25' ¿Y tú?

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⬇️NOTICIAS MUY IMPORTANTES HASTA ABAJOOOOO⬇️ (por cierto, este Shot se desarrolla un poquitín antes de CAATWS)

—¿Así que Tony volvió a echarte de la Torre?

—Sería la cuarta vez en este mes y la verdad es que creo que no será la última.

Ante los ojos de mi querido compañero Rogers, me fue imposible reprímir la carcajada que esperaba ansiosa entre las paredes de mi garganta. Sus problemas infantiles —y un tanto maritales— con Tony parecían no tener fin, y tener a Rogers en mi departamento cada semana se estaba volviendo una costumbre. Un hábito, que, de ser honesta, no me molestaba en lo más mínimo.

—¿Y esta vez por qué?

Steve bajó la mirada a la taza humeante.

—Preferiría no decirlo —farfulló antes de darle un largo trago a la taza de café que reposaba entre sus manos.

Ante el comentario levanté mis cejas en una expresión sarcástica.

—¿Tan estúpida fue la discusión?

Steve se lo pensó de manera literaria y posteriormente devolvió la mirada a mis ojos para sonreír con cierta sorna.

—Fue el control remoto —admitió—. Yo ha la estado ahí desde horas antes, y él solo llegó y quitó el canal de las noticias y...

—Lo entiendo Steve —interrumpí al presenciar como el rostro de mi compañero se tronaba cada vez más rojizo al recordar la escena dentro de la famosa Torre Avengers, donde, para su desgracia, vivía junto con Tony por estrictas órdenes de Fury y el señor Secretario.

Steve soltó un suspiro.

—La verdad es que estoy considerando moverme a un departamento.

—¿Un departamento?

—Sí, como el tuyo.Tú puedes hacer lo que quieras como quieras y con quien quieras.

Steve parecía realmente frustrado. Sus cejas estaban casi juntas, su frente arrugada y sus dedos amarillos de lo fuerte que apretaba la taza. Por fuera mi rostro mostraba una sonrisa, pero por dentro comprendía un tanto al rubio, él quería su libertad.

Carraspee.

—Fury me asignó a Washington DC —admití después de pasar algunos segundos pensando si darle la noticia, u omitirla.

Con el comentario, Steve me miró con cierto anhelo y duda. Yo, en cambió, bajé esta vez la mirada a la taza de café y comencé a girarla, admirando como el líquido marrón creaba pequeñas ondas en el centro.

—Si quieres puedo pedirle a Fury que te reasigne a Washington —hice una pausa en la que aproveché para darle un gran sorbo al café—. Conmigo.

Está vez el rostro de Rogers se iluminó cual niño en dulcería. Una pequeña sonrisa apareció de pronto en sus rosados labios.

Sin embargo, después de algunos segundos la sonrisa se desvaneció, y una mueca de preocupación tomó lugar en su rostro. Aquello me había tomado desprevenida, yo en verdad creía que a él le encantaría la idea de moverse a Washington conmigo, ¿pero, y si en realidad todo era una ilusión de mi parte y él prefería seguir con Tony en vez que...?

—Pero te refieres vivir, ya sabes, ¿juntos?

—No —aclaré de inmediato.

Romanogers little and big One Shots Donde viven las historias. Descúbrelo ahora