Los primeros rayos de sol se colaban por la ventana de mi habitación, lentamente abrí los ojos y me costó situarme al principio. Ya llevaba 2 meses viviendo en esta casa y aún no me acostumbraba a despertarme cada día en este lugar.
Me levanté de la cama y miré a mi alrededor para asegurarme, por última vez, de que no estaba soñando. Y no, no era un sueño. Caminé hacia mi armario me vestí con la ropa del trabajo, me dirigí al baño que había justo al lado de mi habitación en la planta de arriba y me peiné. Desayuné algo con prisas y salí de casa corriendo, como siempre, para no llegar tarde.
En la acera de delante de mi casa me encontré a Bobby, mi vecino, aún recuerdo el primer día que le conocí.
*Flashback*
Hacía menos de una semana que me había mudado a Mullingar y hoy por fin me había decidido a conocer a los vecinos, fui a la casa de al lado y me presenté, luego fui a la del otro lado y finalmente a la casa de en frente. Llamé y abrió un señor de unos 50 años.
- Hola buenos días - Dije con mi mejor sonrisa y levantando el pastel que llevaba en mis manos.
- Hola - Contestó él no muy seguro de lo que estaba pasando.
- Me llamo ___, acabo de mudarme de España y soy la nueva vecina de en frente - Me giré para señalar mi casa.
- Oh! Encantado, yo soy Bobby - Dijo sonriendo para después darme dos besos.
- Solo quería presentarme y darte este pastel, espero que te guste - Sonreí lo mas amplio que pude.
- Muchísimas gracias, seguro que estará delicioso. Por cierto... - Dijo cuando ya me disponía a irme.
-¿Si? - Pregunté.
- Si no es mucha molestia preguntar, que hace una chica tan joven viviendo sola en otro país? - Sonrió y yo le sonreí de vuelta.
- Simplemente quería un cambio en mi vida, y bueno mi sueño siempre ha sido poder montar una academia de español en el extranjero, así que me lancé a la aventura y aquí estoy - Levanté los brazos lo que causó su risa.
- ¿Y porque Mullingar? - Preguntó curioso a lo que yo reí.
- Pues ya había venido aquí hace unos cuantos años, cuando era mas pequeña vine en verano a estudiar uno de esos cursos donde mejoras tu ingles y a parte vives con una familia anfitriona, me gustó tanto que no lo pensé dos veces. Este pueblo es precioso - Dije para finalizar mi pequeño discurso.
- Me alegra que te guste Mullingar, poca gente joven quiere quedarse por aquí. Prefieren irse a Dublín, la capital - Contestó siguiendo nuestra conversación.
- Pues no lo entiendo - Sonreí.
- Bueno ___ no te entretengo más, si necesitas algo, ya sabes dónde estoy, no dudes en pedírmelo - Se ofreció sonriéndome.
- Muchas gracias Bobby - Me alejé de su casa diciéndole adiós con la mano.
Y desde ese día Bobby siempre ha sido muy atento conmigo y ha estado allí siempre que he necesitado que alguien me echara una mano.
*Fin del flashback*
El día prosiguió normal, trabajé mi turno y luego fui a mis lecciones de inglés que tenía 3 veces por semana. Volví a casa tarde y solo pensé en comer algo e irme a dormir. Cuando subí a la habitación me fijé que en la casa de Bobby, había una de las luces del piso de arriba encendida, una luz que nunca antes lo había estado. Me pareció raro pero dejé de obsesionarme, ya que probablemente tendría visita. Cuando me recosté en ese cómodo colchón no pasaron mas de 5 minutos y mis ojos se cerraron por completo.
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Flicker - Niall Horan y Louis Tomlinson
Fanfiction____ Contreras a sus 20 años y aburrida de su monótona vida en España decide mudarse a Mullingar, un pequeño pueblo de Irlanda. Persiguiendo su sueño de ser profesora de español en el extranjero alquila una casita y consigue trabajo para emprender s...