Lo esencial es invisible para los ojos.

No Hay Segunda Parte...

Aquí, donde las cosas parecen cuentos de hadas pero no lo son, donde no se puede comenzar a contar esta historia con un "había una vez" ni tampoco se puede terminar con un "y vivieron felices para siempre". Aquí, donde las palabras duelen y la razón se pierde, donde las emociones son tus enemigas...

Aquí, donde está permitido ser imperecedero y nabundear en los recuerdos efímeros que "Ella y Otra" tuvieron que crear en segundos, a escondidas del mundo... Pero aquí estamos, para contar la verdad, sin ocultar lo que creen que no se ha dicho, lo que creen que no está, para los que creen que lo esencial es invisble para los ojos, pero no para "Ella y Otra".

"Ella", una chica llena de sueños y objetivos, su vida deambulaba en tener que hacer lo correcto, una vida llena de amor y comprensión que se iba formando con el pasar del tiempo. No sabía amarrar sus cordones, su madre debía hacerlo cada mañana cuando se iba a trabajar.

"Otra", una chica con intereses y ambiciones, que a lo largo de su vida ha aprendido a aceptar el vacío que genera el éxito. Todas las mañanas se preparaba un café, comía fruta y luego salía a cumplir con sus responsabilidades. No sabía andar en bicicleta, así que decidió correr a todas partes.

"Ella", una chica llena de ilusiones, con un gran repertorio de amistades, siempre en busca del amor y decepcionada del mismo en muchas ocasiones. Con ganas de encontrar una aventura que la haga soñar y con olores viajar.

"Otra", como un lobo solitario cumpliendo con sus obligaciones cada día de la semana, rindiendo de sobremanera, llevando su vida a un abismo de resposabilidades por cumplir, sin embargo sabía que estaba construyendo su base para la felicidad.

"Ella", con los sueños viajeros y las maletas listas para partir en cualquier momento a cualquier parte del mundo.

"Otra", programando futuros nuevos viajes, viajando y volviendo a viajar, era su placer culpable y no había quién se lo pudiera quitar.

"Ella", llevaba una vida tranquila y armónica, tenía lo que quería.

"Otra", su vida estaba en paz, obtenía lo que quería.

"Ella y Otra" se cruzaron. "Otra" vio una foto de "Ella", y sintió como sus ojos se clavaban en su mirada a pesar de que solo fuera una imagen, sintió que había algo que nadie más veía, pero siguió con su vida normal...

"Ella", solo se sonrojó al ver la reacción de "Otra".

"Otra", estaba con una chica distinta.

Pasaron los días, "Ella y Otra" no volvieron a cruzar palabras, ni fotos, ni menos miradas. Pero el destino iba a ser más fuerte...

"Ella", feliz de reunirse con sus amigas para irse de fiesta.

"Otra", preocupada de la hora, de con quién se iba a encontrar, de a quién tenía que cuidar en la fiesta.

"Otra" llegó al punto de encuentro, iba con sus amigas. "Ella" esperaba con sus amigas a que llegaran. "Otra" saludó de beso y dijo su nombre. "Ella" sintió que "Otra" era desagradable. "Otra" no reconoció la mirada de "Ella", al menos en ese momento no quiso hacerlo por todo lo que llevaba en su cabeza.

Llegaron todas a la fiesta, "Otra" estaba con la chica de antes. "Ella" siempre con sus amigas.

"Otra" salió a fumar para distraerse de sus pensamientos y responsabilidades, conversó con personas desconocidas y se dio cuenta de que estaba muy desconectada de su cabeza. "Ella" la vio conversando y se acercó. "Otra" le preguntó quién era y "Ella" le respondió. "Otra" se sorprendió y se sintió estúpida por ignorarla.