JongDae va a los viernes de película que su hermana organiza sólo para pasar tiempo con el mejor amigo del novio de su hermana, Kim MinSeok. Pero entonces, una trágica noticia sobre osos polares arruina su tarde y desata el caos.
"¿Esto quiere deci...
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JongDae caminaba de un lado a otro, recorriendo los extremos de la habitación de forma repetitiva. Sus pasos eran rápidos y pequeños y las zapatillas que llevaba producían un chirrido a causa de la fricción contra el piso de cerámica. Su diestra próxima a su boca con el pulgar siendo mordido con ansias, mientras que su mano libre sostenía su teléfono celular con la pantalla encendida. Tenía el entrecejo arrugado y sus ojos no se despegaban de la pantalla del aparato electrónico.
—¡¿Puedes dejar de actuar como el raro que eres?! — gritó una muchacha al mismo tiempo que se levantó y colocó una de sus manos en la frente de JongDae para detenerlo — Me estresa verte asi, no te traje para que nos perturbes.
—No lo entiendes — con un movimiento liberó su cabeza — ¡Estamos perdidos!
—¡Yah Kim JongDae! Si no actúas como una persona normal en los próximos 10 segundos, tendrás que irte a casa solo.
El aludido siseó un par de improperios, ignorando el pequeño manotazo que la muchacha le había dado y se sentó en uno de los lugares libres.
—ChanMin hyung — comenzó — ¿Cómo soportas a mi hermana? ¿te tiene amenazado?
—¡Chen! — la chica se lanzó sobre su hermano, cubriéndole la boca, pero este lamió la palma, logrando liberarse de inmediato — Eres un maldito asque...
—Tengo varios secretos vergonzosos sobre ella, podrías usarlos para chantajearla y ser libre.
ChanMin estaba rojo, tratando de aguantar la risa, pero logró calmarse para lograr responder sin problemas.
—Gracias, pero estoy con Jessica porque la amo y quiero estar con ella. Además, no es tan mala, es la chica más dulce, inteligente e increíble del mundo.
La chica le sacó la lengua a su hermano antes de volver a su sitio y abrazar a su novio.
—Puaj, ustedes están en su bendita burbuja cuando el mundo se está cayendo en pedazos — se arrodilló frente a su hermana y futuro cuñado, enseñándoles la pantalla de su celular — ¡Osos polares! ¡Pobres osos polares que han tenido que dejar su hogar en el polo norte para buscar comida en la ciudad! Ellos deberían estar felices en el hielo comiendo peces, no buscando comida en un basurero.
—Oh Dios... — se quejó Jessica, gesticulando un "no de nuevo" antes de dirigirse a su hermano pequeño —. Es triste, pero no podemos hacer nada, ellos están en Rusia, nosotros en Corea. El gobierno ruso debería hacer algo por ellos, darles comida o algo.
—Así no funcionan las cosas — replicó con furia —. El hogar de los osos polares se está derritiendo por culpa de todos nosotros, no importa si vives en el otro lado del mundo, estamos contribuyendo a que su hogar desaparezca — Jessica puso los ojos en blanco, ocasionando que JongDae apretara los puños — ¿Te parece que estoy bromeando?
