—Gracias por el café... ¿cómo es su nombre?
—Charlotte, Marquesa.
—Muy buen café... por cierto, no compres té... lo detesto con todo mi corazón. —sonrió y Charlotte asintió con una sonrisa también.
Estiró su pierna bajo el sol que ingresaba a la sala por el ventanal y recogió la falda levemente.
—Mi señora, le queda precioso ese color de vestido, y hasta que al fin parece de su edad y no una mujer diez años mayor...
—Gracias... debe ser la impresión... hacía siglos que no usaba otro color que el negro.
—Tal vez, pero de todos modos, le queda precioso.
—¿Vas acompañarme a la casa de mis padres?
—Claro señora, sólo que no tenemos carruaje...
—Ah... habría que alquilar alguno, ¿no crees?
—Por supuesto milady, el señor Hammill no se opondrá ¿verdad?
—Me dijo que está cumpliendo con su parte, y eso sin dudas incluye un carruaje para su futura esposa coja.
—Oh por Dios... no diga eso.
—Es que me siento tan feliz que apenas puedo contenerme, estar aquí reposando en la sala, con el vestido que se me antoja y bebiendo un buen café, no tiene precio.
Ambas sonrieron y se oyeron golpes estridentes en la puerta. Fruncieron el ceño mientras se miraban extrañadas.
Pronto se aproximó el mayordomo para abrir y Victoria Bennett arrasó con el hombre y concentró sus ojos en Elena que se sorprendió de verla, pero apenas esbozó una sonrisa y movió su boca en un intento para hablar, le increpó.
—¡Por Dios del cielo Elena! —Arrojó un papel sobre la mesa mientras ponía sus manos en jarra sobre su cintura. Ella frunció el ceño y tomó el papel, tenía el lacre Hammill y cuando lo abrió, descubrió la invitación a su boda. Ya Aiden se estaba encargando de todo. —¿En qué diablos estás pensando?
—Tranquila Victoria... no hables así, no es correcto.
—No puedes casarte con ese hombre ¿oíste?
—Pero ¿por qué?
—"¿Por qué?" —dijo titubeando y con ironía. —Pues porque es un tipo de baja calaña, desagradable y con reputación terrible, por eso. ¿Crees que a Adam le agrada que nuestra familia emparente con él?
—Discúlpame, pero no me interesa lo que a Adam le afecte o no... lo siento, es mi vida y por primera vez voy a decidir lo que quiero.
—No lo hagas, te lo suplico... —se acuclilló frente a ella y tomó sus manos suplicando. —Nos terminarás de arruinar.
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Corazón en Penumbras
Historical FictionN°1 en Ranking Romance Noviembre 2019 N°1 en Ranking Novela Histórica Febrero 2020 Gracias a todos! Esta dentro de contenido adulto porque tiene algunas imágenes de violencia, no con contenido sexual explícito. COMPLETA ¿Que es el matrimonio para...