Esto es sobre nosotros (Jeff the killer y tu)

Capítulo 4.

- ¿Dices que el personaje FICTICIO que tanto amo ha estado en tu casa? -Preguntó la Rubia por millonésima vez haciendo énfasis en la palabra "Ficticio" ¿Realmente fue ella quien lo dijo?, ¿La súper fanática del maravilloso asesino en serie?, ¿Cuántas veces necesita que le responda eso? -.

Teníamos desde que llegué a casa de Emily hablando del tema. Aún estábamos sentados en el suelo, sin embargo, yo ya no estaba sobre las piernas de la ahora incrédula rubia. Ethan y ella se encontraban recargados sobre la cama y yo frente a ellos explicándoles todo. Durante la conversación se limitaron a asentir a cada palabra que salía de mi boca hasta que finalicé y comenzaron las incesantes y repetitivas preguntas.

Ya estaba cansada. Sentí que pasó mucho tiempo desde que comenzamos a hablar y ni siquiera habían sucedido tantas cosas, ¿O sí?, también tocamos el tema de Cristian, pero no le tomaron tanta atención e interés como pensé que sería, además de que las constantes preguntas de Emily no ayudaron a que la conversación terminara pronto.

Realmente me sirvió mucho hablar sobre el tema, pero de verdad tenía ganas de ver la película que se suponía veríamos hoy, "Silencios del más allá", una joyita.

-Si -Dije haciendo notar mi desesperación, ¿Cuándo les he mentido? -.

-Mm... No te creo -Entrecerré mis ojos molesta a lo que ella respondió levantando las manos-, oye, estarías muerta, además, tú no eres tan estúpida como para ayudar a un asesino, en mi opinión yo creo que si bebiste -Al decir esto, miró en dirección a Ethan en busca de aprobación a su último comentario. En todo este tiempo él se había mantenido en silencio y analizando la información que les había compartido, yo también sentía curiosidad sobre su opinión así que guardé silencio esperando a ver qué decía-.

-Pues, para empezar, yo vi cómo el papucho de Cristian se fue en su auto, así que es imposible que no te crea sobre eso... -Señoras y señores, Ethan, el mejor amigo del mundo. Emily y yo nos quedamos observándolo incrédulas por su comentario, ¿Es en serio?, ambas soltamos un suspiro al mismo tiempo en forma de rendición, pero aun así el continuó-, y es verdad que no es común que en la vida de _______ sucedan cosas interesantes... -Se detuvo de inmediato al darse cuenta del comentario que había hecho e hizo una mueca a modo de disculpa-.

- ¿Disculpa? -Dije ofendida. Sin embargo, pensándolo bien, tiene toda la razón, mi vida es muy aburrida-.

-Digo -Me interrumpió de inmediato sujetando mis hombros y alargando la palabra en el "Di"-, que ese día estaba hasta el cielo por la increíble cantidad de alcohol que consumí y no puedo decir a ciencia cierta si bebiste o no, al igual que tú rubia alcohólica -Dirigió una mirada acusadora hacia Emily quién rodó los ojos y cruzó sus brazos en forma de puchero-, y sé que al día siguiente amanecí vivo en mi casa gracias a que nos trajo a casa, cosa que habría sido imposible si _______ hubiese bebido una sola gota de alcohol -Sonreí victoriosa ante su comentario, al fin alguien coincidía conmigo-. ¿Segura que no lo soñaste? -Ahg, lo amo tanto. Mi querido Ethan, eres oro-.

Suspiré irritada ante su pregunta que había destruido por completo el argumento a mi favor que el mismo había construido, me tiré al suelo de forma que quedé mirando hacia el techo, ya no había más que decir. No me iban a creer.

Se formó un silencio incómodo entre nosotros, ambos sabían que yo ya no iba a mencionar palabra alguna del tema cosa que siempre ponía nerviosa a Emily.

-Solo hay una forma de saber si bebiste -Habló Emily, tratando de romper el silencio y arreglar las cosas. Ella sabía que yo ya no intentaría hacer que me creyeran, y bueno, siempre que sucede algo así siente como que me hacen sentir mal y trata de arreglar las cosas-, a ver, ¿De qué año a qué año duro el periodo clásico? -Aunque usa métodos muy extraños-.