LA BRÚJULA DE LA ESENCIA PROPIA

NANCY

Esto que te escribo ahora, es con el fin de que si en algún momento lo logras leer (que espero que sí), espero que comprendas el significado que tuvo el hecho de que tú llegaras a mi vida, te haré recordar bellos momentos que pasamos juntos e incluso te haré mención de todos los sentimientos que a pesar del pasar de los años aún sigo sintiendo en mi interior, sin importar nada ni nadie y sin importar lo que haya sucedido fuiste y serás la mujer que se quedará clava por siempre dentro de mi interior.

Aún recuerdo los primeros días en que te conocí; fue en una tarde lluviosa mientras regresaba del trabajo a casa. En esos momentos yo venía observando sitios y grupos en Facebook de las zonas más cercanas a mi casa: San Mateo y Villas de la Hacienda, recuerdo perfectamente que estabas en el grupo de Villas de la Hacienda, pero desde el momento que te vi supe que algo había diferente en ti, no lo sé, simplemente me llamo la atención tu mirada. Tenías los ojos que expresaban belleza interior o en el alma, tu sonrisa era pequeña, pero me hacían sentir que eras hermosa y ese cabello largo y negro que me hacía saber que era simplemente una mujer bellísima, pero lo que más me encantó de tu foto fue tu mirada, esa mirada serena y a la vez que me hacía fijarme detalladamente en ti, contemplando la belleza de esos ojos, esa nariz, esa boca y esa sonrisa. Justo en ese momento me desperté del trance que tenía por más de un minuto de ver tu foto, pero no dude ni un solo segundo en mandarte solicitud, aunque en el fondo sabía que quizá me rechazarías porque era un completo desconocido para ti, y una vez que mandé la solicitud una sensación de nerviosismo recorrió mi cuerpo, era una sensación que jamás había sentido en mi vida, pero sin más ni menos seguí recorriendo la página hasta que llegue a mi destino: los arcos de San Mateo, lugar en el que siempre me bajaba para irme caminando por todo el pueblo hasta llegar a casa, me gustaba caminar por esos rumbos y más cuando eran días nublados, muy nublados. Llegué a casa, me senté en la mesa y platiqué con mi familia sobre mi día, sobre su día y bromeamos por toda la tarde hasta que decidimos irnos acostar, pero, aunque todo eso había sucedido me quedé con tu imagen clavada en mi mente hasta que me venció el sueño.

Al día siguiente fui a trabajar como siempre, me levanté y me arreglé para otro día de trabajo más, era un Jueves, lo sé porque ese día había algo importante en el trabajo, el día en que estaría dentro de un proyecto de la empresa, así que iba con los nervios de punta pero a la vez emocionado; para ser honesto llegué a mi trabajo, saqué los reportes de ventas de todos los días para los dueños del corporativo y me dediqué a dar soporte a los usuarios dentro del sistemas, no había tenido tiempo de ni siquiera respirar un poco ya que comenzamos a trabajar en el proyecto toda la tarde hasta la hora de la salida y para mi sorpresa había sido uno de los mejores días que había pasado, pero lo que colocó la cereza sobre el pastel fue cuando recibí la notificación mientras venía de regreso a casa...sorpresivamente habías aceptado mi solicitud de amistad. En ese momento no sabía qué hacer, simplemente la emoción me dominó, así que en mi mente solo pronuncié esas palabras que marcarían el rumbo de todo lo que el destino nos tenía preparados:

"Le mandaré un mensaje, lo peor que podría pasar es que nunca hable con ella o nunca me responda...espero que si lo haga"

En ese momento comenzó nuestra magnifica, maravillosa y hermosa historia. Recuerdo que nuestra charla comenzó con un "hola"...

-Hola. ¿Cómo estás? Gracias por aceptar mi solicitud, creí que no lo harías.

-Hola. Muy bien, gracias y de nada. ¿Te conozco?

-No, la verdad no nos conocemos, pero te vi que estabas en un grupo de Facebook y decidí mandarte solicitud.

-Ah, ok. Pero ¿nunca te han dicho que no hables con extraños tus papás?

-Si, me lo decían todos los días cuando era niño, pero no creo que tú seas una asesina o una loca depravada, ¿o sí? Yo no lo soy, solo quiero conocerte.