Capítulo V

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Me desperté luego de un rato, cuando noté que el sonido de la lluvia había aminorado.

Al incorporarme, lo primero que pude ver fue a Sasuke, con los ojos cerrados, y una expresión tranquila que casi nunca podía ver. Luego, noté que mi amiga, Sakura, estaba dormida, apoyada en su hombro. Me hubiese encantado tener una cámara a mano para poder inmortalizar el momento. Sonreí, sabía que en el fondo mis amigos iban a terminar juntos. Solo era cuestión de tiempo, y tal vez... De darles una mano.

Decidí incorporarme, intentando hacer el menor ruido posible para evitar despertarlos, y caminé hacia la salida de la cueva. Pero cuando estaba por poner un pie afuera, la voz de mi amigo me sobresaltó.

—¿A dónde vas, teme? —preguntó.

Al hablar, noté que intentó moverse lo menos posible, para evitar despertar a Sakura. Cosa que también fue inútil, porque mi amiga también se despertó.

Siendo honesto, no sabía que había esperado. Éramos ninjas, y estábamos acostumbrados a notar hasta el mínimo movimiento en caso de emergencia.

La susodicha se incorporó, con un casi imperceptible sonrojo al notar en dónde se había acostado. Inspeccionó el lugar en el que nos encontrábamos, como si hubiera olvidado donde estábamos, y luego regresó su mirada a mi, no sin antes mirar a mi amigo con disimulo. Sonreí para mis adentros. 

Con mi amigo pasó lo mismo, solo que noté que había contenido la respiración por un milisegundo, para volver a su actitud despreocupada de siempre.

Si antes había tenido una pequeña duda de ayudarlos a estar juntos, esa se disolvió luego de ver eso. Aunque sabía que probablemente, la mayoría de las personas no lo habrían notado, tal vez exceptuando a Kakashi.

—¿Por cuánto tiempo me dormí? —preguntó Sakura.

—Creo que solo un par de horas. La lluvia ya está parando, así que probablemente en un rato podamos salir, y retomar nuestro camino —contesté. Luego, pensando en que debería iniciar la operación "Unir a mis mejores amigos porque son demasiado tontos como para hacerlo ellos mismos", agregué. —Voy a salir un rato, necesito ir al baño.

Mientras salía, escuché a Sasuke decir que no le importaba a donde fuera, sonreí internamente otra vez.

...

No podía creerlo, me había dormido profundamente en el hombro de Sasuke. Había dicho que iba a dormir solo un momento, pero estaba demasiado cansada: la noche anterior no había podido conciliar el sueño, y me había quedado mirando mi techo hasta el amanecer.  Además, me había parecido sentir cierta calidez y comodidad mientras dormía.

Mientras pensaba en eso, y Sasuke buscaba algo para comer en su mochila, recordé que al dormirme, me había apoyado en la pared de la cueva. No entendía cómo había llegado al hombro de él, ¿Acaso me había movido estando dormida? Era improbable. ¿Él lo habría hecho? Por un momento, mi corazón se alegró ante es posibilidad, pero luego descarté esa idea, era imposible. Es decir, estábamos hablando de Sasuke Uchiha.

—¿Pudiste dormir bien? —preguntó el susodicho con cierta...¿Timidez?

—Si, gracias, Sasuke-kun. Aunque lamento que no hayas podido dormir. Debiste haberme despertado —respondí apenada.

—No tenía sueño, así que no era necesaria despertarte.

—Aun así, gracias —contesté.

Cuando él iba a replicar, un sonido nos interrumpió: parecía el rugido de algún animal salvaje, pero al volver a escucharlo, me di cuenta de que era el ruido de mi estómago, muriendo de hambre. En seguida, noté como mi rostro aumentaba su temperatura, y me sonrojaba.

After the War (NaruHina/SasuSaku) #Wattys2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora