lll. FRAGILIDAD

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Los rayos del sol se filtran tras el ventanal de la enorme habitación, el castaño sin abrir sus ojos, siente su cuerpo tibio, el ambiente templado, una mañana tranquila; comienza a abrir sus ojos, divisa una figura a su lado...los abre de golpe al percatarse a quien abrazaba, completamente desnudo y cubiertos con la misma sábana.

-No fue....un sueño...no fue un sueño...-Se repetía el moreno

Ante el shock comenzó a temblar, no podía mover ni un músculo; Steve despierta...abre completamente sus ojos al percatarse que Tony lo tiene aún abrazado, temblando y le mira angustiado con esos orbes café que anoche le volvieron loco.

*-¿Anoche?¿Lo de anoche fue real?-* piensa para si el rubio.

Se asustó al ver q el castaño comienza a llorar sin dejar de mirarle muy acongojado.

-¡Tony! Lo siento...esto fue mi culpa,no debí,por favor...no llores, no pregunté si lo deseabas...-el rubio trataba de explicarse, pero entre más hablaba, el moreno más lloraba.
Steve le abrazó con ternura, acariciando sus cabellos.

-Tony, desde hace mucho deseé que algo así pasará entre nosotros, no me arrepiento de nada...pero si tú no lo deseas dímelo y me marcharé-

-Yo...yo lo siento Steve...no debí...no se que me pasó...yo..-

El moreno seguía temblando y no dejaba de llorar, no podía explicar lo que sentía, la sensación era como si desde dentro de su ser brotara todo sentimiento retenido hacia el rubio, y éste para tranquilizarle un poco le dijo:

-¿Sabes? Me daré una ducha y te prepararé el desayuno...tranquilo Tony, ¿Deseas desayunar conmigo?-

El castaño asiente, el ojiazul le deja un beso en la frente,se levanta, recoge su ropa y ésta a punto de salir cuando el castaño le habla.

-Deja tu ropa en la lavandería, en la habitación contigua está la ropa que dejaste en el complejo, sino te sirve,hay un armario completo ahí para que escojas-

El rubio le sonríe

-Gracias Tony-

Cuando Steve sale de la habitación, el moreno se sonroja y se cubre completamente con las sábanas.

-¿Que demonios me pasa?parezco quinceañera enamorada-

Luego de un rato, y con dificultad, se levanta de la cama; al estar totalmente de pie siente como algo le resbala de la entrepierna.

-Maldito Rogers...me rellenaste como dona-

Toma una ducha, se viste cómodamente y sale de la habitación, un aroma delicioso invade el lugar, siguiendo ese rico aroma llega a la cocina, donde Steve y sus ágiles manos ya tienen listo el desayuno.
Tony, al verle, recuerda la sesión de la noche anterior: gemidos, besos salvajes y éxtasis...un sonrojo aparece en su rostro que trata a toda costa que el rubio no observe.

-¡Tony! Qué bueno que ya estés aquí, acá está tu desayuno, comprueba mis manos mágicas-

-Anoche las comprobé...- dijo sin pensar el moreno, que al percatarse de la imprudencia, abrió ampliamente sus ojos y su cara estaba muy sonrojada, al igual que el rubio.
Un silencio incómodo invadió el lugar.

-Pe...pero siéntate Tony, disfruta de tu desayuno-

-Gracias...-

-¿Y? ¿Sabe bien?-

-Esta delicioso...-

El rubio emocionado al ver que Tony disfruta de un desayuno sencillo sonríe ampliamente.

-Me alegra que te guste-

Al terminar, Steve aseó, mientras Tony se dirigió al enorme sofá, un poco adolorido por la fiesta salvaje de la noche anterior.
El rubio acaba de limpiar, sale de la cocina y llega al sofá, duda si debe sentarse con el castaño, así que permanece de pie... silencio, sonrojo y nerviosismo reinaba en el lugar.

-Tony...¿Quieres que hablemos de lo que pasó?

El moreno abrió la boca para contestar, pero nada salía de su garganta, sólo gruesas lágrimas empezaron a salir, el rubio al percatarse sin vacilar se arrodilla frente al castaño, le toma ambas manos y les besa.

-Tony, yo...no recuerdo desde cuándo tu invades mi mente, un día desperté y no dejaba de pensar en ti...-

El castaño le miró, pensando *-Diablos, ¿Qué me pasa?-*, respiró profundo y le apretó las manos al ojiazul.

-Yo sé que soy un egocéntrico, testarudo, ruidoso, sé que nada tengo que ver con tus amigos de hace setenta años, sé que muchas veces me burlo de la gente y probablemente durante mucho tiempo fui un completo idiota, pero esa no era razón para que casi me mataras en Siberia, ni que me ocultaras la verdad sobre mis padres y tu Bucky, yo sabía que lo ibas a preferir a el, como ibas a fijarte en mi, soy un estúpido, será mejor que regreses con él y olvides lo que pasó aquí, tú me abandonaste y yo amándote tanto...yo...yo... amándote....-

El moreno bajó el rostro y comenzó a llorar, Steve no sabía que decir ante tales palabras, le abrazó con ternura, pero Tony no le dejaba.

-¡Vete con ese maldito asesino! Lo preferiste antes que a mí o a los Vengadores, ni siquiera sé porque viniste aquí...-

-No volveré a abandonarte Tony, jamás....aunque tú me lo pidieras...soy todo tuyo, déjame estar a tu lado y remediar mi error, te lo suplico...-

-¡No me toques!- insistía el castaño mientras lloraba a mares y pensaba *-¿¡Qué rayos es lo que me pasa!?-*

-Te amo Tony...-

El moreno dejó de forsejea al escuchar esas palabras, fue como una corriente eléctrica que le invadió el cuerpo.

-Yo...también te amo...-

Tony lloró y lloró hasta quedarse dormido en los brazos de Steve; este jamás pensó lo frágil que podía ser el moreno, le parecían extrañas las circunstancias en las que todo había pasado, ¿Cómo era posible que el egocéntrico Tony Stark no le hablara en un año completo y luego en unas horas se haya vuelto tan delicado y sentimental?.
Entonces recordó que Viernes mencionó que le habían inyectado algo al moreno.

-Eso no creo que haya vuelto a Tony tan dulce- Se dijo a sí mismo con una sonrisa.

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EL SUERO DE LA VIDA (Marvel Slash)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora