-vamos apurate.
tome mi pesada mochila y me dirigí a la sala de conferencia de la empresa. En un paso rápido a largas zancadas llegué. Entré y todo el equipo estaba en sus puestos. El dirigente, el jefe, me reprochó por mi llegada tarde. Hoy era un dia importante, hoy todo cambiaría. Que más da ¿Peor sería seguir viendo en este estado? O peor aún, no llegar a terminar el siclo de nuestra vida. Pero hoy haríamos la diferencia.
-Hoy... -di un suspiro y continúo.-, hoy, es un día muy importante para nosotros; hoy es el dia en el que todo cambiaría para siempre.- estiró sus brazos en forma de victoria.- Después de 17 años, nuestra reliquia va a salvar a Stumpunk; y no solo eso, va a cuidarnos y a perdurar para siempre en un glorioso recuerdo. Hoy le daremos vida a... -Sus ojos se iluminaron como un niño, apretó los puños y como si fuera poco aquello, se levanto de la silla.- Cragonx.
Todos los de la sala aplaudieron con sonrisas en la boca. De mi parte no, yo solo quería terminar con esto de una vez y poder ser, poder que seamos, una ciudad libres de peligros.
De un momento a otro, nos encontrábamos a 4 pisos subterráneos de la sala en donde estabamos. Todo estaba en un ambiente cálido, a comparación que hacía una temperatura bastante baja a la normar que solíamos tener. Jamas había entrado a este lugar ante, lo juro. Habia aceros cortados, moldadoras, hornos, máquinas que jamas creí que existían, tanques de un líquido que parecía gelatinoso, un estante llenos de frascos que hacían explociones químicas, cables que colgaban de los techos, y una variedad de cosas que no sabría como decribirlas.
Todos se dirigieron a la segunda puerta de el supuesto laboratorio. Una cápsula metálica y pulida estaba en el medio de la sala, todos se pusieron detras de una cinta que había para resguardarnos. Por mi parte no logré ver más, mi baja estatura no ayudaba de mucho, entonces me abrí paso a uno de los rincones, al menos podia ver mejor.
Científicos entraron detras de nosotros y pasaron por arriba de la cinta. Encedieron un tablero y la taquilla marcaba la presión de la cápsula.
- Deberías de ponerte esto.- un chico mas alto que yo; moreno, bastante guapo en decir verdad, jamas lo habia visto aquí, juro nunca haberlo visto antes. Me estiraba unos anteojos oscuros, le agradecí y me los coloqué.
Minutos después la gran presentación. El chico moreno y las demas señoritas desaparecieron. Mi jefe estaba del otro lado de la cinta, coordinando y explicando que locuras estaba por cometer o estaban por hacer en estos momentos. Ya todos con nuestros anteojos puestos un destello salia de la cápsula, que se incrementó a cada segundo que pasaba, no solo eso, sentía que la tapa de la cajuela amenazaba con explotar y volar por los aires. Segundo después la luz se disminuye poco a poco y la puerta se abre sin que nadie la haya tocado. Estaba en lo sierto, la puerta de la cápsula voló.
La luz tenue no dejaba ver del todo bien. Me quité lo anteojos y vi que de adentro de la cajuela una mano humana salía y luego todo un cuerpo. Un chico, solo que se les olvidó ponerle la ropa. Se acercó a uno de los rincones y tomo una manta que estaba ahí y la envolvió en su cintura. ¡vaya que era inteligente el experimento de mi jefe! Aún que mi jefe solo coordinaba este momento y había muchos científicos ¿cómo hacían para arreglárselas sin que nadie los mande? ¿había algo que nadie sabia?; no lo sé.
-les presento a Cragonx- dijo el jefe y señalo al chico que nos miraba atentamente cada movimiento que hacíamos. La gente no dudo en un instante caminar hacía atras por el miedo. Era obvio que temerle, era alto, corpulento, y te miraba de una forma amenazadora. ¿¡Quien no le tendría miedo!? Bueno tal vez yo, acostumbrada al peligro de Stumpunk. Creo que no me afectaba si tenía que lidiar con uno más.
-Cragonx es un prototipo que tiene la capacidad de rastrear, destruir, pero sobre todo salvar a nuestra ciudad.- el chico de tez blanca estaba de brasos cruzados y calló al científico que nos explicaba su función. Entonces él se marchó del sitio donde estábamos Abriendo paso entre la cinta que nos dividia, que la arrancó sin esfuerzo y entre las personas. ¿quién sabe a donde se dirige este?- pueden decirle Hoseok, así responde...- nadie escuchó al hombre, estaban demaciado asustados para prestarle atención, pero yo sí.
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Cragonx y los Dorgunxs » Hoseok
Fiksi IlmiahMallenca López y Franco Binaghi 📲prohibida la copia o adaptaciones de la historia. 📲Pedir permiso al autor para utilizar la historia. Dar crédito al autor.