Book I. Bloody Secrets (IzukoxMomo) BNHA.

Strong Wounds

La noticia sobre la infiltración de los villanos en una de las pruebas de estudiantes de la UA ya no lograba tener el impacto que antes solía tener, en realidad las personas solo ganaban ese impacto al pasar frente aquel edificio escolar que había recibido daños considerables tanto internos como exteriores, gran parte de la estructura interior estaba quemada y los escombros se lograban ver desde una distancia de al menos una milla, por dentro era un asunto completamente diferente, parecía que un tornado había pasado, destruyendo ventanas, paredes, escaleras y alguno que otro pasillo. La policía y una escala de cinco o seis heroes habían llegado a la escena, llegando justo a tiempo que los héroes en entrenamiento salían con civiles que habían estado dentro del edificio a la hora del ataque, de entre los futuros héroes solo dos de ellos se encontraban en estado delicado el resto únicamente tenía heridas o en algunos casos quemaduras.

La inquietud y la prensa pronto hizo lo sucedido en algo viral, llegando la noticia hasta la UA, en donde tanto estudiantes como maestro se dirigieron al hospital de la zona en busca de su amigos o en dado caso estudiantes, verlos vivos bastó para calmarlos, pero como era de esperarse terminaron preocupándose por sus heridas. Shinso presentaba cortes profundos y leves en distintas zonas de sus brazos y rostro. Todoroki no solo tenía heridas, había una serie de quemaduras realmente preocupantes en la zona de su hombro derecho hasta su muñeca. Bakugo por su parte mostraba un detoriaramiento muscular en sus manos y muñecas, además de presentar magulladuras en distintas partes de su cuerpo. Midoriya además de tener magulladuras y heridas leves, presentaba lo que eran quemaduras muy leves en sus brazos y tórax. Las realmente afectadas eran Yaomomo y Uraraka, la primera estaba sedada hasta nuevo aviso, sin mencionar que tenía una perforación en su hombro izquierdo, además de tener rosones de algún tipo de energía o fuego en sus piernas y brazos. Uraraka en cambio estaba inconsciente, tenía el aire artificial conectado, la chica en verdad se había salvado, la cantidad de sangre que había perdido era preocupante, además de tener una cantidad de heridas, las más graves de ellas era la que se encontraba en su cabeza y pierna izquierda.

Los únicos concientes del equipo se encontraban sumergidos en un silencio profundo y asfixiante. No se sabía nada de las chicas y eso era algo que no solo los preocupaba a ellos, sus compañeros que los acompañaban estaban en un estado de preocupación, mirando a todas partes en espera de una respuesta.

Bakugo y Todoroki eran los que más alejados se encontraban de sus compañeros, por razones de no querer mezclarse y tener que ser invadido por preguntas que no sentían ni querían responder. Seguramente tendrían que volver hacer la evaluación, porque esta definitivamente la habían reprobado.

- Uraraka Ochaco somos sus padres, por favor díganos cómo se encuentra nuestras hija - Bakugo giró su rostro al oír la voz masculina, fuerte y clara, su mirada fría y distante se situó en el hombre y la mujer que preguntaban por la castaña. Chasqueo su lengua antes de alejarse a paso lento, metiendo sus manos en los bolsillos de su pantalón.

Todoroki hecho su cabeza hacía atrás, se encontraba cansado y muy adolorido pero se rehusaba abandonar el hospital, al menos no hasta saber el estado de sus dos compañeras, quería escuchar que al fin habían abierto sus ojos, solo entonces podría irse en paz. Una imagen fugaz de lo que había visto cruzó por su mente. Esa no era la Yaoyorozu que el conocía, lucia como una persona completamente distinta, como si algo o alguien hubiera poseído su cuerpo por unos minutos. Su cabeza comenzaba a dolerle. Miro y escucho a Kendo llegar junto a Monoma y Tetsutetsu. Ella lo miro de reojo y el hizo lo mismo, después de escucharla preguntar por Uraraka y Yaoyorozu escucho sus pasos acercarse a el.

-¿Te encuentras bien?- pregunto.

No sabía si se encontraba bien emocionalmente, había un par de cosas que tenía que discutir con sus hermanos y sobre todo con ese tipo que se protolocaba como su padre pero que no sabía como tomar su papel enserio - Estoy mejor - fue su respuesta, simple y cortante. Ella no dijo nada más solo se mantuvo a su lado por unos minutos antes de ir con las demás chicas a la cafetería del hospital. Trato de despejar su mente, olvidar por un segundo todo, pronto se dio cuenta que el sueño comenzaba a querer tener una lucha en su interior, sumando eso con su cansancio, dudaba que pudiera ganar esa lucha.