eighteen

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después de aquella conversación, joaquín compró un par de panecillos para ambos. emilio al principio se negó a aceptarlo ya que consideraba que era bastante dinero, sin embargo, después de un rato se rindió y terminó aceptándolo.

ambos chicos se encontraban sentados en uno de los muchos tejados que había en el pueblo, ambos reían y sonreían bobamente mientras degustaban los panecillos que el príncipe había adquirido.

—hey.— habló emilio para llamar la atención del contrario.— ¿me dirás por qué no viniste el otro día?

joaquín casi se atraganta con el pequeño pedazo de panecillo que había introducido a su boca, tragó con dificultad y miró al suelo durante unos cuantos segundos.

estaba decidido; diría la verdad.

bueno, mitad de la verdad.

—mi padre me encerró en mi habitación, estaba bastante molesto y no me dejó salir, ni ese día ni los próximos dos.— le dijo para después formar una mueca en su rostro.

—ah.— dijo emilio para después meter otro pedazo de panecillo a su boca.— entonces, ya no lo hagas enojar.

joaquín frunció el ceño y le dedicó una mirada llena de confusión.

—¿por qué?

—porque si lo haces enojar, no puedo verte.— hizo una pequeña pausa.— y a mi me gusta verte.

el príncipe sintió las famosas mariposas en su estómago y de igual forma sintió como el calor lentamente subía a su rostro, siendo acumulado en sus mejillas.

—oh.— susurró mientras una gran sonrisa comenzaba a aparecer en su rostro.— a mi también me gusta verte.— balbuceó con timidez.

emilio lo miró tiernamente.

—¿y tu madre? ¿también la haces enojar?— preguntó para después reír un poco.

joaquín sonrió a medias y suspiró para después negar la cabeza.

—no, yo...— volvió a suspirar y tragó saliva.— mi madre murió cuando yo tenía cinco años.

los ojos de emilio se abrieron con sorpresa y no tardó en acercarse lo más posible al chico para abrazarlo con demasiada fuerza.

—lo siento, lo siento, lo siento.— chilló mientras apretujaba con más fuerza al castañito.

una pequeña risa se escapó de los labios del príncipe y negó levemente con la cabeza.

—ya, no te preocupes.— dijo.— ahora suéltame porque mis costillas están sufriendo.

—lo siento.— habló emilio entre pequeñas risas mientras lo soltaba.

—no tienes que disculparte por todo.

—lo siento.

—¡emilio!

ambos chicos estallaron en fuertes carcajadas. duraron así unos cuantos segundos hasta que la risa de ambos paró, siendo el ruido de sus escandalosas risas remplazado por un silencio bastante cómodo.

—¿y tus padres?— preguntó el príncipe mientras se acercaba un poco más al contrario.

el rizado suspiró y formó una mueca en su rostro.

—estoy solo.

—¿solo?

—si, sin mamá y sin papá. estoy totalmente solo.— habló para después suspirar y sonreírle un poco.

—pues ahora ya no estás solo.— dijo joaquín mientras rodeaba el torso del chico y se acurrucaba en su pecho con timidez.— ahora me tienes a mi.

emilio sonrió con ternura para después pasar su brazo por los hombros del contrario y atraerlo un poco más a su cuerpo.

—ahora te tengo a ti.

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OIGAAAAAN
YA SOMOS 10K WTFFF

NETA GRACIAS AJSLAKSLASK

abr duda existencial, ustedes que creen que les pasó a los papás de emilio y a la mamá de joaquín? jsjsjaja

btw perdón por lo corto del cap

y nada, voten y comenten muchoooo

prince ; emiliacoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora