El Diablo En Mi •Michael Langdon X (Tn)•

Escondidos En El Suelo

3 años después...

Han sido tres años que se han ido tan rápido, durante todo este tiempo Cordelia se encargó de mandarles mensajes a todas las brujas posibles para que busquen un lugar seguro donde puedan mantenerse a salvo, Myrtle y Misty han estado experimentando con el fango del lago de Luisiana para poder preservar nuestros cuerpos durante el apocalipsis, Madison y yo hemos vigilado que las vidas de Coco y Mallory transcurran con "normalidad".

Justo ahora Madison acaba de hacerse pasar por una conductora de Uber para llevar a Coco y Mallory a una peluquería de gran prestigio, aunque Mad maneja como lunática.

- Muy bien, señoritas. Llegamos.- Madison detuvo finalmente el auto.
- No olviden darme cinco estrellas.-

Ambas bajaron del auto maldiciendo entre dientes por el mal servicio, claro que a mi amiga no le importaba en lo absoluto.

- ¿No crees que eres un poco ruda?- Aparecí en el asiento de copiloto y Lila en el asiento de atrás asomando su cabeza por la ventana.

- Para nada.- Encendió un cigarrillo.

- Como sea, Cordelia...-

- Esa perra.- Escuche decir a Madison.

- ¿Qué?- Volteé a verla, pero ella miraba algo por su ventana.

- Dinah Stevens.-

- ¿Quién es?- No conocía a nadie con ese nombre.

- Es la reina vudú, es esa traidora de ahí.- Señaló el autobús que estaba a un costado de nosotras. Entonces vi el anuncio de un programa de televisión con una mujer afroamericana en el.

Sin más que decir Madison arrancó en auto para dejarlo debajo de un puente y regresamos a la cabaña.

No conozco a Dinah, pero Madison está realmente molesta por algo que hizo.

 
- Solicito permiso para quemar a una bruja.- Madison azotó la puerta atrayendo la atención de Myrtle y Cordelia.

- La única razón para quemar a una bruja es que le haya hecho daño grave a otra bruja.- Myrtle observo curiosa a mi amiga.

- ¿Qué tal si ayudó a destruir todo el aquelarre?- Sentí como el cuerpo de la Suprema se tensaba.

- ¿Quién?-

- Dinah Stevens. Tiene un nuevo programa en televisión, vimos el anuncio en un autobús.- Informó. - Es imposible que tenga un show sin haberle vendido su alma al Diablo.-

- ¿Qué?- Me levanté del sofá. - Ella trabaja para Michael.-

- Así es, seguramente ella fue la que rompió el mantra que tenía nuestro aquelarre.-

- Traicionarnos fue su manera de obtener un lugar en el refugio.- Dedujo Myrtle.

- Eso no importa.- Al fin habló Cordelia.

- Claro que importa.- Dijo la pelinaranja. - Debemos eliminar la podredumbre. Madison trae la gasolina, yo iré por la leña.-

- No. No podemos hacer nada que alerte a Michael de nuestro plan.- Todas observamos a la Suprema.

- ¡Delia! Ella será un peligro para nuestras chicas.- Replicó Myrtle.

- Dinah nunca las vió. Nuestro hechizo de identidad es más poderoso que cualquier reina del vudú.-