Benjamín

Era un duende, muy valiente,

pero era un duende,

no por eso,

tampoco dejaba de ser temeroso

Y como tal,

no dejaba de ser obediente

Era un duende...

pero aúnque lo vieran por un guiño

¡le molestaba que lo confundieran con un niño!

pero caracteristico era de su estatura,

de la cual

su orgullo sobrepasaba en altura

si era un duende...

Y tambien era un ser

por más insignificante

que fuera su presencia en el mundo,

anhelaba crecer

de la manera mejor y gratificante

donde su alma presiada

tenia como gran amante y mujer

a la vida,

y sus aventuras semejantes

las cuales estaban entrelazadas

con la musica, la naturaleza

la comida y tantas otras cosas

En la sangre duende, obviamente,

tambien disfrutaba mucho de las travesuras

Y por más años que tuviera

siempre seria capaz

de ocurrirsele nuevas y modernas

de las tantas

vulgares como torpes...

Duende como era,

cuidaba lo que amaba,

amaba lo que hacía,

odiaba lo que no le parecía.

Y es que asi son los duendes,

y tarde o temprano

será juzgado como todos,

junto a todos ...

Era un duende nada más,

un duende cansado,

que disponia irse a vivir,

a un mejor lugar.

Con más colores, más desconocidos,

más arboles quizas,

menos animales que cuidar,

otras razas, otras etnias, otras lenguas,

que no le recordase en nada su pasado.

Era un duende que viajando quería olvidar,

era un duende que intentaba escapar...