Desayuno - • OneShot Osomatsu • -

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Desayuno — • ❤️ OneShot Osomatsu ❤️ • —

—Esta bien, lista para hacer esto... —Murmuré para mi misma observando el interior de la cocina. No tenía porque ser tan difícil.

Había despertado relativamente temprano, 8:00 am; eso era temprano para mi considerando que estaba de vacaciones. El sueño se había esfumado extrañamente, algo raro considerando lo tarde que nos fuimos a dormir Osomatsu y yo el día de ayer. Nos la habíamos pasado en un maratón de series, películas, retos sobre botanas y ni se diga la guerra de almohadas, nuestra habitación e inclusive nosotros mismos terminamos hechos un caos total.

—¿Dónde estarán los huevos? —Murmuré para mi misma buscándolos dentro del refrigerador.

Como decía, ambos terminamos desmayados a plena madrugada, al despertar Osomatsu estaba babeándome el estómago. Espero no se de cuenta del moretón que le deje a plena cara por la patada que le solté. No me gustaba que me babearan él debe comprenderlo. Ambos somos pareja y mejores amigos, eso no quita el hecho de que nos digamos las cosas como son. Pero hoy amanecí de buen humor, tenía ganas de preparar el desayuno.

—¡Aquí están pequeños! Hoy no huirán de esta cocina —Use un tono de villano de Disney que solo me hizo soltar unas carcajadas. Incluso sola agarraba algo con lo que tontear.

Quebré un par de huevos en un bol para luego comenzar a batirlos dentro hasta que se convirtieran en una mezcla líquida y algo espesa. Puse a calentar el sartén en lo que esperaba unos cuantos minutos. Al ver que el sartén se encontraba caliente procedí a echar los huevos dentro. Tarareando una canción de mi videojuego favorito, procedí a preparar el omelette para Osomatsu. Cerré mis ojos dejándome llevar por mi propia melodía, esa canción me encantaba. Terminé de prepararlo. Continue con el mío, al terminar; apagué la estufa y deje caer el omelette en el plato. Los observe por unos segundos.

—Le falta algo... —Murmuré no muy a gusto con mi resultado—. ¡Cierto! —Le faltaba el corazón de ketchup que tan adorable se miraba entre parejas amorosas super lindas. Extremadamente cursi para mi, pero era divertido ver las expresiones de Osomatsu cuando me comportaba así.

Hablando del Rey de Roma.

—¿Despertaste temprano? —Preguntó Osomatsu todo adormilado y sin poder siquiera abrir sus ojos.

—Esa pregunta te viene mejor a ti, ¿no crees? —Cuestioné acercándome a él—. ¿Por qué bajaste?

—No estabas conmigo —Murmuró con un claro tono de niño mimado. Me abrazó por la cintura recargando su boca en mi cuello—. Me gusta despertar contigo a mi lado

—Y a mi lindo —No lo puedo evitar. Osomatsu al despertar era muy adorable—. ¿No te fuiste a mojar la cara?

Acariciaba su cabello riendo ligeramente al observar esos cabellos alborotados por el "almohadazo", me encantaba eso de él. Besé su mejilla queriendo despertarlo más solo pude escucharlo suspirar y lograr que se aferrara mas a mi. Esto me gustaba pero no por nada me había esforzado en prepararle el desayuno.

—No, apenas desperté y vine a buscarte —Entreabrió sus ojos—. No me dejes

—Te voy a dejar porque ya me diste calor —"Mordí" con mis labios su mejilla—. Ahora valla y coma su desayuno~

Observé a Osomatsu renegar antes de soltarme no muy de acuerdo. Sonreí al observar su rostro lleno de emoción. Era bonito verlo así de emocionado, me gustaba verlo así.

—¿En serio tú...? —El que mirara tan fijamente el omelette me ponía nerviosa.

—Si no lo quieres puedo comerlo yo —Respondí algo avergonzada. Él era la primer persona a la que le preparaba algo que no fuesen mis hermanos, era bochornoso tener la "crítica" de alguien que si me importaba.

—¡No! —Salté al escuchar su repentino grito—. ¡Esto me pertenece!

Lo observé realmente sorprendida. No sabía que Osomatsu podía ser algo posesivo con los alimentos. Sentí una alegría invadirme al observar su mueca de gusto al probar un bocado del omelette. Me hacía feliz el hecho de que le hubiese gustado. Creo que valía la pena prepararle cositas como estas a Osomatsu de vez en cuando.

—¿Te gusto? —Solté una carcajada sincera al verlo asentir sin dudarlo. Con más confianza me dispuse a comer el mío.

—Me encanta —Me observo por unos segundos—. Al igual que me encantas tú~

—Pfff, que cosas dices —Reí queriendo no mostrarme avergonzada. Claramente había fallado.

—Gracias —Continuaba observándome con esa expresión de amor puro—. Gracias por todo, te amo linda, te amaré hoy y por siempre~

No podía estar más emocionada y avergonzada en esos momentos. No importa que me dijesen que él no me convenía, que podía conseguir "algo mejor", para mi, Osomatsu era perfecto y lo amaría hasta que me cansase, algo que no creía posible.

–E-Eres muy cursi en las mañanas, ¿no? —Reí tratando de bajar el calor abrumador de mi rostro.

—Tú provocas eso en mi —Respondió sinceramente sin pena alguna.

—Osomatsu... —Lo llamé sintiendo mi corazón latir con fuerza. Este idiota era él único quien podía provocar esto en mi.

—¿Si? —Volvió su vista hacia mi. Tuve que evitar reír enternecida al observar migajas del omelette repartidos alrededor de sus labios.

—Te amo, hoy y por siempre —No pude evitar sonreír al sentir su mano acariciar la mía.

—Por siempre —Asintió cerrando sus ojos de manera tranquila. Imité su acción disfrutando esa tranquilidad entre ambos.

Esto siempre era mi parte favorita del día. Mis desayunos siempre eran dulces si se trataban de Osomatsu.

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No puedo parar! Si no escribo sobre Osito no soy feliz!x'D

Igual, gracias por llegar hasta aquí, tengan bonita tarde, bye-bye~❤️

Tiempo junto a los Matsuno (Matsunos x Reader) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora