Capítulo 4

1.7K 125 101
                                    

H A N N A H

-¡¿Dónde metieron a Pili?!-reclamé a mis amigas, quienes no paraban de carcajear.

-No pensé que te molestaría tanto, pero ahora que me doy cuenta que si, es muy divertido-dijo Elena, aún riéndose junto a Olivia.

-¡Esto no es divertido chicas!-exclamé con desesperación, buscando en cada esquina de mi habitación.

-¡Si lo es! es sorprendente como te pones así sólo por un venado de peluche...-dice Olivia entre risas.

-¡Es una oveja!-reclamo ofendida una vez más.

Luego de buscar múltiples veces consigo mi peluche.

-Las voy a matar...

De pronto, el timbre de la casa sonó, mis padres no estaban en casa y Nicolas había salido, sólo estábamos mis amigas y yo.

Bajé junto a las chicas para ver quien tocaba el timbre.

Me acerqué a la puerta para observar a través de 'el huequito' como yo lo llamaba, y cuando mis ojos lo vieron retrocedí rápidamente.

No puede estar pasando.

No puede estar pasando.

No puede estar pasando.

Pero sí está pasando.

-¿Qué ocurre?-pregunta Olivia claramente confundida.

-¿Es un extraño? porque si es así yo sé artes marciales y pue...

Arrugo el entrecejo y niego rápidamente.

-Chicas, la razón principal por la cual las invité a mi casa está en este momento detrás de esta puerta-explico y ambas me miran confundidas.

Me miro en el espejo de la sala rápidamente y luego abro la puerta con una sonrisa amable, sus ojos se encuentran con los míos, siento mis mejillas arder.

-Ho-hola-saluda él-aparentemente-nervioso.

-Hola-¿Qué se supone que tengo que decir?

Sus amigos le dan un pequeño empujoncito y yo arrugo las cejas.

-Nosotros...-él carraspea-nosotros somos de...fútbol y...no-nosotros...

-Queremos invitarlas a ver nuestro partido el próximo fin de semana-dice otro chico entregando unas invitaciones-pueden comprarlas en las tiendas de ahí-dice señalando el papel-o llamar a este número-dice entregando una hoja aparte.

Elena arquea una ceja y toma la hoja-Algo me dice que este número no es de alguien que vende entradas sino de uno de ustedes-dice ella.

-Nosotros vendemos entradas también-responde otro chico.

-Bien, seguro que asistiremos-digo con una sonrisa de labios cerrados.

-Mucho gusto...-alarga él con interrogación para que le diga mi nombre.

-Hannah, Hannah Hudson.

Él sonríe-Mucho gusto Hannah.

¿Qué haces Hannah?

¡Te está coqueteando!

¡¿Acaso no ves, tonta?!

Que tarado, tiene novia.

-Un placer conocerte Julian, pero no creo que a tu novia la pelirroja le guste que andes dándole tu número a desconocidas-digo, creyendo que me he comido el mundo con ese comentario.

Tres segundos.

Tres largos segundos de silencio que se sintieron como una eternidad.

Una incómoda eternidad.

Luego, sus amigos empezaron a reír y él estaba prácticamente aguantando las ganas de hacer lo mismo.

¿Dije algo malo?

-Mmmmm, primero, mi nombre es Jaeden, no Julian, y segundo, Sophia, la chica pelirroja no es mi novia, es sólo mi amiga.

Santo Dios.

¡La he cagado como nunca antes!

Trágame tierra.

-Yo...

-Tranquila, a veces nos confundimos supongo...

De repente, llega Nicolas y le doy una mirada fulminante, él pasa y saluda a los muchachos, como mencionó anteriormente los conoce por sus entrenamientos de fútbol.

-Un gusto chicos-me despido y paso rápidamente a mi casa, escondiéndome detrás de una silla.

Las chicas vienen detrás de mi y me dan una mirada de absoluta confusión.

-¿Hay algo que no nos has contado?-pregunta Olivia, con una ceja arqueada.

Me quedo callada un momento y Nicolas entra a la casa pero yo lo detengo cuando hablo.

-¿Con que Julian eh?

Él suelta una carcajada.

-¡No es gracioso! gracias a ti pasé la mayor vergüenza de mi existencia, ¡y frente a mi crush!-reclamo.

-¡¿Tú que?!-preguntan mis amigas al unísono, sorprendidas.

Cierro los ojos con fuerza porque acabo de soltar la bomba así nada más.

¡Diablos!

-Yo...-trato de decir.

-¡Hannah! ¿sabes cuántas veces creímos que ibas a terminar sola y con cincuenta gatos?-cuestiona Elena.

¿Por qué todo el mundo pensaba eso?

-Exageran, no era para tanto...

-La última vez que te gustó alguien fue hace...hace muchísimo tiempo, ¿cómo no nos contaste?

-Me gusta hace cinco años, y saben...no sé, jamás estuve completamente segura si de verdad me gustaba, empecé a creer que con el tiempo crecería y mi 'amor' por él simplemente iba a desaparecer porque era una cosa de niños, ya saben, de mi antigua yo, pero no, resultó todo lo contrario, ahora me gusta más, mucho más, y me he vuelto tan loca tratando de hablarle y no sé como, ahora que surgió la oportunidad ¡mi querido hermano ha decidido verme pasar vergüenza!-grito, para que me escuche, él sólo me mira como si no hubiera hecho absolutamente nada contra mí.

-Esto es..es asombroso, ¡magnífico! estamos tan felices por ti, ¡es obvio que le gustas!-dice Olivia.

No, no y no.

No es cierto.

-¿Estás loca? por supuesto que no.

-Por supuesto que si-apoya mi otra amiga Elena.

-Ustedes están mal de la cabeza-volteo los ojos y niego con la cabeza.

-Necesitas saber más sobre los chicos, leer libros no es suficiente.

Asiento lentamente, tal vez tienen razón.

-Yo puedo ayudarte-dice Nicolas, las tres lo miramos-es pan comido, me cae bien, es un buen chico, es educado, me gusta para ti y sólo por eso te voy a ayudar...y también porque posiblemente la culpa de haberte dicho que su nombre era Julian me esté carcomiendo en este instante.

Sonrío y asiento.

Jaeden, su nombre es Jaeden.

Lindo nombre, si tiene cara de Jaeden.

Holaaaa, no sé ustedes pero en este momento son las 3:26 am y literalmente me han obligado a subir este capítulo jakjsjaja (Agradezcan a mi amiga Ana María que gracias a ella subí capítulo hoy) si no me gusta mucho lo editaré luego, igual no voy a cambiar nada no se preocupen, pronto subiré másss no se desesperen (nadie lo hace sólo mis amigas ajajjaj) eso es todo, no olviden votarrrr.

XOXO

❝Cada Día❞ [Jaeden Martell.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora