monday; gramon

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Lunes, 2 de septiembre de 1985

Luego de un mes, Graham y Damon se habían hecho muy buenos amigos. Por cada clase que pasaba, el lazo de ambos iba creciendo demasiado, a tal punto de que los asombraba el haberse conocido hacía tan poco y, sin embargo, tener tantas cosas en común.

Por eso, ahora Graham ya no se sentía mal al ir a las clases de educación física. Iba con entusiasmo, y contaba los días para que llegue cada lunes. Sabía que por más horrible que fuese la clase, allí estaría Damon, que tampoco faltaba a su encuentro.

Sólo podían verse los lunes. Damon, al ser de último año, había comenzado un curso universitario que duraba hasta navidad. Él lo hacía sólo para intentar y probar: quería dedicarse a la música seriamente, no solamente como hobbie. Pero ir a la universidad le iba a asegurar algún futuro, en caso de fallar como músico. Iba junto con Alex –al que también le gustaba la música– todas las tardes, luego de la escuela, y volvían tarde en la noche. Era mucho esfuerzo para unos chicos tan jóvenes, y un golpe de realidad, pero ambos querían y podían hacerlo.

Graham lo entendía. Quizá, luego del receso invernal, podrían verse todas las tardes. Mientras tanto, Graham trabajaba cada fin de semana en una feria local. Pero le daba vergüenza contarle eso a Damon. Graham debía trabajar para ayudar en su casa, puesto que la situación económica de la familia no era muy estable en esos momentos.

El moreno llegó al instituto con una sonrisa. Damon, que había llegado unos minutos antes, lo esperaba en la puerta, para entrar juntos.

– ¡Leslie! Te estaba esperando–saludó el rubio, riendo. Graham rió también, y Damon le dio un beso en la mejilla, en forma de saludo.

Alex apareció corriendo, con miedo de llegar tarde a la clase, y miró un poco desorbitado esa escena (que no era muy rara, teniendo en cuenta que Damon era una persona muy afectiva y saludaba a la mayoría de sus amigos y allegados de esa manera). Saludó a ambos y fue a reunirse con su grupo de amigos, que aún no entraban al instituto.

–Mierda–dijo Graham, mientras revisaba su mochila–olvidé mi botella de agua.

–Puedes tomar de la mía si quieres. No tengo SIDA– dijo Damon, guiñando un ojo.
Graham soltó una carcajada y se acomodó los lentes.

–Damon, ¿sabes cuánta cantidad de agua bebo en esta clase?. No alcanzará para los dos. Espérame aquí, iré a comprar una– y se alejó a paso rápido, sin esperar respuesta.

–Hey, ¿qué pasaba allí?– le dijo Alex a Damon, una vez que este se acercó al grupo, asegurándose de que Graham no esté cerca.

–¿A qué te refieres?–Dijo Damon, mientras saludaba a sus otros amigos, que estaban escuchando la conversación.

–A Graham y el beso, Damon.

–¿Qué?–dijo Damon riendo y pensando que era una broma–. También nosotros nos saludamos con besos a veces. No es nada raro.

–Sí, pero yo no soy gay–los demás rieron.

–Alex, Graham no es gay. ¿Tienes algún problema?–Damon puso una mano en su cintura, esperando una respuesta.

–No. Sólo que tiene pinta de marica, y ¿quién sabe? quizá interprete tu beso de otra forma. Debes tener cuidado. Además, mira tu pose, creo que te ha contagiado lo gay–esta vez, Damon rió fuerte al igual que todos los demás, y quitó la mano de su cintura. Pero no se percató de que Graham estaba detrás del grupo esperándolo, escuchando todo.

–Aparte, ¿has visto cómo nos mira a todos en los vestuarios?–oyó Graham, a la vez que se alejaba del grupo de amigos y del instituto, sintiendo una angustia que hacía bastante no sentía y un doloroso nudo en la garganta que le estaba dificultando respirar correctamente.
El camino se volvía borroso mientras las lagrimas llenaban sus ojos.

perdón:( como ya dije esta semana no tuve tiempo de hacer nada, apenas pude prender el celular y se habrán dado cuenta por mi actividad reciente jeje. pero prometo mañana venir con un capítulo más largo y mejor (quiero creer jejej)

lpm ni siquiera quiero abrir más esto porque se está volviendo un cliché un poco muuuuuy boludo pero vendrán mejores historias😞😞✊🏼