El tema estaba afectándome demasiado, pero eso no me detendría a encontrar respuestas, ya estaba aquí, no iba a desperdiciar todo esto solo por un raro sueño.
—Que sueño tan extraño—, pensaba al tomar mi equipaje.
ahora solo debía encontrar un hotel para hospedarme un par de días y después ir en busca del señor Valmont, tomé un taxi y le dije que me llevará al mejor hotel de la ciudad.
-Ya que estoy haciendo todo esto, podría aprovechar y darme uno que otro lujo, hace mucho no tomo un respiro- Por un momento olvidaba aquel estrés que me había mantenido despierto apenas la noche anterior.
Llegué a un enorme hotel "Royal star" era el nombre de ese lujoso lugar.
—Hola, buenas tardes quisiera una de sus habitaciones por favor—, le comenté a la recepcionista.
Dude por un momento que ella trabajara ahí, su aspecto no era el adecuado para estar trabajando en un lugar como ese, realmente no había sido amable, ni atenta, se limitó simplemente en darme las llaves y en cobrarme, era extraño, pues esa chica se me hacía muy familiar, pero no logré enterarme de donde.
—No voy a hacer más incógnitas solo por que creo conocer a alguien.— pensé en forma despreocupada, fui a mi habitación, era el lugar más lujoso que había visto.
Era gigantesco, todo parecía ser hecho de oro, tenía un toque moderno pero también muy clásico, en verdad el nombre le quedaba muy bien a este lugar, después de emocionarme como un niño tomé un baño, en la alberca que tenía como bañera, fui a mi maleta y saqué el sobre donde tenía las fotos, lo habré tomado mal pues todo cayó al suelo como si eso se estuviera convirtiendo en una costumbre, mi corazón se aceleró de un momento a otro, un sudor frío empezó a a escurrir por mi frente, mis ojos se abrieron de par en par cuando levanté esa foto, esa maldita foto.
—No, no puede ser—, Dije con una voz temblorosa mientras me llevaba la mano a la boca.
Aquella era una foto de la habitación del hotel en el que estaba quedándome, salí inmediatamente a la puerta para ver si lograba ver a alguien sospechoso que pudiera haber entrado y tomar esa foto, el pasillo estaba desierto, entre de nuevo y puse el seguro, no dejaba de ver esa foto, intentaba ver algún tipo de reflejo de la persona que la tomó, la examine por al menos media hora, sentado en la esquina de la gigantesca cama, después de soltar un suspiro, la guardé junto a las demás en el sobre y salí de la habitación.
Mientras cruzaba por el lobby miré a la recepcionista, no era la misma chica que me atendió, al sentirme extrañado me acerque para preguntarle sobre su compañera.
—Hola buenas tardes señorita, disculpe, ¿Tendrá mucho que se fue su compañera? Me gustaría hacerle un par de preguntas—, le dije sonriendo, la chica frunció el ceño.
—Lo siento, creo que está confundido señor, soy la única que trabaja de recepcionista y mi compañero es varón, dudo que alguien más a parte de mi le haya atendido—, Comento con una cara de ironía.
—No entiendo, dígame entonces ¿Cómo es que estoy hospedandome aquí, si ni usted ni su compañero me atendió?— pregunté
—Revisé nuestro sistema y efectivamente usted está registrado aquí hace algunas horas, todo está en orden pero no aparece el nombre de la persona que lo atendió, será algún error de nuestro sistema, si tiene algún problema con esto, podemos buscar la forma de aclararlo—, Respondió la chica intentando aclarar las cosas, ya que el lugar era muy prestigioso y cualquier tipo de percance no era permitido.
—No, no te preocupes, mientras todo este en orden y yo pueda seguir en mi habitación está bien—, No deseaba meter en problemas a aquella chica de aspecto gentil y amable, ojos color miel, piel clara y cabello oscuro, no creo que deba comportarme como un mal cliente.
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Poder y oscuridad.
TerrorDía común, Tarde de actividades del hogar, se torna en un encuentro con la diosa de la desesperación , lo cual es solo el inicio de una historia de caos y destrucción.