EL CABALLERO SALVADOR

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Kaiba pago el dinero con su tarjeta, fue dirigido hacia una habitación, un tipo de máscara roja le dio unas llaves, a comparación esta lucia mejor que las otras, por el pasillo se traspasaba el sonido de las demás habitaciones, jadeos y gritos de placer, se sintió completamente fuera de lugar en ese ambiente.

Entro con prisa buscando con la mirada al amatista, sus ojos se posaron en la cama donde Yami se encontraba esposado este jadeaba, deseando poder brindarse placer, el calor que sentía su cuerpo era demasiado fuerte.

Con las llaves le quito las esposas, Yami soltó un quejido, se quedo un momento contemplando sus labios carnosos entre abiertos, su piel pálida con ese liguero que apretaba su erección.
Malditasea... -Kaiba se dijo así mismo - quería llevárselo inmediatamente lejos de ahí, sabía que es lo que tenia que hacer para no levantar sospechas, negó con la cabeza, el iba ayudarlo, no a joderlo y nunca mejor dicho.

¿Que demonios me pasa? - suspiro pesadamente- de repente Yami soltó un fuerte quejido, su erección parecía doler, lágrimas empezaban a fluir de este, era una de las peores torturas.
Kaiba paso saliva pesadamente, no podía dejarlo así...siempre deseo tenerlo ante su merced, pero nunca pensó que seria de forma sexual, su corazón extrañamente latía de forma rápida.

Se puso sobre de el- Sólo lo debo hacer que se corra... - dirigió su mano hacia el liguero, lo bajo un poco para que este ya no le apretara, empezó a dar caricias, a su miembro que podía sentirlo palpitar,luego con su mano lo tomó y empezó hacer movimientos de arriba abajo.
Yami reacciono de inmediato, Kaiba sintió como jadeo, sintió su respiración caliente en su oreja, pudo sentir como su propio rostro se calentaba.

Se levanto, Yami se retorció al ya no sentir su toque.
El castaño se deshizo de forma rápida de su corbata al igual que su saco, sin importarle dejarlo caer con descuido.
Tomo el rostro del rostro del tricolor y lo beso, empezó de nuevo a tocarlo, reprimía sus gemidos con el besó. -Quiero más, quiero sólo yo poder ver este lado tuyo, ¿acaso ya he enloquecido? - unió su lengua juguetonamente con el contrario, al final se separó por la falta del aire, un hilo de saliva se hizo visible, pudo sentir su mano caliente, Yami se había corrido.

Kaiba se irrito al sentir su propia excitación concentrarse en su miembro, pudo ver la entrada del amatista dilatarse, seguía erecto, sus labios se dirigieron a su cuello, empezó depositando besos luego dio una lamida, pudo sentir a Yami estremecerse debajo suyo, sentía la necesidad de dejar una marca en el, pero se contuvo.

Dirigió un dedo a la entrada del amatista.

Aah - gimió sus miradas se encontraron, Kaiba sintió temor y a la vez alegría de que empezaba a volver a la realidad, le encantaba esa mirada, a diferencia que las otras veces tenia el ceño fruncido, esta vez era cálida.

Le dio un beso rápido - Resiste un poco- metió un segundo dedo, El brazo de Yami se aferro de Kaiba mientras que el otro jalaba la sabana de la cama por el placer, Kaiba lo hizo forma de tijera para poder meter el tercero, este toco un lugar especial, Yami sentía un hormigueo por su cuerpo, era tan placentero iba correrse sólo por tener sus dedos dentro de el.

Vio como Yami hacia su cabeza hacia atrás y se corría con fuerza.
Saco sus dedos con cuidado y deposito un beso en su frente antes de que este durmiera.

Le puso su sacó y lo cargo modo princesa, Yami era realmente liviano, Kaiba sintió alivio tenerlo en sus brazos, salió con cautela del lugar, llegando al estacionamiento, subió atrás con cuidado al tricolor recostándolo, entro al carro cerrando la puerta de forma rápida, se quito la mascara y arranco.

Estando lejos de ese lugar soltó un suspiro, su corazón se tranquilizo al igual que el calor que sentía en su cuerpo.
París era un lugar encantador, vivo incluso de noche, se dirigió a un hotel 5 estrellas, entró al estacionamiento, en una maleta tenia ropa, vistió al amatista, paso a la recepción cargandolo en su espalda, solo dio su nombre y de inmediato le dieron una habitación, había hecho una reserva antes.

Lo acostó en la cama, sentía la necesidad de tomar un baño junto a el, después de todo ya lo había visto desnudo y en estado lujurioso, bañarlo no sería mala idea.

La bañera era blanca, preparó el baño, la agua era calida y tenia un aroma a vainilla.

Le quito la ropa que ayudó que pasaran desapercibidos al hotel, lo llevo a la bañera con cuidado y lo sentó, al fin podría ver cada detalle de su fino cuerpo, empezó a enjabonar su cuerpo al igual que su cabello, este se encontraba completamente dormido, efecto de la droga quizá, pensó Kaiba.

Durante el baño, su mirada se detuvo en el rostro del contrario, el agua había quitado maquillaje de su rostro, salió a la vista un golpe, este estaba algo morado, Kaiba apretó muy fuerte su mano, incluso sus uñas se enterraron en su piel, no sintió nada, era más su enojó que sentir preocupación por su mano.

Maldito Bakura, todo lo que hiciste de alguna u otra manera te lo haré pagar - su ira disminuyo al ver como el Pecho de Yami subía y bajaba lentamente por su respiración, sus pezones rosas resaltando, el se pregunto porque no los mordió antes, si lo hiciera ahora le recordaría a alguno de esos tantos tipos desagradables de aquel lugar de la apuesta, tan solo pensarlo se le revolvió el estómago.

Yami era realmente apuesto, todo este tiempo que no lo pudo ver, se colaba en sus pensamientos de noche, obviamente nunca admitiría aquello, era algo bastante personal.

Termino de bañarlo y decidió cercarlo.
Su respiración se detuvo al contemplar su cuerpo mojado, sintió como se aceleraba su corazón de nuevo, recordando como lo miro antes de hacerlo venir.

Míerda - se había puesto duro por tan sólo recordarlo, lo acostó en una de las 2 habitaciones que había, no quería invadir su privacidad cuando este llegara a despertar, le puso una de sus playeras para que este no durmiera desnudo, sabia que si se despertaba de esa manera pensaría lo peor.

Lo tapó con la sabana y cerro la puerta de la habitación, ahora tendría que bañarse y tener que atender su erección que cada vez se volvía más incomoda.

Lo siento por subir capítulo tarde, pero el Wattpad se reinicio y no me dejaba entrar pero ya no importa como siempre recuerde que este capítulo fue escrito por mi gran y mejor amiga @Fuiji_lovers.



Los ama.

Joeri.A.Sook.

El rey que perdió su corona (Hiatus temporal)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora