Wannabe.

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Bucky estaba en el borde.

No es que no le gustara el coronel Rhodes. Antes de que él y Tony comenzaran a salir, Rhodes estaba (comprensiblemente) desconfiado cuando Steve había llevado a Bucky a la torre. Pero después de una semana más o menos de miradas sospechosas y de medición, Rhodes comenzó a relajarse, acercándose lentamente a Bucky a su manera.

En sus visitas a la torre, Rhodes se detenía para charlar y salir con Bucky después de sus visitas a Tony. A medida que Tony y Bucky se acercaron más y más, Rhodes comenzó a incluir a Bucky en más conversaciones y almuerzos ocasionales con Tony.

Rhodes incluso le prestó a Bucky algunas de sus películas favoritas. Un día, Rhodes sacó una pila gigante de DVDs y los puso sobre la mesa de café. "Tony está horrorizado de que no hayas visto muchos de estos todavía, así que los dejo para ustedes dos. Son clásicos, no importa lo que Tony diga".

(Rhodes tenía razón, eran clásicos. Aunque, era algo gracioso que Rhodes fuera un entusiasta de las películas de ciencia ficción. Bucky tuvo que aguantar a un gruñón Tony todo el tiempo, murmurando sobre la mala ciencia ficción en el cuello de Bucky, así que al final eso fue una victoria definitiva).

Eventualmente, se convirtió en algo común para los vengadores encontrase con la vista de Bucky y Tony acurrucados en el sofá, comiendo palomitas de maíz y gritándole a la pantalla. Ocasionalmente, el resto del equipo incluso se uniría a ellos mientras se extendían por toda la sala de estar con mantas y bocadillos.

(Bucky obstinadamente ignoró las miradas sabedoras de Steve y Sam. ¿Y qué si Bucky siempre llegaba temprano para reclamar su lugar junto a Tony en el sofá? Sin importar lo que Steve pensara, Bucky definitivamente no se molestó cuando Clint decidió un día sentarse en el asiento de Bucky. Además, ¿qué importaba si Bucky llegó diez minutos antes la próxima noche de cine para garantizar un lugar a la derecha de Tony?)

Después de meses de miradas prolongadas y suaves toques, Rhodes puso los ojos en blanco y dejó caer a su mejor amigo en el regazo de Bucky. Tony chilló. Miró a Rhodes con total traición mientras Bucky automáticamente enroscaba sus brazos alrededor de la cintura de Tony, ambos mirando al poco impresionado Coronel.

"Sólo salgan ya. Estoy obteniendo caries de ver su asquerosamente lindo y totalmente indiscreto coqueteo".

Aproximadamente una semana después de que Tony y Bucky comenzaran a salir, Bucky no se sorprendió al sentir unos ojos que lo miraban fijamente mientras besaba a Tony despidiendolo para el trabajo. Sinceramente, Bucky estaba esperando esta charla mucho antes, así que cuando Rhodey (como él insistió en que Bucky lo llamara) pidió reunirse con Bucky para el almuerzo, Bucky se preparó para un largo discurso.

Bucky estaba sudando profusamente cuando llegaron a la pequeña pizzería, una de las favoritas del equipo después de una batalla. El dueño les hizo un gesto con la mano a un pequeño rincón en la parte de atrás, escondido lejos de la concurrida actividad a la hora del almuerzo que llenaba el restaurante. Después de que ordenaron, Bucky se obligó a no moverse mientras que el camarero se iba con sus órdenes.

Rhodey juntó las manos. "Entonces, a juzgar por tu 'cara de asesinato' como le gusta llamarla a Tony, creo que tienes una idea de por qué te invité a almorzar".

Bucky se enderezó. Mirando a Rhodey directamente a los ojos. "Ya tuve a Pepper amenazando todo lo que tengo hace unos días con Happy, haciendo crujir sus nudillos no tan sutilmente detrás de ella..."

Rhodey gimió, frotándose la frente. "Maldición Pepper. Ella me prometió que yo sería el primero..."

Bucky tomó un sorbo de su agua, chupando un cubo de hielo. "Bueno, si ayuda, creo que es más intimidante que Natasha. No le digas a Nat que dije eso". Bucky se estremeció.

8 reglas simples (para salir con Tony Stark).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora