Extra [III]

7.3K 673 86
                                    

Que nunca muera tu forma tan linda de ver la vida

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Que nunca muera tu forma tan linda de ver la vida.
Que siempre brilles más que el sol.
Que nunca se apague esa sonrisa.
Y, por sobre todas las cosas, que nunca muera tu ternura.





Henry había estado ahorrando en secreto para darle una sorpresa a su omega

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Henry había estado ahorrando en secreto para darle una sorpresa a su omega.

Karl había decidido tomar un descanso de la empresa para dedicarse al reposo absoluto que los médicos le habían ordenado hasta que fuera la hora de traer al mundo a su bebé.

Joshua también se tomaría un descanso para cuidar a su beta y a su cachorro.

Con dos bajas en la empresa, más una pronta tercera cuando Samuel diera a luz a sus cachorros y Emma también se dedicara íntegramente al cuidado de su omega y sus cachorros, la hora de cubrir los puestos vacantes había llegado.

Jessica había ascendido, tomando el puesto de Karl y Tobías, en un futuro, tomaría el puesto de Emma.

Mason también había sido ascendido para tomar el puesto de Joshua.
Ahora él era el encargado de todo el personal de seguridad.

Entre sus nuevas funciones se encontraba todo el papeleo que conllevaba los cuadrantes con los nuevos horarios de su personal, algunas reuniones con Emma para mantenerla informada sobre todo lo que acontecía y, además, reparar algunas cámaras de seguridad u ordenadores que daban fallos.

Todo esto acompañado de sus respectivas antiguas funciones laborales ya que, cuando le tocaba vigilar en el vestíbulo, debía hacerlo como otro personal de seguridad más.

No obstante, y a pesar de la evidente carga de trabajo, Mason no podía estar más emocionado por ello.

— ¿Estás listo, amor? —inquirió Henry con dulzura, ayudando a su omega a cruzar el apartamento para llegar hasta una zona específica.

Había vendado sus ojos para darle más emoción.

Sabía que en un futuro tendría que comprar una casa, pues el reducido espacio de su apartamento no les daba para mucho. No obstante, Henry se las había apañado para montar un pequeño, pero agradable, despacho en el que Mason pudiera sentir como su espacio propio.

Alfa, quiero un nido ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora