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28 de noviembre, Harry se disponía a prepararse para ir a la sala de ensayo. Desde el día que quedaron por primera vez, Violonchelo y él se veían casi todos los días. Se habían vuelto muy buenos amigos desde entonces. Además, Violonchelo decidió quedarse más tiempo en la casa de su abuela, para poder ir con Harry a la sala, pasear o hablar más seguido. De vez en cuando también quedaban con Viola, la novia de Harry, ya que sabía tocar la guitarra muy bien.

Hoy era un día especial, ya que tocarían en un evento en el colegio de secundaria público del barrio, así que tenían que ensayar a fondo para que todo saliese como estaba previsto.

Cuando Harry llegó, vio ensayando a Viola y Violonchelo, que hoy habían quedado temprano. Viola afinaba su guitarra y Violonchelo repasaba unos acordes. Se saludaron y comenzaron a tocar las canciones preparadas. En todo este tiempo, Harry había aprendido a tocar un poco la guitarra, por lo que intentaría tocar también unos acordes además de cantar. Y solo les faltaba algo para ser una banda completa: el batería, en este caso, el primo de Vito, Eider. Él había ensayado un par de días junto a ellos y se sabía la actuación de memoria.

Estaban todos muy emocionados, y a la vez nerviosos, (excepto Eider, que tocaba casi semanalmente) ya que era la primera vez que se subirían a un escenario. Violonchelo, aunque ya había tocado en la actuación de Haloween, sentía como si fuese la primera vez que lo hacía, ya que estaba con sus amigos y lo tenía todo preparado, no como aquella vez, que sustituyó a aquel miembro del grupo porque se sabía más o menos la canción que iba a tocar. Además ese día sus errores aumentaron ya que, como no había ensayado previamente, a veces se perdía en la partitura. Sin embargo, todo el mundo se quedó impresionado con su capacidad, a pesar de sus fallos.

Ya había llegado la hora. Cogieron sus instrumentos y pidieron un taxi, ya que el instituto estaba bastante lejos de la sala de ensayo.

Cuando llegaron, ya estaba todo preparado en el escenario y la gente ya estaba sentada en las gradas por lo que se prepararon lo más rápido posible. Cuando estuvo todo listo, se abrió el telón y comenzaron a tocar. Al principio la canción era un poco lenta, por lo que Harry se lo tomó con calma. Se sentía muy bien en el escenario, al menos al principio, porque ya llevaban un rato tocando y aún nadie se movía entre el público. A Harry le comenzaron a entrar nervios. ¿No les estaba gustando? Con todo lo que habían ensayado. Se fue poniendo cada vez más nervioso. Intentó controlarse, ya que en nada tenía que romper y cantar la parte más difícil de la canción. Tomó aire y se relajó, intentado no mirar al público. Y en ese momento cantó con todas sus fuerzas. La canción pasó de tener un tono más bien suave y lento  a uno con más fuerza y emoción. Y en ese momento todos empezaron a aplaudir y gritar, por lo que las preocupaciones de Harry se disiparon y empezó a disfrutar de verdad en el escenario, al igual que Viola y Violonchelo.

Y en ese momento, los tres comprendieron que aquello les gustaba de verdad.


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Harry llegó a su casa agotado. Se había esforzado un montón y había conseguido que saliese todo bien. Por ello una expresión de satisfacción se dibujó en su rostro. Cogió las cartas del buzón y se sentó en el sillón.

Para su sorpresa, la montaña de cartas abultaba más de lo normal. Habitualmente sólo había alguna carta del banco, dos o tres folletos publicitarios, alguna de correos sobre que tenía un paquete que recoger y la del casero. Pero esta vez estaban las carta habituales y un montón de cartas del casero. A Harry se le pasó toda la felicidad de golpe y se dispuso a aabrir una de ellas. Lo que se encontró no fue nada bueno.

Hacía más de dos meses que no pagaba el alquiler y por ello no dudarían en desahuciarlo si no pagaba en el plazo máximo de 30 días. El problema era que esa carta se la habían enviado hacía ya dos semanas, por lo tanto le quedaban quince días para pagar la cantidad de casi 2000 euros.

Entonces Harry entró en pánico. A penas tenía en el banco la cantidad de 500 euros ¿Cómo iba a hacer para conseguir al menos 1500 euros en tan poco tiempo? A sus padres no les podía pedir más dinero, ya que estaban enfadados con él desde que dejó los estudios por una temporada. Tampoco tenía trabajo, y encontrar uno en tan poco tiempo no iba a ser fácil, por no hablar de que sin experiencia laboral o algún tipo de título, lo máximo que le podrían pagar serían máximo 500 euros, por no hablar de que el dinero llegaría a su cuenta un mes más tarde de que empezara a trabajar y solo tenía quince días para reunirlo. Tampoco les podía pedir dinero a sus amigos, ya les había pedido en otras ocasiones y a algunos todavía no se lo había devuelto.

Estaba desesperado. Pensó que tal vez Viola podría dejar que se quedara en su piso durante un tiempo, pero tampoco la quería poner en es situación. 

Sin saber que hacer, salió a pasear. Las calles de su barrio de Madrid solia decirse que eran las más peligrosas, pero a él nunca le había pasado nada. Disfrutaba siempre de ir a n parque que se encontraba a poco más de dos manzanas de su piso. Allí podía relajarse, ya que no iba mucha gente. Ya había ido allí con Violonchelo un par de veces. A él también le gustaba la tranquilidad que se respiraba. Esta vez se encontraba totalmente solo y esa tranquilidad había desaparecido.

Cuando se dio cuenta de que aquello no ayudaba, decidió irse a casa. Esta vez fue por otra calle por la que no había ido nunca. A su izquierda estaba la carretera no muy transitada y a su derecha las paredes estaban cubiertas de graffitis y carteles. Eran los típicos carteles de "Se vende casa, totalmente amueblada. Llamar a tal número..." "Se busca cuidador o cuidadora de ancianos..." "Perro perdido, contactar con tal..." "Concurso de bandas, premio de 3000€..."

Y a Harry se le abrieron los ojos. En un barrio no muy lejano se iba a disputar un concurso de bandas que se llevaba celebrando 10 años, por lo tanto el premio era mayor de lo normal y estaba financiado por el ayuntamiento. No lo dudó ni un segundo y llamó a Viola y a Violonchelo.


El secreto de Stuart (El Trío Secreto De Harry 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora