Salí corriendo, ya no traía esos dolorosas zapatillas, traía tenis blancos con un toque no muy notorio amarillo.
Llegue a un centro comercial destruido, como siempre traía mi bolsa donde llevaba lo importante para mi, saque el cuaderno y la pluma empecé a anotar todo, dibujé unas cosas raras. Vi unos nachos se veían extraños así que mejor decidí alejarme caminé un poco más y escuche ruidos, no le di importancia pensé que era bola 8.
- ¡Oh por Dios que genial! - al parecer lo grité ya que escuche como salían y me apuntaban con una ballesta y pistola. - Qué mierda. - murmuré, ese susto hizo que suelte la libreta, solo observaba a una chica y a una deformidad a su lado con pelo morado.
- ¿Quién eres? - gruñó la chica - ¿trabajas para Bill?, te vi subir a su pirámide junto a ese idiota de Connor- suspiró.
- Primero baja esa ballesta y tú la pistola - apunté con miedo, mordió mi labio superior - Claro que nunca trabajaría para ese dorito amarillo, oh si, pero no importa, no soy trabajadora de Bill - me agaché por libreta la cerré y guardé en mi mochila.
- ¡Cool! Eso suena bien, te parece si te llevamos a una zona más segura que esta porquería - sonrió la chica extendiendo la mano para estrecharla, la tomé.
- Por supuesto, soy ____ Smith ¿tú?-
- Wendy Corduroy -...- el es Tobi Decidido -señalo al que pensé yo era una deformidad. Solo dije "un gusto" y caminamos hasta el bosque entrando ahí vi cosas raras que fui apuntando en mi libreta, era asombroso.
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-¿Qué es eso? - soltó la chica pelirroja.
-Oh es una libreta donde apuntó todo lo que veo, cosas misteriosas o paranormales - sonreí, aunque creí que la chica diría que estoy loca lo cual fue lo contrario.
-Te agradará el chico sudoroso de la cabaña a donde vamos, es igual, tiene varios diarios acerca de este pueblo, antes de que sucediera el Raromagedon - así que esto es de lo qué me hablo el señor Cipher.
- Perfecto, me encantaría conocerlo - Caminamos por unos 10 minutos y llegamos a esa cabaña.
- Adelante pasa - hablo la chica abriendo la puerta y encontrándome con varias cosas raras.
-¿Quién es ella Wendy? - hablo un señor de unos 50-60 años.
- La encontré en el supermercado, estaba perdida y decidí traerla - soltó la chica muy seria.
- Ya te dijimos que no puedes traer a cuanto extraño se te cruce, acuérdate que no hay muchas provisiones para todos - entro un chico de unos 16 años con unos shorts y playera Blanca, su mirada se fijo en mi, me observo de pies a cabeza, me sentí rara.
- Ella no se quedará mucho tiempo, solo quería que la conozcan, si fue mala idea me la llevo, por mi no hay problema - gruño la chica.
- No me quedaré con ustedes, no pienses que seré una carga más para ustedes, yo de hecho me tengo que ir, ya es tarde - mire la hora y eran las 7 p.m. - mierda -murmuré- fue un gusto otro día los visitó para conocernos y no piensen que soy maleducada, solo que tengo que irme nos vemos - salí corriendo de esa cabaña hasta que sentí que alguien me hablaba volteé y ahí estaba ese chico grosero.
