La noticia de la súbita muerte de Park Chenyoul fue recibida con regocijo por parte de las mafias más poderosas de Seúl. Aparentemente había sido encontrado en su casa, tirado sobre el tatami, sin vida y sin indicios de violencia en su cuerpo.
La autopista lo declaró muerte natural debido a un paro cardíaco. Sin embargo, los líderes de las mafias rivales no se tragaron ese cuento; Park era, sin exagerar, uno de los hombres más ricos e influyentes de todo Corea. Y no era ningún secreto que a lo largo de sus cincuenta años de vida se rodeó de enemigos.
Pero lo que preocupaba no era su muerte, sino descubrir quién heredaría su legado. No sólo poseía propiedades y terrenos, también acciones, depósitos bancarios estimados en más de cinco cifras y negocios muy turbios. Park Chenyoul no tenía hijos, su esposa había fallecido años atrás y su único hermano murió asesinado dos años antes.
La identidad de su heredero era un misterio, dado que este no había hecho testamento, y todos se preguntaban cuál sería el familiar que adquiriría una de las mayores fortunas de Corea.
Los líderes Kim, Min, Jeon y Lee daban por sentado que deberían enfrentarse a un nuevo rival para arrebatar esa herencia que todos codiciaban, no obstante, la sorpresa les golpeó cuando sus espías revelaron la identidad de quien heredaría el patrimonio de Chenyoul.
—Park Jimin, omega, de diecinueve años. Único sobrino de Park Chenyoul. Al no haber testamento, la herencia pasó al familiar vivo más directo. Su padre, el hermano mayor de Chenyoul, fue asesinado en 2014: dos tiros en la cabeza. Se desconoce el autor, pero las sospechas apuntan a la mafia liderada por Jeon. La policía investigó por un mes y cerró el caso, probablemente fue sobornada. La mujer, Park Hayun, se mudó de Seúl tras la muerte de su marido. Ahora reside en Busan junto con su hijo, al parecer no aprobaba los negocios de Chenyoul y nunca se le vinculó con estos.
Jung Hoseok, escolta y confidente de Min YoonGi, terminó de hablar. De pie y recto como una estatua, aguardó a que su jefe dijera algo al respecto.
Este pareció meditar por largos minutos, pero finalmente dijo:
—Quiero que investigues al omega. Su día a día, con quien se relaciona, cualquier movimiento sospechoso. Todo.
—Sí, señor.
Hoseok asintió, y a la señal de su jefe, abandonó el despacho silenciosamente.
A muchos kilómetros de distancia, un joven omega trataba de abrirse paso entre una multitud de periodistas y reporteros que llevaban acosándole desde que se había dado a conocer que él iba a ser el heredero de la fortuna de su tío.
—¿Qué piensa hacer con todo el dinero? ¿Sabía que Park estuvo involucrado en varios casos de corrupción?
—Se especula que Park trató con el tráfico de armas y la prostitución, ¿qué opina de eso?
—¿Hará declaraciones al respecto?
Jimin no decía nada. Cubierto con una gorra y unas gafas de sol, caminaba con la cabeza agachada mientras los guardaespaldas despejaban el camino. Toda esa situación le estaba causando mucha ansiedad, el acoso era constante y temía colapsar en cualquier momento. No había podido ir a la universidad y salir de casa se convertía en un suplicio. Había recibido cientos de llamadas de programas, ofreciéndole exorbitantes cantidades de dinero por hablar acerca de su tío. Él las rechazó todas. Su madre tampoco podía salir sin verse acosada por una docena de reporteros.
Y por si eso no fuera poco, Jimin se sentía observado. Allá donde iba le parecía notar que alguien le seguía, aunque al voltear el rostro, no veía nada. ¿Se estaría volviendo loco?
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Pretty Psycho
FanfictionJimin solo quiere ser un omega normal de instituto, pero el destino le tiene preparada una sorpresa cuando recibe la herencia de su tío, convirtiéndolo en el joven más rico de Corea. Todas las mafias querrán ese dinero a toda costa, pero un alfa int...