Illuso x Lectora - El Reflejo de tu Amor

Mentiras

ADVERTENCIA: En los siguientes capítulos, encontrarán escenas yaoi lemon, no pregunten porqué(?

Y pues, me dio por revisar los capítulos que ya estaban previamente escritos por mi ^^ solo les di una revisada y a publicarse. ~ 

__

Volviendo al tema de las oficinas:

—Marisa, ¿Y a ti quién te gusta de la Squadra? Espero ser yo— Habló el pelimorado.

—Eh, eres mi segundo favorito ^o^

— :( 

—El primero es Risotto Nero. Quiero levantar su pezones con mis dedos y chuparlos mientras se masturba. Usaré mi boca en uno y para el otro las huellas de mis dedos. Oh, si...

—Y a mi me dicen loco...

—Descuida, estamos en confianza, ¿No es así?

—No sabría decirte. Nuestra conversación será publicada junto con éste capítulo.

Marisa se puso nerviosa a mas no poder.

—Ee-eh... bueno... mejor v-veamos qué pasó después de que asesinaron repentinamente a Melone— Dijo mientras se escondía detrás de su laptop

—Oye, pero yo estoy aquí...

—¡En el libro, imbécil!

_______________

La ira consumió a Ciliegia. Comenzó a asesinar a cuanta gente se cruzaba en su camino con ayuda de Hellcore, también usó un plan inédito para desaparecer a toda La Squadra menos a Illuso por estar en el mundo del espejo y a Risotto, quién aún confiaba en ella.

Todos sus compañeros estaban desaparecidos, aparentemente, todos se encontraban en una casa abandonada. Sonaba normal, pero todos estaban amarrados, listos para ser tomados de rehenes. Ciliegia, tiene un contacto especial, el cual está ahora de guardia de la élite vigilando al grupo; un solo movimiento... y todos morirán. 

En ese mismo rato, Ciliegia recibe una llamada de Risotto:

—''¿Dónde están todos?''

—Bueno, Melone murió y los demás desaparecieron.

Risotto guardó un momento de silencio.

—''Illuso también respondió mi llamada. Quiero que los dos localicen a los demás, dejen la misión del objetivo para más tarde a menos que sea por ella que estén desaparecidos''.

—Creo saber dónde están. Iré a la misma tienda donde encontré los papeles.

—''De acuerdo. Le diré a Illuso que vaya contigo. Debo colgar, avísame cuando sepas de los demás''.

Risotto colgó la llamada. Se puso un poco tenso por la muerte de Melone, pero intentó contenerse, ya que tenía que tenía que dar el ejemplo como el líder que es. Acto seguido, ve a un hombre con un traje café que cubría todo su cuerpo; se acercó al capo.

—Oye, eres Risotto, ¿No?

—Así es. ¿Qué se te ofrece?

—¡Cioccolata tiene de rehenes a tus hombres! Me escapé un momento para avisarte. Estoy enojado con él, así que no dejaré que mate a nadie hasta que me sienta mejor.

El capo, un poco tenso, responde; —¿Y dónde se encuentran?

—Están en una casa abandonada ¡Vamos! Pediré un taxi.