Joel se encontraba en el comedor con el perdiódico en mano esperando a que Emilia llegara con el desayúno, cuando llego bajo el periódico miro su plato y suspiro.
-¿Otra vez huevos con jamón?-prengunto el rizado arto de desayunar lo mismo todo los días.-Estoy arto de siempre desayúnar lo mismo. ¿Qué no tienes imaginación?
-Que grosero, no te has puesto a pensar que yo también estoy harta de tener que prepararte huevos con jamón todo los días de mí vida.-pregunto irritada.
-Por favor Emilia es sábado son las nueve de la mañana. ¿No te parece que esdemasiado temprano para molestarme con tus malos modos?-pregunta Joel ya enojado.
- Bueno si no te gustan no te las comas y contrata una empleada que te haga lo que quieras de desayunar.-dijo mientras se llevaba el plato.
-Buenos días.-dijo Camila entrando al comedor con una sonrisa radiante pero nadie respondio.-Buenos días.-repitío.
-De buenos no tienen nada.-dijo emilia con enojo mirando a Joel.
-¿Saben qué? Hoy nada me puede poner de mal humor, asi que hagan de cuenta que no estoy aquí y sigan con su pelea porfavor.-dijo restandole importancia al asunto.
-Vas a desayúnar ¿si o no?-le dice Emilia a Joel sin prestarle atención a lo que acababa de decir su hija.
-Ya se me quito el hambre.-contesta él rizado sin despegar la vista de su periódico.
-Bueno. ¿Nadie me va a preguntar porque estoy de tan buen humor hoý?-dijo insistiendo pero no recibió respuesta alguna.
-De todos modos les voy a contar. Me voy a casar.-dijo pronunciando fuerte y dando especial enfoque a que se iba a casar.
-¡¿Qué?! ¿Con quién?-dijo la castaña impactada por la noticia de su hija.
-¿Que?-susurra Joel mientras baja su periódico todavia procesando bien las palabras de Camila.
-Me caso con Erick, mi novio á y casi lo olvido despúes de casarnos nos mudaremos a otra ciudad.-suelta relajada comiendo su desayúno.
-¿Mudarse? ¿Por qué?- dice Emilia mas calmada.
-Bueno. ¿Y quién es ese Erick?-dice el rizado ya prestandole toda la atención a su hija.
-Erick es mi novio tenemos seis meses de relación.-responde tranquila.
-¿Y por qué no nos habias dicho nada hija?-insiste Joel.
-La verdad papá es porque ustedes se la viven peleando, estan tan ocupados en sus peleas y discusiones que no se interesan en mí asi que lo vi innecesario.
-Eso no es cierto hija, no, tampoco llegamos a ese extremo.-interviene Emilia.
-Dejala hablar, élla tiene toda la razón.-le contesta Joel de manera brusca.
-Lo ves mamá. ¿Saben qué? He llegado a la conclución de que esa es su manera de demostrarse que se quieren, a mí ya me sirvieron de ejemplo y ¿Saben qué? Mi matrimonio nunca se va a convertir en un campo de batalla como el que tienen ustedes, el caso es que por mí... Matense, ya no voy a estar aquí.-sentencia Camila ya arta de la actitud de sus padres.
-¿Dijiste que te iras a vivir a otra ciudad?-pregunta Joel calmado luego de ecuchar a sú hija.
-Sí, a Erick le ofrecen un muy buen puesto allá, ademas ya pusimos la fecha de la bóda, nos casamos en ún mes y al día siguiente nos mudamos.
-¿Estas segura hija?-pregunta Emilia un poco preocupada por el cambio radical de irse a vivir a otra ciudad.
-Sí mamá.
-Bueno. ¿Y cuando conoceré a mi yerno?-interviene Joel.
-Cuando quieran pero si les adivierto una cosa, no quiero peleas. ¿Por qué no hacen una trégua? ¿Por qué no intentan dejar de Pelear? De aquí a que me mude porfavor.- pide Camila tomando las manos de sus padres.
Ambos solo se limitan a asentir.
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-¿Comó me veo?-pregunto el rizado a su hija que le sonrió en cuanto lo vio con el traje negro que portaba.
-Muy bien papá.-dijo sonriendole.
-Joel volviste a dejar la televisión prendida.-grito Emilia desde la otra habitación.
Joel y Camila rodaron los ojos.
-Tú mamá no tiene remedió hija.-dijo en un suspiro.
-Mamá, lo prometiste.-le dijo viendo como entraba al comedor en donde es encontraban ellos.
-¿Qué?-dijo ella fingiendo indignación.
-Prometiste no pelear con papá porfavor, almenos esta noche.- le rogó.
-Es que no hay manera de que tú papá apague la televisión.-le contesto quejandose.
-Mira mamá. ¿Tú crees que después de tantos años va a empezar a hacerlo? La gente no cambia, porque no te haces a la idea y...-fue interrumpida por el timbre.-Ya llego, voy a abrir.- dice sonriendo mientras se dirige a la puerta.
