Someone like you (Lauren Jáuregui y tú)

XX:

Camino con lentitud mientras bajo los escalones del jacuzzi, Lauren había decidido llevarme a una cabaña de su familia, estábamos solas en medio de un bosque.

—te ves como una diosa—sonrio mientras camino hacia ella.

Aquel jacuzzi era lindo, la iluminación tenue, Lauren con sus ojos verdes mirándome la iluminación le daba a la perfección.

Queria hacerme desear, quería sentirme alagada por una vez en a vida.

Por una vez sentirme amada.

—ven aquí—fui hacia ella y coloco mis piernas a sus lados.

Ella eleva mi mentón y comienza dejar un rastro de besos por mi cuello.

—eres magnífica—muerde un poco un costado de mi cuello que me hace soltar un leve suspiro.

Sus labios eran suaves al contacto con mi piel, sus manos en mis caderas acariciándola eran como si sus manos fueran hechas para mis caderas

Para mi piel.

—eres lo mejor que me pudo haber pasado—lambio mi hombro.

Bajo el tirante de mi traje de baño, tiré mi cabeza hacia atrás dejandole mis pechos un fácil acceso, sube sus manos hacia mi espalda y sus labios bajan hasta mis pechos.

Besa y muerde con lentitud, mi boca solo sabe suspirar y si estuviera parada mis piernas fallarían.

Sus labios era una deliciosa en mi piel.

Libera mis pechos y aleja el sostén, tirando lo hacía fuera del jacuzzi.

Besa mis pechos mientras susurra cosas románticas y algunas cosas que me hará en este jacuzzi.

Mi cuerpo hierve de deseo, ella sabe todo lo que provoca en mi, desde aquellas mariposas en el abdomen hasta el temblor en mis piernas.

Apreta mi trasero mientras disfruta mi cuello.

—esta noche te haré sentir  como mi mujer—su voz ronca y sensual hace que mi abdomen tenga un remolino.—que digo eres mi mujer.

Besa mis labios con suavidad y lentitud, aquel beso, aquel escenario, sus palabras y sus promesas dulces era lo que mi cuerpo y vida necesitaba.

Sin saber siempre ame a Lauren hasta hoy viví en ignorancia.

—eres mi diosa mi Afrodita, déjame llevarte a mi lugar secreto, déjame hacer algo que jamás olvidaras—me susurra entre mis labios.—dejame hacer el amor __________.

—soy tuya Lauren—sonrie y me besa.

Siento un mal presentimiento sobre esto, pero al diablo hoy solo Lauren y yo.

mientras Lauren disgustaba mi piel veo un pequeño rayo que estaba directamente hacia nosotras.

Lo miro fijo pero había solo la luz de la luna y algunos destellos de luces que habían en la casa, tal vez ese destello sea de las luces incrustadas en el piso.

Eso suena un poco lógico y decidí enfocarme en las caricias y besos de mi ojiverde.

La amo y eso no tengo duda.

Así fue como doy iniciado el desmadre.

JAJAJAJAJAJA