Dos Chicos

14- Dos chicas y Dos pláticas

Han pasado tres días desde lo que pasó con Blake y la verdad es que he tratado de evitarlo un poco. No es que no quiera hablar con él pero en mi mente no deja de repetirse aquella incómoda escena.

Blake por otro lado parece normal como si no hubiese pasado nada de nada. Afortunadamente solo hemos estado solos en la clase de historia y de matemáticas. Aun así no puedo quitar la sensación de vergüenza al recordar mi gemido.

Si sigo así estoy jodido, Blake hace que me entusiasme demasiado, solo fue un mordisco pero causó tanto en mi, no puedo describir lo que sentí pero se que fue grandioso.  Me vuelve loco y me estoy enamorando tanto que ya me duele verlo con Kaya.

Evito seguír pensando en eso porque es vergonzoso, tanto que ni siquiera he sido capaz de contárselo a Sami y a Sam.

-Señor Winchester, ¿podría dar lectura?- escucho que me dice la profesora Djamur.

Yo asiento y comienzo a dar lectura a un poema de Emily Dickenson. Nunca me ha gustado la poesía. Llámenme inculto si gustan pero es la verdad, aunque no me crean del todo un ignorante, solo es que soy mas de artículos científicos o de divulgación, siempre leo artículos gratuitos de Nature o de Science eso gracias a mi padre quien amaba la ciencia y sobre todo la biología, supongo que por eso me gusta tanto.

Luego de que terminé de leer, la profesora comenzó a hablar de las figuras retóricas. La verdad solo apunto lo necesario y no más, así que me alegro cuando se da por finalizada la clase.

Con Tessa y Zack caminamos hacia afuera del edificio, por mi parte debo irme a la reunión de biología, así que después de pasar al baño me despedire de los chicos.

Entro al baño del primer piso y orino en uno de los cubículos, luego salgo a lavar mis manos pero veo que Zack está recargado en los lavabos

-¿También venias al baño?- le pregunto mientras el se mueve y me permite lavarme las manos

-Yo quería pedirte un favor- me dice mirándome por el espejo

-Sip, dime-

-El sábado es la fiesta en la casa de Andrew y quería pedirle a Tessa ser algo más- de inmediato miro a mi amigo y le sonrio

-¡Eso es genial!- lo abrazo y le sacudo el pelo, él solo asiente tímido

-Por eso quería cambiar mi aspecto un poco y quería saber si ¿Tu podrías ayudarme?-

-Zack amigo, me gustaría ayudar pero no tengo sentido de la moda. ¿Has visto mi cabello? siempre es un desastre- le digo con una sonrisa aunque es verdad yo solo me pongo lo primero que encuentro

-Pero aún así le gustas a las chicas- me rebate -Si me parezco un poco a ti quizás impresione ¿no?-

-No creo que eso sea necesario, yo no te puedo ayudar pero creo que Sami y Sam pueden- le digo, estoy seguro de que esos dos me ayudarán con Zack - Les diré y ellos de seguro te ayudan

Zack sonríe y acepta de inmediato

-Vale, no se quienes son pero eso sería genial-

-Son mis mejores amigos, verás que te agradaran y ellos te ayudarán- le digo convencido

Zack me abraza y me murmura al oído que soy increíble, yo solo niego y lo felicito una vez más por atreverse a dar ese enorme paso, luego salimos del baño para encontrarnos con Tessa y su ceño fruncido

-¿Que rayos hacían? Tardaron un montón ahí adentro- Nos dice un poco molesta

-¿Enserio quieres saber?- le digo con una sonrisa traviesa