_De modo que dará la mitad. - dijo Alfonso moviéndose con furia por la sala de la casa. _ ¡Maldito infeliz! ¿Solo la mitad? Cree que no se que tiene más, mucho más, él puede dar diez veces la cantidad completa sin tener que buscar o vender algo... ¡Maldito tacaño! - aventó lo primero que encontró a su alcance.
Lidia lo veía asustada desde un rincón, nunca lo había visto tan enojado como ahora.
_ ¡Maldito! - grito aventado más cosas. _pero que podíamos esperar, a él no le importa.
_Si le importa. - se acerco ella temerosa. _el quería rescatarla.
Ambos se quedaron quietos ante ésta confesión, ella porque se dio cuenta de que había cometido una terrible indiscreción y él porqué la noticia lo había dejado helado.
¿Así que ese era el plan? ¿En realidad nunca había pensado pagar nada?_ ¿Desde cuando sabes eso? - se dejó ir contra ella?
_ ¡Dímelo! - gritó cuando ella se quedó callada.
_Desde... la primera vez... que lo vi. - tartamudeo asustada. Sus ojos estaban cristalizados y empezó a temblar, nunca había visto a su esposo de esa forma.
El se dio cuenta de lo que estaba haciendo, no quería asustarla, pero lo estaba haciendo.
_Perdóname. - la abrazó. _lo que pasa es que estoy tan preocupado por Laura y me da tanto coraje que el pudiendo echarnos la mano no lo haga y prefiera ponerla en peligro.
_El me pidió que regresara, si va a dar la mitad del dinero ahora, quiere decir que cambió de opinión y quizás también dé el resto.
_Tienes razón. - dijo el dándole por su lado, tenía que mantenerla tranquila, lo último que quería era que se enterara de que él era el que tenía a su hermana, no quería perderla, la amaba de verdad.
Tenía que pensar rápido o esto se le saldría de control.
_Bien. - la miró tranquilizador. _regresa con él como te dijo y esperemos que todo salga bien. ¿De acuerdo? - depositó un tierno beso en su cabeza.
Ella fue a buscar su bolso para salir de nuevo.
El permanecía ensimismado en sus pensamientos, tendría que continuar con el plan y hacer la llamada que ya tenían planeada o quizás ella sospecharia. En cuanto a lo demás las cosas habían cambiado, tendría que hacer algo.
*****
Roberth veía en la pantalla del equipo de cómputo de sus expertos como se llenaba de puntos rojos.
James, el especialista que manejaba todo eso, le había explicado que esa gente estaba usando teléfonos antiguos carentes de la tecnología de ahora, para evitar ser rastreados, sin embargo, con la tecnología que ellos manejaban, aún así podían detectarlos claro, con sus limitaciones, pero aún así, eran localizables.Lo único que necesitaban era que llamaran y ellos localizaban el sitio en donde se encontraban al hacer o recibir la llamada.
Habían descubierto que era un grupo muy cerrado el que estaba implicado, hasta ahorita se había detectado a nueve personas, se habían hubicado los domicilios de ocho de los secuestradores, menos de quien se presumía era el jefe de ellos, ya que nunca estaba en el mismo lugar cuando recibía o hacía llamadas y se presumía, era el líder porque él solo recibía llamadas de uno de los teléfonos, mientras que los demás mantenían contacto entre sí.
Roberth se dio cuenta de que se estaban reagrupando, lo que indicaba que tenía razón al sospechar que alguien cercano a la familia estaba involucrado, ahora estaba seguro de que volverían a comunicarse con Lidia, sin embargo, eso ya era irrelevante, con los datos que tenían podían hacer su trabajo.
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PERDIDO EN SU MIRADA No. 4️⃣ //SERIE HOMBRES DE LA SIERRA.
RomanceLaura trabaja para una empresa muy importante, sin duda ha triunfado en la vida, a pesar de provenir de un poblado en la Sierra, en donde lo único que progresa es el narcotráfico y los grupos del crimen organizado. Huyendo de todo eso consiguió marc...