Haniel.
¿Cómo es Haniel?
A bocas de todos es aquel omega de ojos miel y piel pálida, cotizado por todos. Aquel que camina en las calles con tanta elegancia que el tocarlo es un crimen.
Soberbio, ególatra, inalcanzable, perra, son algunas de las pal...
"En ese momento comprendí lo injusto de nuestras vidas, lo iluso que es el desear un final feliz, pero incluso después de todo aun soñaba con ser feliz"
-Haniel
Song: Something I need (One republic)
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Odia su vida.
Pero si odia algo sin duda es su alarma que le impide descansar unos minutos más.
Sabe que debe levantarse, quede debe iniciar con su hartoso día. Odia el echo de que no es capaz de dormir unos minutos más tras haber sido despertado por su horrible alarma.
Quiere gritar de los frustrado que se siente, pero mejor toma aire y con todo el peso del mundo sabe apenas de su cama.
El piso se siente frio, olvido otra vez donde puso las mugres pantuflas que se supone debería estar usando, pero no las ha vuelto a dejar quien sabe dónde.
Se supone que cuando uno inicia sus días debería estar cargado de buenas vibras, actitudes positivas y esas cosas, claro, lo haría "haría".
Si su cabeza no se sintiera de reventar todas las mañanas entonces si se daría el gusto de ser positivo, mientras no, ¿quejarse ayuda?, no, ¿lo empeora? posiblemente.
En su cabeza navega un zumbido de aquí a allá, le cuesta concentrarse o mantener una idea clara de lo que esta haciendo. En algún punto se siente como en un modo automática cuya única función es llevar a cabo una mañana exitosa.
Lastima de su mañana exitosa también incluye baño, odia bañarse, incluso si el agua esta caliente eso no evita que al terminar de bañarse la sensación de frio le recorra el cuerpo aumentando sus ganas de regresar a la cálida cama junto sus protectoras sabanas.
Se viste con las ropas que pasó es escogiendo durante el fin de semana, sus ropas son en tonos claros, elegantes, pareciera que va una gala y no a la universidad. Los tonos claros hacen que su piel se vea más pálida de lo que ya albinamente es.
Se para frente el espejo, agradece tener puestas sus ropas y que estas sean especialmente holgadas de la parte de arriba de la cintura. Le hace sentir un poco mas tranquilo ese hecho.
Observa las ojeras en su rostro, realmente molestas y llamativas. Son una consecuencia de su la falta de sueño que se ha vuelto constante tanto como su solución a la misma es decir "el maquillaje"
Si le preguntaran si le gusta gastar tiempo maquillándose en lugar de dormir, se reiría en sus caras contentando sarcásticamente un "caro amo desvelarme"
Su rutina es una tortura, una que le roba dos horas de sueño todos los días, solo para que como dice su madre "lucir decente".
Sabe que le esta costando más que solo sus horas de sueño aquella rutina. Su cordura posiblemente, pero espera aun tener la suficiente como para no asesinar a alguien.
