—¡Daniella y Danielle! Llegamos tarde—Mi padre gritó desde abajo de las escaleras, terminé de ponerme las botas y baje.
—Yo ni siquiera quiero ir—Mascullé mientras le entregaba mi maleta negra a mi padre, y el la colocó donde las demás maletas estaban.
—Igual que aquí—refunfuñó.
Sonreí mientras acariciaba el hombro de mi padre—Dios, el amor que irradias madre—Dije sarcástica.
Hoy iríamos con la familia Vila donde mi madre se reúne con algunas familias agradables y amigos todas las vacaciones de verano, tipicamente solía durar entre tres y cuatro semanas. Solo madres cercanas con la familia y amigos estaban invitados.
Yo no tenía amigos en aquel grupo. Típico. No era como si me importara, pero preferiría no comparar cuanto dinero tengo con los demás.
Naturalmente, ellos amaban a mi hemana gemela, Daniella. Ella era todo lo que yo no.
Una vez que llegamos, mi madre nos obligó a mi y a Daniella que compartieramos un dormitorio. Solo para mostrarle a la gente que eramos una familia feliz muy unida. Resoplé ante la idea.
Mientras situaba mis cosas en el armario mi hermana caminaba cerca, luchando con sus maletas.
—Estaremos aquí tan solo unas cuatro semanas, no el resto de nuestras vidas—dije mientras dejaba múltiples maletas en el piso.
Ella acomodó el cabello rubio que caía sobre su hombro, "Algunas personas quieren verse bien" dijo con voz mocosa.
Rodé los ojos—¿No tienes un poco de frío, Daniella?—bromeé.
Ella gruñó —Callate—.
Obligué a mi maleta a deslizarse bajo mi cama. Me desnudé quedando vestida solo por un conjunto de ropa interior rojo, que había obtenido en Victoria's Secret de regalo de Navidad, era para Daniella, pero ella me molestó tanto que terminé quedándomelo yo. Me acosté en la cama tratando de dormir un poco.
Observé a mi hermana, incapaz de dormirme. Ella tenía su largo cabello rubio que no cortaba hace mil años, desde que yo había teñido mi cabello de negro, lo corté y quedó sobre mis hombros.
Ella tenía una perfecta piel color crema, mientras mis brazos estaban todos cubiertos por inagenes y colores que por siempre estarían en mi piel. Ella no llevaba ni un piercing, excepto sus orejas, mientras yo llecaba uno en la lengua, dos en el labio, orejas, ombligo, clítoris, y pezón. Sí.
—Debes estar allí cuando toda la gente llegue—Dijo ella mientras sostenía su sweater rosa.
—Despiertame entonces—Dije mientras me envolvía entre las sabanas.
Sentí que me dormía hasta que mi hermana me despertó de una manera agresiva, demasiado, y vaya que lucía perfecta en su vestido amarillo, e imagino que yo quizás podría lucir bien con aquello si ni madre me dejara mostrar el arte de mi cuerpo, pero no.
Nolan P.O.V
Ella era diferente.
No era la clase de chicas que usualmente me atraían.
Era del tipo que yo me alejaba.
Me encontraba hablando con mis padres sobre algunas cuestiones, cuando ella apareció.
Yo tragué saliva, excluyendome de la conversación. Caminé hacia la mesa y tomé un vaso de Coca Cola. Ella se veía aburrida.
Entonces fue cuando vi a Daniella junto a ella, y note su parecido. Y fue ahí cuando entendí que ella era su hermana gemela. Ella tenía un cabello oscuro sobre sus hombros mientras Daniella, lo llevaba natural hasta su cintura, o su trasero. La hermana de Daniella llevaba un vestido negro desgastado, apretado a su figura, que se ajustaba a todas sus curvas. Además llevaba zapatos negros de tacón, y enseñaba sus tatuajes.
Eran milagrosos. Muy coloridos, ella tenía un brazo entero cubierto por ellos. Me pregunté cuanto tiempo le había tomado aquello.
Sus hermosos ojos marrones escanearon la habitación, y se detuvieron en mí. Ella notó que la observaba y yo aplaudí interiormente. Ella sonrió enseñando ambos piercings que llevaba en sus labios, mientras la luz los hacía brillar. Sus ojos brillaron maliciosanente e inmediatamente dirigí mi mirada hacia el suelo.
Y estuve a punto de mirar hacia arriba cuando pude ver un par de zapatos negros de tacon, frente a mi vista, tragué saliva. Miré hacia arriba y ella estaba parada allí, frente a mis ojos.
Me sonrojé al ser atrapado mirándola. Ahora ella estaba confrontándome.
—Pude ver que me mirabas..—dijo sin rodeos, su voz era confiada y a la vez amable y suave.
Entonces me sonrojé aún más —Lo siento—dije observando sus ojos color caramelo.
Ella sonrió mostrando sus dientes perfectamente blancos —No lo estés, mi nombre es Danielle. El tuyo?—Preguntó.
Mordí mi labio —Nolan—finalmente respondí.
Ella mordió su labio inferior, entonces se acerco sosteniendose en puntas de pies, y susurró seductivamente en mi oído —Adoro a los hombres que se sonrojan— causando un sonrojo en mí aún más fuerte.
—Nolan, cuantos años tienes?— Preguntó mientras alcanzaba una copa de champán, su vestido se alzó un poco dejando a la vista una parte de su tatuaje. Quería verlo entero.
Me golpeé mentalmente ante mis sucios pensamientos.
—Tengo veinte años—le dije.
Ella me miró mientras sorbia de su copa de champán —Eres muy sexy—me dijo.
Entonces fue cuando me ahogué en mi vaso de Coca Cola —Q-qué?— pregunté sintiendo mis mejillas arder.
—Dije que eres sexy—Dijo mientras se acercaba hacia mí, sonrió—Luces justo como un niño bueno, pero no me interesa—Dijo mientras acercaba su uña pintada de negro y la dejaba recorrer mi torso.
—Adoro a los niños buenos—Ella sonrió.
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¡ASFJSJSJLLG! DIOS, ME MUERO ACÁ. Nolan es un amor que se sonroja❤
Acá les traigo un nuevo capítulo, gracias a mi buen humor.
Ari.xx
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Dating the bad girl | Traducida
Подростковая литератураSeguramente escuchaste hablar de cuando el mal chico conoce a la chica buena .... pero ¿has oído hablar de cuando la chica mala conoce al chico bueno? Cuando Nolan conoció Danielle no esperaba nada. Él ni siquiera imaginó que aquella chica iba a ca...