Capítulo I

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Estoy saliendo de casa para ir a la playa, estamos de vacaciones, digo "estamos" porque siempre está conmigo mi mejor amiga JoJo, vamos juntas a la escuela y debo decir que no somos muy conocidas, trabajamos en casa de mis abuelos y en las noches hacemos pijamadas, comemos palomitas, vemos películas y nos retamos con juegos de mesa; quedamos que nos veríamos debajo de la palmera de siempre para poder admirar al guapísimo salvavidas: él se llama Jake, tiene una sonrisa hermosa y todas las chicas de la escuela estan enamoradas de él, pienso que jamás se fijará en mí, aunque de vez en cuando me habla mientras trabaja con mis abuelos.

Por cierto, no me he presentado me llamo Claire y vivo con mis abuelos, no tengo hermanos y mi mayor sueño es convertirme en una sirena o conocer a una.

Llegué a la playa y ya estaba JoJo leyendo un libro, la saludo, me siento y admiramos a Jake, cae la noche y decidimos ir a casa de mis abuelos, es una pijamada como cualquier otra hasta que alguien toca la puerta, son las 3 de la mañana, JoJo me dice que no abra, que hagamos que no escuchamos, le digo que eso no es correcto y me asomo por la ventana para ver quién es, solo veo una larga cabellera color rubio, decido abrir, es una muchacha de mi edad, al menos eso supongo, dice que se ha quedado varada y necesita ayuda, le digo que pase, que puede estar con nosotras, me asombran sus uñas, brillan y cambian de color, no entiendo por qué.

JoJo se enoja conmigo, dice que soy muy confiada, "no sabemos que nos pueda hacer" me dice una y otra vez, las tres nos acostamos a dormir ya que estamos muy cansadas.

Al otro día a primera hora, hablamos con la chica de cabello rubio, dice que se llama Aquamarine y que viene de un lugar muy, muy lejos, al cuál jamás podremos llegar, le presto mi ropa ya que dice que quiere bañarse, le muestro donde queda el baño y le digo que es su casa, que se sienta cómoda.

Estoy muy emocionada, primer verano en el cuál algo asombroso pasa, JoJo en cambio está muy preocupada, dice que no le da confianza Aquamarine y algo tenemos que hacer, le digo que se calme, que todo estará bien, además, tenemos la casa para nosotras, mis abuelos han salido de la ciudad por una o dos semanas.

Pasaron más de 40 minutos y Aquamarine aún no salía del baño, me preocupé, toqué y no escuché nada, ni voces, ni ruidos, decidí entrar, ¡Wooow! Fue lo primero que pensé cuando mis ojos vieron esa cola de pez dentro de mi bañera, ¡PERFECTO, TENÍA UNA SIRENA EN MI BAÑO! Aquamarine trataba de cubrirse pero le dije que no lo hiciera que ya había visto todo, le pasé una toalla y al secarse su cola desapareció y se convirtió en piernas, yo estaba asombrada, no sabía que pensar, mi sueño de convertirme en sirena se podría hacer realidad, salí del baño y le conté a JoJo, no me creía, hablamos con Aquamarine y le comentamos que guardaríamos su secreto, que éramos personas confiables y no debía de preocuparse, JoJo le pidió que le mostrara su cola y ella accedió, Aquamarine se puso un poco de agua en sus piernas y apareció su hermosa cola de sirena, JoJo y yo estábamos impactadas, ¿Qué hacemos? ¿Qué hay debajo del mar?, le hicimos tantas preguntas a Aquamarine que en todo el día no salimos y cayó la noche, fue un gran día, fue un gran día, me repetía antes de cerrar los ojos para dormir.

Al día siguiente le enseñamos las maravillas de nuestro mundo, le encantaron los helados, las pizzas, el ir a bailar, poder caminar en el parque, entre muchas otras cosas, nos comentó que ya no quería ser sirena, que a ella le hubiera encantado nacer como humana, se quedó en mi mente esa idea ¿y si le decía que a mí me encantaría ser sirena?

Pasó más o menos una semana, éramos inseparables, JoJo me agradecía por haber abierto la puerta de mi casa el día que llegó Aquamarine, que era una gran amiga y le encantaban todas las historias que nos contaba del mar y su reino. La noche siguiente escuché desde mi cuarto como lloraba Aquamarine, me acerqué a ella y le pregunté qué pasaba, me comentó que estaba muy triste porque en realidad no quería regresar al mar, que haría lo posible porque alguien más lo hiciera, de inmediato le dije que podría ser yo quien la supliera, que a mí me diera su poder de sirena y yo le daría la posibilidad de ser una humana, Aquamarine muy contenta me lo agradeció y me dijo que haría lo posible para que eso se hiciera realidad, salió de casa para hablar con su padre. Desde la ventana de mi cuarto vi como Aquamarine tomó una concha de mar y hablaba con una persona, como si fuera un teléfono, al terminar dejó la concha en la arena y miró la luna, habló con ella también, yo estaba pensando ¿qué rayos hace? ¿habla por medio de conchas y con la luna?

Después de un rato Aquamarine regresó a casa, entró a mi cuarto y me dijo que su padre se había molestado mucho por desear ser humana y que yo quisiera ser una sirena, por lo que le negó rotundamente su petición, pero que al hablar con la luna llegaron a un acuerdo, yo podría ir una semana y ser una sirena, me emocioné tanto de que me dijera eso ¡sería una sirena! Le pregunté que a partir de cuando empezaba ese acuerdo que había hecho con la luna, Aquamarine, muy contenta, me dijo que por la mañana del siguiente día.

Esperé con ansias el día siguiente, no le dije nada a JoJo por que se que se negaría a esta nueva aventura, por la mañana Aquamarine y yo nos despertamos muy temprano y nos dirigimos al mar, me despedí de ella, sólo vi el mar y emprendí mi sueño.

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⏰ Última actualización: Jun 21, 2019 ⏰

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Un verano en la playaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora