¡Hermanito para! ¡Tú barba pica! Comencé a hacerle cosquillas, tras llevar así 5 minutos en los que Pablo ya lloraba de la risa aparece mi madre por la puerta.

- Pablo venga a desayunar y tu Carlos dúchate y te vistes.

Tras esto mi hermano bajó con mi madre a que le diera el desayuno y yo me di una ducha fría y después me vestí, desayuné rápido y cogí mi mochila en la que llevaba una libreta y boli, lo único necesario para mi primer día de instituto, tras despedirme de mi madre y Pablo salí de camino al instituto, en el trayecto estaba envuelto en la música de mis cascos, el trayecto duró unos 10 minutos, tras estos entré al instituto, me dirigí a las listas para saber que clase me tocaba, tras encontrar las listas de 1º de Bachillerato encontré mi clase: 1º de Bachillerato A (OPCIÓN: Ciencias de la Salud), una vez ubiqué el aula en la que me encontraba me fijé en que esta estaba ya casi llena y apenas quedaba sitio, notaba la mirada de la gente sobre mí, esta sensación era odiosa, no soportaba ser el nuevo y el centro de atención, no había cosa que más odiase en el mundo. Con la mirada ve di cuenta de que al final de la clase había un sitio vacío al lado de una chica que estaba absorta en su mundo leyendo un libro, de esos que son bastante tochos de leer, aliviado de ver que no era una de esas chicas paranoicas decidí sentarme a su lado, parece ser que ni si quiera se da cuenta de mi presencia, hasta que una voz aguda y chillona parece captar la atención de los dos.

- Qué pena... el chico nuevo está buenísimo y va y se sienta al lado de la mojigata de la clase. Dice esto último riéndose

- El chico nuevo tiene nombre... Dije llamando la atención de estas, la cual ya de primeras me caían mal. Me llamo Carlos y la chica a la que llamáis mojigata también tiene uno...

- Hey Carlitos... no te tenses... eres demasiado guapo para eso... La fulminé con la mirada. Para ti Carlos... Carlitos solo me llaman mis amigos... Dije totalmente serio, para ver cómo estas se iban al entrar el profesor.

- Gracias... Dijo tímida la chica. Me llamo Julia.