It.

Prólogo

Beverly Marsh.

Septiembre, 2019.

—¡No, no, no! ¡Bastá! ¡Dejálos en paz!— grité una y otra vez incorporándome de la cama con la respiración bastante acelérada despertando de aquella pesadilla.

—¿¡Qué pasa madre!? ¿Te encuentras bien? —dice el adolescente asomándose por la puerta.

—Si billy, todo está bien sólo era un mal sueño de nuevo. Ven acercáte —susurré haciéndome a un lado para qué este se tumbára en la cama.

—Mamá no eres la única en tener pesadillas, yo no logró dormir en las noches, el miedo me invade por completo.

—¿Qué pesadillas Bill? —dije frunciendo el ceño al castaño qué se encontraba recostado en mi regazo.

—La verdad es qué, desde niño he tenido horribles pesadillas con un payaso pero esté no es nada agradable, esté es tenebroso su aparencia aún esta grabada en mi mente. Tiene tez blanca, una frente muy amplia, y su cabello es rojo cómo el fuego esparcido por las sienes, pero... —Se detuvó mientrás negaba con la cabeza.

—¿Pero qué Billy? —Le pregunté cambiando mi semblánte a uno más serio.

—Está noche él me ha dicho algo algo — susurró.
—¿¡Qué te ha dicho Bill!?— pregunté desesperada.

—Él me ha dicho: "¿Listo para flotar Billy?"

Llevo ambas manos a mi cabeza mostrando mucha preocupación abrazando al castaño, y los recuerdos, experiencias inolvidables qué tuve de niña se apoderan de mi mente. Esto sólo puede significar una cosa "Eso" a regresado.

Fué una larga noche no pude obtener el sueño, pero Bill se quedó profundamente dormido. Se notába bastante qué no había dormido nada pues tenía sus ojos ojerosos. Tomé una manta y se la colóque encima, encendí el ordenador para sentarme frente al aparato y abrir una ventana del correó; tenía qué avisarle a mis amigos de la infancia pero primero debía comentarselo a Bill Denbrugh. Mi primer amor.

Hora: 4: 49 AM.

De: Beverly Marsh.
Para: Bill Denbrugh.

Hola Bill, después de unos años me vuelvo a comunicar contigo, y es un grán gusto. Eres un hombre exitoso con una hermosa familia sé muy bien qué te mudaste a un pueblo llamado Counterville, no es cómo tenía pensado decirtelo pero me temó qué "Eso" a regresado, nuestros hijos corren peligro debemos cumplir con nuestro pacto y acabar con ese hijo de puta.

Con amor: Bev.